
Los residuos agrícolas suplirían más del 92 por ciento de la necesidad energética de Colombia
Crédito: Colprensa
Un estudio realizado por la Universidad Nacional de Colombia (Unal) determinó que la biomasa que no está siendo aprovechada tiene un gran potencial para satisfacer la demanda eléctrica del país.

En 2020, la bioenergía o energía procedente del aprovechamiento de materia orgánica se convirtió en la segunda fuente energética más importante de América Latina, después del petróleo, según informes de la Agencia Internacional de la Energía.
En Colombia, la producción a gran escala de cultivos, genera un gran flujo de biomasa residual proveniente de troncos, frondas o maderas de palma de aceite, caña de azúcar, café, banano y árboles madereros. Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (Unal), sede Bogotá y la Universidad de Antioquia, esa biomasa de residuos agrícolas podría suplir un 92,51 por ciento de la demanda energética del país.
“El potencial bioenergético de Colombia, se estima en entre 400–750 pentajulios (PJ) por año. Este se ha calculado utilizando los cultivos más grandes, los desechos animales, los residuos forestales y los residuos urbanos como las principales fuentes de biomasa, considerando la cogeneración y la biodigestión como las tecnologías de transformación”, explican en la publicación del estudio donde se calculó el potencial energético de residuos agrícolas que usualmente no tienen un adecuado aprovechamiento.
Para obtener los datos necesarios que respaldan este estudio, los investigadores realizaron una detallada revisión bibliográfica de los datos oficiales de producción agrícola y priorizaron las biomasas utilizando criterios técnicos, ambientales y sociales.
“Se realizaron visitas técnicas a las cadenas agroindustriales que generaban las biomasas priorizadas para validar los datos encontrados en la literatura e identificar los aspectos logísticos de primera mano que permitieran confirmar la disponibilidad del material, sus características y la posibilidad de implementar la gasificación como un proceso de transformación termoquímica en empresas representativas de estos sectores”, explicó Andrés Montaña, investigador de la Universidad Nacional.
El resultado del estudio determinó un gran potencial energético de las biomasas en Colombia que podría satisfacer ampliamente la demanda eléctrica del país.
