Uribismo desunido no deja pavimentar
17 Febrero 2022

Uribismo desunido no deja pavimentar

Las pujas internas en el uribismo e incumplimientos contractuales no han dejado hacer la vía que comunica Casanare con Vichada.

Crédito: Wil Huertas

Una carretera que comunicaría más fácilmente a Casanare y Vichada está en veremos por peleas internas del partido de gobierno e incumplimientos contractuales. Y, mientras tanto, los habitantes siguen sin vía.

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No son tiempos de unidad dentro del uribismo. No solo un sector del partido liderado por María Fernanda Cabal trató de “mamerto” y “liberal de izquierda” al presidente Iván Duque, matriculado en el Centro Democrático, sino que la fragmentación también llegó a Casanare, el departamento estadísticamente más uribista de Colombia. Sus dos últimos gobernadores han sido de la colectividad y fue la región colombiana que más votó por el No en el plebiscito por la paz: 71 por ciento de los habitantes. 

La división del uribismo en el departamento llanero tiene actualmente afectados a Vichada y Casanare. La construcción de una vía en Paz de Ariporo, Casanare, a la que se le han destinado 45.000 millones de pesos estaría en veremos y con retrasos por las pujas internas entre la alcaldesa del municipio y avalada por el Centro Democrático, Eunice Escobar, y la senadora exuribista Amanda Rocío González, quien de facto fue expulsada del Centro Democrático hace unos meses al no otorgarle el aval para retener su curul. 

El expresidente Álvaro Uribe avivó la llama frente a los retrasos hace tres días al exigir “Cero Corrupción: por favor alcaldía y senadora saliente aclarar”. Agregó, además, que  “la obra era para que la inaugurara el presidente antes del 7 de agosto”. También le remitió una queja directamente a la procuradora Margarita Cabello en la que solicitó “investigar la ejecución de los contratos que ante el Gobierno Nacional ha gestionado la senadora Amanda Rocío González, quien fue elegida por el Centro Democrático”.

Más allá de la urgencia que tiene el partido de gobierno para que su presidente inaugure obras, la vía es vital para los habitantes de Casanare y Vichada. Es un proyecto que busca pavimentar 16,7 kilómetros que permitirían el mejoramiento de las condiciones de vida de los llaneros casanareños y vichadenses al facilitar el acceso a servicios básicos como salud, educación y suministro de alimentos. La obra haría que los ciudadanos transiten en minutos un trayecto que en invierno puede tomar horas. Es tan importante que el Tribunal Administrativo de Casanare ordenó su construcción luego de una acción popular. El fallo obligó a mejorar la vía que cruza gran parte de Paz de Ariporo y que comunica con La Primavera, Vichada. Los 16,7 kilómetros son apenas un comienzo de los 197 kilómetros que separan a los dos municipios. Ya hay 49 pavimentados y los 16 ayudarían a seguir completando. 

La obra haría que los ciudadanos transiten en minutos un trayecto que en invierno puede tomar horas.

Este coctel de necesidades fue saboreado por algunos políticos para prometer la construcción de la carretera y fue entonces cuando empezó la puja en el uribismo. La ficha clave, la gestora de los recursos económicos para la obra por medio del Instituto Nacional de Vías, Invías, fue González. Ella llegó al Senado en 2018 con el apoyo del exgobernador de Casanare y consentido político de Álvaro Uribe, Josué Alirio Barrera –el candidato del sombrero–, quien hasta hace pocos días fue una de las cartas del Centro Democrático para ganar la Presidencia de la República. 

La senadora González gestionó los 45.000 millones de pesos que se destinaron para la vía, según lo ha aceptado y el propio expresidente Uribe ha ratificado. Ella consiguió los recursos para otro proyecto, pero como aquel no tenía estudios, fue entonces cuando el dinero aterrizó en la vía secundaria de Paz de Ariporo, que sí tenía los estudios. Parte del aterrizaje de los recursos se dio por un acuerdo entre la alcaldesa Escobar y la senadora González, según lo confirmaron dos fuentes independientes a Cambio. Incluso, una de ellas aclaró: “El compromiso era que se le dejara manejar la contratación de la vía a González”. 

El pacto se desfondó cuando González empezó a descarriarse del uribismo. En julio de 2020 se le rebeló al Centro Democrático por la presidencia de la Comisión Sexta. Según había acordado la colectividad, Ruby Chagui, exasesora de Uribe, sería quien la presidiría, pero González determinó que ella debía ser la elegida porque había sido la tercera votación más grande del partido. Solo le ganaron en votos el expresidente Uribe y Paola Holguín. González logró 45.505 votos en gran parte heredados de su entonces padrino y aliado político Josué Alirio Barrera, quien, como ella, va con sombrero llanero a todas partes. 

