Crédito: Drummond
Minería responsable: un motor de transformación para el caribe colombiano
La minería, cuando se realiza con sostenibilidad y responsabilidad social, puede transformar territorios, generar empleo y mejorar la calidad de vida. Drummond Ltd., con su operación en el Caribe colombiano, es un ejemplo de cómo esta actividad puede ser un motor de desarrollo regional.
Más allá de consolidarse en el 2023, por octavo año consecutivo, como el primer productor y exportador de carbón en Colombia, su contribución va mucho más allá de lo operativo. A través de sus programas de sostenibilidad, la compañía ha logrado integrar sus operaciones con el desarrollo social y económico de las regiones en las que tiene presencia, específicamente en los departamentos del Cesar y Magdalena.
Desde el inicio de sus actividades, Drummond ha entendido que la minería debe aportar al mejoramiento de la calidad de vida de las comunidades cercanas a sus proyectos, con un enfoque en la educación, la salud, la vivienda y el fortalecimiento del tejido social local. Este compromiso está alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, contribuyendo de manera directa a la erradicación de la pobreza (ODS 1) y al fomento de comunidades sostenibles (ODS 11).
Un proyecto de alto impacto
Uno de los proyectos más destacados que Drummond ha impulsado en los últimos años es su Proyecto de Alto Impacto, con el que ha entregado viviendas a 240 familias en los municipios de La Jagua de Ibirico y Chiriguaná, en el Cesar. Este proyecto social, aprobado por la Agencia Nacional de Minería y trabajado en conjunto con las alcaldías municipales, responde a una de las necesidades más apremiantes de la región: la vivienda digna.
El proyecto no solo ha mejorado las condiciones de vida de estas familias, sino que también ha sido un ejemplo de transparencia y participación comunitaria. Para la selección de los beneficiarios, Drummond implementó un proceso riguroso y transparente que incluyó la conformación de comités de adjudicación con participación de representantes de la comunidad, la Universidad de Santander sede Valledupar y otras instituciones relevantes. Además, se contó con la veeduría ciudadana de la Fundación Universitaria del Área Andina, una entidad de gran prestigio en la región, que ha garantizado el cumplimiento de los principios de transparencia y equidad.
Impulso a la diversificación productiva
La minería, aunque clave en la economía de la región, no puede ser el único motor de desarrollo. Es por eso que Drummond también ha apostado por diversificar la actividad productiva de las comunidades cercanas a sus operaciones. La Incubadora de Emprendimientos es uno de los proyectos más significativos en este sentido, orientado a fortalecer las capacidades de los emprendedores locales en el Cesar y el Magdalena.
Con una inversión superior a los 7.000 millones de pesos, esta iniciativa ha beneficiado a 397 unidades de negocio en la región, proporcionando no solo capital semilla, sino también formación, asesoría y seguimiento a través del Modelo de Incubación y Desarrollo Empresarial (MIDE). La compañía ha enfocado sus esfuerzos en promover emprendimientos sostenibles, contribuyendo al crecimiento de pequeñas y medianas empresas en sectores distintos al de la minería, lo cual es clave para la diversificación económica de la región.
Desarrollo local
Además de los proyectos sociales y de emprendimiento, Drummond ha implementado una serie de acciones que han tenido un impacto positivo en el desarrollo humano y social de la región Caribe. En 2023, por ejemplo, la compañía capacitó a 922 personas del Cesar en el manejo y operación de equipos mineros, brindando oportunidades de empleo y formación técnica a la población local. Los beneficios para los empleados de la empresa también son significativos. Drummond garantiza condiciones laborales superiores a las del promedio regional, incluyendo auxilios educativos, de vivienda y programas de bienestar familiar. Este compromiso con el bienestar de su fuerza laboral se refleja también en la calidad de sus proyectos de infraestructura educativa y de salud, donde la empresa ha invertido en la construcción y mejora de escuelas, hospitales y centros de salud en las comunidades cercanas.
La apuesta por una minería de transición energética
Drummond también ha comenzado a mirar hacia el futuro con una propuesta innovadora y responsable: la transición hacia fuentes de energía más limpias. En este sentido, la empresa está liderando una ruta hacia la carbono-neutralidad para el 2050 que incluye la construcción y operación de un parque fotovoltaico solar, y un proceso de diversificación energética gradual y colaborativa, buscando avanzar en nuevas formas de producción que, además de minimizar el impacto ambiental, sigan contribuyendo al desarrollo económico y social de las regiones que impacta.
La minería bien hecha, como lo demuestra el ejemplo de Drummond, puede ser un motor de progreso para Colombia, siempre y cuando se realice bajo un enfoque responsable que integre los aspectos económicos, sociales y ambientales. No se trata de elegir entre minería o desarrollo, sino de hacer de la minería una aliada estratégica en la construcción de un futuro más justo y sostenible para todos.
En conclusión, la minería bien gestionada tiene la capacidad de construir y transformar territorios, generar empleo, promover y apalancar el desarrollo social y económico, y contribuir a la sostenibilidad ambiental. Drummond Ltd. ha demostrado que es posible combinar el crecimiento industrial con el bienestar de las comunidades, confirmando que la minería, cuando se hace bien, es una fuerza positiva para la región Caribe de Colombia y para el país en su conjunto.
*Contenido elaborado con el apoyo de Drummond.