SOAT y revisión técnico-mecánica: claves para la reducción de siniestros viales
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La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) tiene el objetivo de prevenir, reducir y controlar la siniestralidad vial. A través de estrategias y acciones, busca crear conciencia sobre la importancia del SOAT y la revisión técnico-mecánica.
Revisión técnico-mecánica
La revisión técnico-mecánica y de Gases Contaminantes es una obligación establecida por la ley colombiana. El Decreto 019 de 2012 estipula que todos los vehículos particulares deben someterse a una revisión técnico-mecánica a partir del sexto año de matrícula y luego cada año. Para los vehículos de servicio público, la revisión es obligatoria desde el segundo año de matrícula y cada año subsiguiente.
Además, la Ley 769 de 2002 (Código Nacional de Tránsito) refuerza estas obligaciones para asegurar que los vehículos en circulación cumplan con las condiciones mecánicas y ambientales necesarias. Adicionalmente, la entrada en vigor de Ley 2294 del 19 de mayo de 2023, aclara que, si el vehículo se compró después del 19 de mayo de 2023, la primera revisión deberá hacerse antes de que se cumplan 5 años desde la compra.
Esta revisión asegura que el vehículo esté en perfectas condiciones, desde la eficiencia del sistema de frenos hasta el control de las emisiones. Además, es fundamental para garantizar la seguridad vial y la protección del medio ambiente. La ANSV ha enfatizado en el mensaje que la técnico-mecánica es garantía de seguridad y protege la vida de todos. En Colombia, la seguridad vial es una prioridad debido al alto índice de siniestros viales. En 2023, se registraron más de 7.000 muertes en siniestros viales, según datos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Además, el país enfrenta desafíos ambientales porque las emisiones vehiculares son una de las principales fuentes de contaminación del aire en zonas urbanas.
Con el objetivo de que Colombia tenga un sistema seguro como mecanismo para reducir el número de muertes y lesiones por siniestros viales, se realizó una evaluación de la situación actual del esquema de la revisión técnico-mecánica en el país. Teniendo en cuenta lo relacionado con los procedimientos que se están empleando, criterios de aprobación, equipos, personal, entre otros.
¿Qué se debe tener en cuenta en la revisión?
- El adecuado estado de la carrocería.
- Niveles de emisión de gases y elementos contaminantes acordes con la legislación vigente.
- El buen funcionamiento del sistema mecánico.
- Funcionamiento adecuado del sistema eléctrico y del conjunto óptico.
- Eficiencia del sistema de combustión interno.
- Elementos de seguridad.
- Buen estado del sistema de frenos constatando, especialmente, en el caso en que este opere con aire, que no emita señales acústicas por encima de los niveles permitidos.
- Las llantas del vehículo.
- El funcionamiento de los sistemas y elementos de emergencia.
- El buen funcionamiento de los dispositivos utilizados para el cobro en la prestación del servicio público.
Estadísticas:
- En 2022, el cumplimiento de la revisión técnico-mecánica en vehículos particulares fue aproximadamente del 67 %, según datos del RUNT. En el caso de los vehículos de servicio público fue cerca del 75 %.
- Las pruebas de emisiones revelan que un 25 % de los vehículos superan los niveles permitidos de contaminantes, contribuyendo significativamente a la contaminación del aire en las principales ciudades del país.
SOAT
El Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT), creado por la Ley 33 de 1986, garantiza atención médica oportuna para todas las víctimas de siniestros viales, cubriendo aspectos médicos, hospitalarios e integrales. Además, indemniza a la víctima o a sus beneficiarios en caso de incapacidad permanente o muerte debido al accidente, incluyendo gastos funerarios y de transporte. Todos los vehículos que circulan en el territorio nacional deben contar con el SOAT, excepto los utilizados en labores agrícolas y los que se desplazan por vías férreas.
A pesar de su importancia, el 48 % del parque automotor en el país no tiene SOAT o revisión técnico-mecánica; de estos, el 78 % son motocicletas, el 12 % automóviles y el 10 % otras categorías. La evasión del SOAT afecta la capacidad de atender a las víctimas de siniestros, por lo que debe ser tratada con mayor seriedad.
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