Crédito: Defensoría del Pueblo
Entre tres fuegos: la crisis humanitaria en el Bajo Cauca antioqueño por la guerra entre grupos ilegales
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Las confrontaciones entre el Clan del Golfo, el ELN y las disidencias de las Farc tienen a los habitantes de 33 veredas de la zona rural de Cáceres, Antioquia, en una profunda crisis humanitaria.
Por: Redacción Cambio
Desde hace varias semanas, los pobladores del Bajo Cauca antioqueño viven entre el terror y la desesperanza por cuenta del fuego cruzado del Clan del Golfo, el ELN y las disidencias de las Farc, que se disputan el territorio como si fuera tierra de nadie.
Para profundizar
El municipio más afectado es el de Cáceres, Antioquia, cuyos habitantes, dedicados en su mayoría a la minería, han tenido que abandonar el trabajo, encerrarse en sus casas o irse a buscar suerte lejos de sus hogares. Según la Defensoría del Pueblo, más de 900 familias han tenido que huir por las amenazas de los delincuentes.
La intimidación ha impedido que los mineros y campesinos denuncien los atropellos a sus derechos y provocado que se resignen a lo que les ordenen los grupos ilegales.
Se trata, tal como lo definió la Defensoría del Pueblo, de una crisis humanitaria silenciosa, que se devora la cotidianidad de 33 veredas del municipio y ha profundizado el deterioro social.
La Defensoría se comprometió, junto con el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), a brindar asistencia humanitaria a las 972 familias que están enfrentando una difícil situación.
“Las comunidades confinadas en sus propios territorios están pasando hambre, ya que viven en medio de todos los actores armados. Allí hay presencia del ELN, de las disidencias de las Farc y de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, también conocidas como AGC - Clan del Golfo”, dijo Carlos Camargo Assis.
La intimidación también ha afectado la labor de las autoridades. Los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal en Caucasia fueron notificados que no podrían seguir trabajando y deberían salir de la zona.
El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, pidió el respaldo de los organismos del Estado para devolverle la seguridad al municipio.