Obras de arte, antigüedades y objetos de colección son activos de inversión para familias, instituciones y empresas
El peritaje es una herramienta de gran ayuda para conocer el valor de una obra de arte, una antigüedad o un objeto decorativo. Muchas veces las personas conviven con objetos de gran valor sin tener ni idea de ello. O todo lo contrario.
Usted puede tener en su casa, institución o empresa obras de artistas emergentes como también puede tener obras de artistas modernos y contemporáneos consolidados, como Fernando Botero, Antonio Caro o Alejandro Obregón. También puede poseer antigüedades que corresponden a las artes decorativas de hace varias generaciones, como porcelanas, mobiliarios, pinturas antiguas, objetos de colección de estilo colonial o vintage, art nouveau, joyas o, si no, objetos de colección como monedas, libros, mapas y manuscritos antiguos, pero no sabe cómo valorizar ni cómo conocer el valor artístico, patrimonial, histórico o simbólico de estas piezas.
Se debe hacer un peritaje por parte de un experto en estas piezas para conocer su autenticidad y valor patrimonial por diversos motivos. Por un lado, en algunos casos puede haber falsificaciones de obras u objetos; por esto se debe estudiar y analizar su procedencia, la época a la que pertenecen, la historia y trayectoria del artista, la estética, el historial de exposiciones; cuáles son sus características, incluyendo la técnica y el estilo. En pocas palabras, cuál es el valor artístico e histórico de la pieza. También existen otros factores que se tienen en cuenta como el soporte, formato, la temática de la obra, el diseño, materiales, estado de conservación, firma, tamaño, antigüedad de la pieza, singularidad, entre otros.
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La tasación de obras de arte es un recurso indispensable para conocer su valor monetario real de una manera objetiva e imparcial.
Esta labor la realizan expertos en arte y antigüedades, y se encuentran en lugares como casas de subastas, galerías de arte y museos. Ellos clasifican y catalogan estas piezas. Tienen una extensa trayectoria académica y laboral, y tienen prestigio en el mundo del arte; también pueden especializarse en un tema específico. La mayoría son historiadores del arte que se especializan en diferentes ramas. "Algunos son expertos en arte precolombino, metalurgia, arte colonial, filatelia y numismática, cerámica, obra gráfica o cristalería, entre otras especialidades", dice Gustavo Espinel, de la galería de arte Ablac.
Las piezas se pueden ofrecer y vender en el mercado primario en galerías y ferias de arte o en el mercado secundario en casa de subastas o anticuarios. “Escojo siempre lo más interesante, lo mejor y auténtico y en el mejor estado. A veces se puede subastar toda una colección particular”, dice Carla Sigismund, experta en antigüedades de la casa de subastas Bogotá Auctions y dueña del anticuario Novecento.
Los peritos de arte y los expertos en antigüedades también pueden estar calificados para realizar la tasación de las piezas si tienen la formación y la experiencia necesaria para hacer el avalúo. También están los avaluadores, expertos en el mercado del arte que pueden otorgar un valor económico y monetario a estas piezas con diferentes fines. El avalúo es la actividad por medio de la cual se determina el valor de un bien, de conformidad con los métodos, técnicas, criterios y herramientas que se consideren necesarios y pertinentes.
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Es fundamental analizar la oferta y demanda actual del mercado de arte y la percepción de los actores de este mercado.
Cuando se trata de familias particulares, al tasar las obras el experto determina el valor total de un acervo hereditario y se utiliza en casos de sucesión; también se tasan estas piezas en casos de divorcio o en casos de compra-venta de colecciones familiares para ser vendidas posteriormente en casas de subastas, en galerías de arte o en el mercado internacional. Catalina Martínez, directora de la casa de subastas Lefebre, dice que estos expertos son un apoyo en los procesos de sucesión, herencias y procesos de divorcio, repartición de bienes, o cuando van a adjudicar un bien a un heredero es necesario que un perito intervenga y el avaluador otorgue el valor a las piezas.
