El día que Álvaro Uribe liberó a Rodrigo Granda
Crédito: Colprensa
En 2007 el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez liberó a más de 180 guerrilleros de las Farc, entre ellos a Rodrigo Granda, a quien nombró como gestor de paz. ¿Por qué lo hizo?
Este lunes 24 de octubre se conoció que la JEP había amnistiado a Rodrigo Granda por el delito de rebelión, por el que había sido condenado en 2006 a 70 meses de prisión.
Han pasado cerca de 15 años desde que Álvaro Uribe Vélez, como presidente de la república, liberó a más de 180 guerrilleros de las hoy extintas Farc. Entre los nombres destacaba la figura de Rodrigo Granda, conocido como el canciller de esa guerrilla y el subversivo de más alto rango en estar preso.
Los 184 liberados firmaron un acta de renuncia a la guerrilla. Solo una persona no lo hizo: Rodrigo Granda. A pesar de ello, su libertad se hizo efectiva e incluso el entonces presidente Álvaro Uribe lo nombró como un gestor de paz.
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En una alocución presidencial Uribe explicó que las liberaciones se debían a un gesto del gobierno con el que se buscaba que el grupo guerrillero permitiera la liberación de 56 secuestrados, entre los que había tres ciudadanos estadounidenses.
Además, señaló que la liberación de Granda se debió a un pedido especial del entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.
Sarkozy recién se había posesionado y se había apersonado de la lucha por la liberación de Íngrid Betancourt, política colombiana con nacionalidad francesa que había sido secuestrada en 2002 y que fue liberada en una operación del Ejército en 2008.
Sin embargo, el mensaje de Uribe, quien llegó al poder con un discurso antisubversivo, no cayó bien en la entonces guerrilla de las Farc que, por medio de un comunicado, señaló que el acto había sido una cortina de humo para ocultar las investigaciones por parapolítica que se daban en esa época.
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De igual manera, el abogado de Granda, Miguel González señaló ante medios de comunicación que la liberación se dio en contra de la voluntad del guerrillero.
"Las posibilidades y las expectativas de un acuerdo humanitario están en serias dudas y están en punto muerto", dijo González en ese momento.
No solo la liberación de Rodrigo Granda fue polémica, su captura había desencadenado una ruptura diplomática entre el gobierno colombiano y el de Venezuela, que en ese momento era liderado por el presidente Hugo Chávez. La frontera entre ambos países estuvo cerrada por más de un mes.
La captura de Granda se hizo en Cúcuta, Norte de Santander, el 4 de enero de 2005. Pero días después de que en Venezuela se hablara de una posible violación a la soberanía del país, el gobierno colombiano aceptó que había pagado una recompensa por el líder guerrillero.
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El gobierno del presidente Álvaro Uribe descalificó cualquier reclamo y aseguró que Colombia era la víctima, porque el vecino país "daba refugio a terroristas de las Farc".
La frontera fue cerrada el 14 de enero y así se mantuvo hasta el 15 de febrero, luego de una reunión entre los gobernantes de ambos países.
Para las Farc, Rodrigo Granda había sido “secuestrado” en Caracas, capital venezolana, por miembros de la fuerza pública de ese país “corruptos” que fueron comprados por el gobierno colombiano.