Luego del incidente con Chagui, que le valió una investigación del comité de ética del partido, fue quedando al margen de la colectividad hasta que llegó la definición de los avales. Faltando un día para la presentación de las listas al Congreso se conoció que el uribismo no se lo dio. González reaccionó rápidamente y se matriculó en Cambio Radical, partido por el que actualmente busca retener su curul. Esta vez compite con Josué Alirio Barrera, número dos de la lista al Senado del Centro Democrático. El número uno es Miguel Uribe Turbay. 

Luego de ser expulsada del partido, la alcaldesa uribista de Paz de Ariporo “no tuvo otra opción que excluirla de la megaobra que se está haciendo en el municipio”, según le confirmó a Cambio una fuente de la alcaldía. Sin embargo, la propia González le aseguró a esta revista que nunca esperó participación en la obra, de las más grandes históricamente del municipio, y agregó que nunca ha tenido “la mejor relación con la alcaldesa”. Además, negó cualquier intentó de sabotaje a la funcionaria y a la obra. Otra fuente al interior de la administración municipal le dijo a Cambio que “desde que no haya pruebas, no podemos manifestar públicamente nada al respecto”. 

Por estos rumores de sabotaje fue que el expresidente Uribe regañó en su cuenta de Twitter tanto a la alcaldesa como a Amanda Rocío González. La senadora dijo que no tenía nada que ver y le pidió a Uribe que “se retracte públicamente sobre las declaraciones en mi contra”. Explicó que es un “matoneo sistemático” que le viene haciendo el expresidente. “Es por no obedecer a sus caprichos”, dice. 

Los contratistas y la obra

Más allá de señalamientos, reproches y solicitudes de retractación, la obra sí tiene un retraso. A ello se le suma que sus volqueteros han estado en paro porque no les han pagado con puntualidad, al tiempo que los transportadores del municipio buscan que se les dé mayor participación y menor a los externos. El consorcio ganador de la obra es Vías del Ariporo, que tiene los siguientes accionistas. 

Socios Consorcio Vías del Ariporo

El mayoritario tiene como representante legal a Fernando Romero Herrera, expresidente de la Cámara de Comercio de Villavicencio. La empresa, según información del sistema de contratación del país, Secop, solo tiene seis contratos. Cinco firmados en 2018 y uno en 2016. Cuatro otorgados para construir puentes vehiculares. Ninguno por mejoramiento de pavimento, como reza el objeto social de la megaobra en Paz de Ariporo. 

Por su parte, Ajge Ingeniería, la segunda con mayor participación societaria, es una empresa registrada en Bogotá y no tiene registrados contratos públicos en la plataforma estatal. La tercera sociedad, Magnificat Ingeniería SAS, apenas registra un contrato en el Secop para la “adecuación de una zona covid”. 

La última, la del 1 por ciento, también está registrada en Bogotá y uno de sus socios, Auli Fernando Velandia Medina, quien tiene el 49 por ciento de acciones de Hiva Ingeniería SAS, ha incumplido con sus obligaciones como contratista en una obra en Cubará, Boyacá, con Fonade, entidad que solicitó se devuelva el anticipo de $392.146.467 del que fue beneficiario Velandia. La Corte Suprema de Justicia respaldó la reclamación de Fonade en noviembre del año pasado. 

En cuanto a los retrasos de la obra, el diputado Alejandro López, de la Asamblea de Casanare, señala que ella “no ha avanzado ni un 12 por ciento”. La alcaldesa acepta el retraso, aunque dice que va por arriba del 30 por ciento. 

“no ha avanzado ni un 12 por ciento”

En medio de las demoras y las recriminaciones, la senadora Amanda Rocío González explica que la enlodada que el expresidente Uribe le metió por la obra es “para favorecer políticamente a José Alirio Barrera”, el número dos del uribismo al Senado. Casanare es un departamento que históricamente no ha sacado más de un senador, por lo que Barrera y González, hace unos meses aliados, ahora están peleando palmo a palmo por cada voto que consigan en el departamento y, por supuesto, a nivel nacional. 

Entre tanto, el invierno está a la vuelta de la esquina y la promesa de conexión Casanare-Vichada tendrá que esperar, al parecer, en medio de un aguacero de recriminaciones.
 

Los 197 kilómetros de vía deben llegar a la vereda La Hermosa, donde el río Meta divide Casanare con Vichada. En estas aguas está la tonina o delfín rosado.
Los 197 kilómetros de vía deben llegar a la vereda La Hermosa, donde el río Meta divide Casanare con Vichada. En estas aguas está la tonina o delfín rosado.  
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