La tasación de obras de arte, así como el avalúo de antigüedades y objetos de colección, se realiza teniendo en cuenta el análisis artístico de las piezas y también se necesita un amplio conocimiento del mercado del arte en Colombia y en el exterior. Para Ricardo Perdomo, de la galería de arte Ablac, es muy importante estudiar el valor del mercado del arte, los costos de producción y la renta que puede generar la obra.
La confianza es fundamental en la toma de decisiones frente a la compra de una obra artística, y esta puede generarse mediante el conocimiento del mercado del arte y los factores que le influyen. En este sentido, es fundamental analizar la oferta y demanda actual del mercado de arte y la percepción de los actores de este mercado, como los artistas, coleccionistas, inversionistas y fondos, galeristas, subastas, museos, ferias de arte y demás actores. Se realiza un análisis de la oferta y la demanda de este mercado y sus cambios a través de los años. Además, el mercado del arte en Colombia y en el mundo ha crecido en los últimos años, y también han aumentado los capitales extranjeros que buscan invertir en los mercados artísticos colombianos.
Por lo general, los peritos del arte son profesionales que tienen una trayectoria considerable y su trabajo de análisis artístico es también un apoyo para la avaluación de las piezas artísticas y antigüedades. Los avaluadores necesitan apoyo de los peritos para conocer el valor artístico de la obra, y el avaluador con su conocimiento sobre el mercado del arte, logra avaluar las piezas, y otorga un precio justo para las personas que desean comprar nuevas piezas de colección. Este avalúo es indispensable para contribuir a la transparencia del mercado del arte y así aumenta la seguridad jurídica de los propietarios y coleccionistas. También ayuda la contribución profesional de especialistas. Por lo general es una labor en equipo, que contribuye a la definición de un valor económico.
En las casas de subastas se estudian, se inspeccionan, se verifican, se avalúan las piezas, y se difunden seleccionadas en un catálogo digital. Según Charlotte Pieri, directora de la casa de subastas Bogotá Auctions, este proceso de peritaje y avalúo de las obras de arte y objetos de colección es transparente, porque la casa de subastas tiene procesos públicos, las subastas son en vivo, y la transparencia sobre los precios es fundamental. Tiene el propósito de dinamizar y expandir el mercado del arte y objetos de colección colombianos, dándole mayor visibilidad tanto en el país como en el exterior. “Las casas de subastas son plataformas comerciales que ponen en relación a vendedores y compradores de bienes”, dice Charlotte Pieri. “La casa de subastas es intermediaria entre unas personas que quieren vender bienes del mercado secundario ya que no son bienes nuevos, son reventa, e intermedian las relaciones de vendedores para consignar sus piezas y potenciar compradores”.
Existe, además, una lista de avaluadores que se pueden inscribir en el Registro Abierto de Avaluadores, regulados por la ley colombiana como avaluadores de la categoría que corresponde a las artes, cerámicas y muebles y objetos antiguos. Este registro es un protocolo a cargo de la Entidad Reconocida de Autorregulación de Avaluadores, en donde se inscribe, conserva y actualiza la información de los avaluadores de conformidad con lo establecido por la ley.
La tasación de obras de arte es un recurso indispensable para conocer su valor monetario real de una manera objetiva e imparcial. El experto en la tasación de obras de arte realiza la evaluación de una determinada pieza artística, a petición de empresas, instituciones o familias particulares. A las empresas e instituciones, les permite hacer los inventarios de avalúo de las colecciones que poseen, les permite calcular monetariamente los activos que tengan en su propiedad como inversión o patrimonio. Estas piezas pueden tener también el interés de ser objeto de investigación por parte de algunas instituciones culturales.
Finalmente, en lugares como ferias y galerías de arte, anticuarios y casas de subastas se fomenta el coleccionismo y se consolida el mercado del arte y antigüedades que pertenece al mercado primario y secundario. Los precios deben ser justos y acordes a la realidad del mercado nacional e internacional. A través de plataformas en línea se pueden promover los compradores de todo el mundo interesados en comprar piezas de Latinoamérica y Colombia. Por ejemplo, existe la plataforma llamada Invaluable, que permite tener acceso al mercado internacional, y esta llega a más de 200 países y comprende todas las casas de subastas del mundo.