Este 5 de diciembre, en el marco de este importante evento, se llevará a cabo el panel 'Biodiversidad y agua: la urgencia de conservar lo esencial'.
Crédito: Freepik
Biodiversidad y agua: la urgencia de conservar lo esencial
- Noticia relacionada:
- Biodiversidad
- Agua
La conservación de dos de los recursos naturales más vitales para el bienestar del planeta es esencial para enfrentar las amenazas del cambio climático. Este 5 de diciembre, en el foro Perspectivas País 2025, expertos discutirán la necesidad urgente de protegerlos para salvaguardar el futuro de la humanidad.
Por: Redacción Cambio
Este clima está como loco. El mes pasado, mientras en España un diluvio implacable causó más de 270 muertos, decenas de desaparecidos y una destrucción inverosímil, y en la Florida una trilogía de huracanes arrasó con miles de casas en la Florida y produjo también numerosas víctimas, el servicio de vigilancia del cambio climático Copernicus anunció, oficialmente, que 2024 será el año más caluroso de la historia.
Semejante paradoja, que prueba la locura de la temperatura mundial, se debe a una sola causa: el cambio climático. Una reciente investigación publicada en la revista Science, hecha por el Instituto de Física Atmosférica (IAP) de la Academia China de Ciencias, la Universidad de la Academia China de Ciencias (UCAS) y la Oficina Meteorológica de Reino Unido, señala que aquel fenómeno tendrá “un impacto a largo plazo que hace del clima un evento que se encamina a lo impredecible”. Y más allá de que las predicciones de las temperaturas sean cada vez más complicadas para los meteorólogos, la triste realidad la resume, en palabras textuales, Zhou Tianjun, científico sénior del IAP y profesor de la UCAS, así como coautor del estudio: 'El futuro que nos preocupa ya está aquí'.
Las alarmas suenan por todos lados. En la edición de noviembre pasado de la revista Nature Communications, otro estudio internacional realizado por el Instituto Max Planck de Química, basado en simulaciones numéricas avanzadas, sugiere una tendencia preocupante: se espera que las muertes relacionadas con la contaminación se quintupliquen, mientras que la mortalidad conexa con la temperatura podría aumentar siete veces.
La conclusión es total: “En el año 2000, alrededor de 1,6 millones de personas murieron cada año debido a temperaturas extremas, tanto de frío como de calor. Para finales de siglo, en el escenario más probable, esta cifra asciende a 10,8 millones, aproximadamente un aumento de siete veces. En el caso de la contaminación del aire, las muertes anuales en el año 2000 fueron de aproximadamente 4,1 millones. Para finales de siglo, esta cifra aumenta a 19,5 millones, un aumento de cinco veces", explica en un comunicado el doctor Andrea Pozzer, jefe de grupo en el Instituto Max Planck de Química en Maguncia y profesor asociado adjunto en el Instituto de Chipre en Nicosia, Chipre.
Esos indicadores reflejan numerosos desafíos a la hora de conservar dos de los recursos naturales más vitales para el bienestar del planeta, cruciales para enfrentar las amenazas del cambio climático. El primero, y también paradójico en estos tiempos de la cólera del agua, es precisamente la escasez de ese preciado líquido: alrededor de 2.200 millones de personas en todo el mundo no tienen acceso a servicios de agua potable gestionados de manera segura, según un informe de la Organización Mundial de la Salud y Unicef de 2023. Entre ellos, 771 millones de personas no pueden acceder ni siquiera a servicios básicos de agua potable, de acuerdo con el Banco Mundial (reporte 2023).
A ello se suma que más de la mitad de la población –4. 200 millones de personas– carecen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura (OMS/Unicef2019). Y que unas mejores condiciones de agua, saneamiento e higiene podrían evitar unas 400.000 muertes al año por enfermedades diarreicas entre niños menores de 5 años (OMS/Unicef2023).
En cuanto a la protección de la biodiversidad, también el cambio climático es uno de los principales desafíos. La subida del nivel del mar, por ejemplo, así como la alteración de los patrones climáticos y la pérdida de hábitats naturales están afectando a muchas especies y ecosistemas.
Según las Naciones Unidas, la naturaleza está en crisis. Hasta un millón de especies están amenazadas por el riesgo de extinción, siendo para muchas de ellas cuestión de décadas. Ecosistemas únicos como partes de la selva amazónica están pasando de ser sumideros de carbono a fuentes de carbono debido a la deforestación. Y el 85 por ciento de los humedales, como las marismas y los manglares, que absorben grandes cantidades de carbono, han desaparecido.
Según un reciente informe de la ONU sobre biodiversidad, cerca de un millón de especies animales y vegetales están en peligro de extinción, en muchos casos en las próximas décadas, más que en cualquier otro momento en la historia de la humanidad. Por eso, el Objetivo 15 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible busca precisamente proteger y restablecer los ecosistemas terrestres, gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, y detener la pérdida de biodiversidad.
Por tales motivos, la ONU recomienda una única fórmula. “Reciclar, seguir una dieta basada en productos locales de origen sostenible y consumir solamente lo que necesitamos son algunas de las cosas que podemos hacer para ayudar. Debemos ser respetuosos con la fauna y únicamente participar en actividades de ecoturismo gestionadas de forma responsable y ética para evitar perturbarla. Las áreas protegidas bien gestionadas contribuyen a la salud de los ecosistemas, lo que a su vez contribuye a la salud de las personas. Por ello, es fundamental que las comunidades locales participen en el desarrollo y la gestión de estas áreas protegidas”.
En resumen, los últimos reportes sobre biodiversidad en el planeta indican que su pérdida es un problema grave y creciente, y que es esencial tomar medidas para proteger y restaurar los ecosistemas naturales para mitigar el cambio climático.
Gran Foro Perspectivas País 2025
Este 5 de diciembre, en el marco de este importante evento, se llevará a cabo el panel 'Biodiversidad y agua: la urgencia de conservar lo esencial', en el que se abordarán los desafíos de proteger estos recursos naturales vitales.
Los panelistas discutirán su interconexión y la importancia de su preservación frente al cambio climático, la pérdida de ecosistemas y el impacto humano. Participarán Carlos Fernando Galán, alcalde de Bogotá; Mariana Sarmiento, presidenta de Terrasos; Julia Miranda, representante a la Cámara; Sandra Vilardy, exviceministra de Políticas Ambientales; y Sandra Valenzuela, directora de WWF. El moderador será Rainiero Patiño, periodista de CAMBIO.
Este evento se llevará a cabo el próximo jueves 5 de diciembre, de ocho de la mañana a cinco de la tarde, en el Hall 74 Centro de Eventos. (Calle 74 #14 – 25).