
La tecnología como aliado para transformar y educar a Colombia
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La transformación digital y el desarrollo de nuevas tecnologías como las inteligencias artificiales han significado nuevos desafíos para el sistema educativo en Colombia.
Por: Contenido especial

Entre los principales retos está cerrar la brecha entre los estudiantes rurales y urbanos, además de la necesidad de transformar el modelo universitario para que responda a las necesidades actuales, así lo destacaron representantes del Gobierno, educadores, expertos en políticas públicas y miembros de la sociedad civil durante el foro Educación en Colombia: Retos y Transformaciones organizado por CAMBIO.
Este encuentro se inició con una reflexión de Federico Gómez Lara, director de CAMBIO Colombia, junto a Óscar Sánchez Jaramillo, viceministro de Educación Preescolar, Básica y Media, quien resaltó la importancia de que el Gobierno descentralice los recursos para que invierta más en educación, sobre todo en las zonas más apartadas y olvidadas.
“Con una inversión de 2 millones de pesos por estudiante podríamos cerrar lo que llamo la fábrica de los guerreros, pues con esto se garantizaría una educación de calidad para los estudiantes y hasta condiciones dignas para los profesores, como lo hacen en Sumapaz”, contó Sánchez Jaramillo.
Los expertos también coincidieron en que es esencial cerrar esta brecha para garantizar que todos los estudiantes, independientemente de su ubicación geográfica, tengan igualdad de oportunidades en el acceso a una educación de calidad.
El foro se convirtió en una plataforma clave para analizar la situación actual de la educación en Colombia. Según el último informe del Ministerio de Educación Nacional, el país ha enfrentado importantes desafíos en términos de equidad, calidad y acceso a la educación para todos los ciudadanos.
Durante el panel de ‘Educación inicial, básica y media ¿A qué nuevos retos nos enfrentamos?’, moderado por Andrea Escobar Vilá, directora ejecutiva de empresarios por la educación, los participantes concluyeron que debe haber una conexión entre la política pública y la realidad de las diferentes zonas del país.
Edna Bonilla, secretaria de Educación de Bogotá, aseguró que “es importante recuperar los aprendizajes perdidos por la pandemia, pero no podemos dejar de lado los aspectos socioemocionales. El año pasado tuvimos 65.651 alertas de niñas y niños que vieron vulnerados sus derechos, y hasta el 30 de junio hemos recibido 40.082 alertas en Bogotá. Debemos trabajar para que los hogares sean realmente territorios seguros”.
Los maestros también fueron parte central de la conversación, pues desempeñan un papel fundamental en la transformación del sistema educativo. Nancy Palacios, directora de Licenciaturas de la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes, comentó la necesidad de invertir en la formación continua y el desarrollo profesional de los educadores para que estén mejor preparados para afrontar los desafíos presentes y futuros de la enseñanza. También planteó la importancia de dignificar esta profesión e impulsar a los jóvenes que quieren ser maestros.
Frente a esto, Juan Carlos Saldarriaga, alcalde de Soacha, afirmó que impulsar a los docentes ayuda a profundizar la autonomía del país y que se debe repensar el modelo educativo para apoyar a los estudiantes que quieran ser deportistas, homologando algunas materias, e hizo un llamado al Gobierno nacional y a los locales para que inviertan entre el 20 y el 30 por ciento del presupuesto departamental en educación.
Por su parte, Daniel Uribe Parra, director ejecutivo de la Fundación Corona, hizo un llamado para que las entidades basen sus decisiones en evidencias, pues esto es lo que permite saber qué está funcionando y qué no, para generar cambios y políticas productivas.
Asimismo, Francisco Cajiao, consultor experto en educación, habló sobre la urgencia de transformar la academia hacia un modelo más flexible y modular, y resaltó la importancia de que los alcaldes y representantes de Gobierno se apersonen de los problemas de la educación para entender qué es lo que realmente necesitan las poblaciones que representan e invertir en ello.
Este tema también surgió en el panel ´Nuevas carreras, formación y emprendimiento de cara al futuro´, en el que Natalia Ariza, exviceministra de Educación Superior y directora del Proyecto Educación Técnica y Tecnológica de la Universidad de los Andes, resaltó la importancia de la formación técnica y tecnológica para responder a las necesidades de las empresas, así como el compromiso del sector privado para apoyar la formación de sus empleados en áreas más especializadas.
Esteban Piedrahita Uribe, rector de la Universidad Icesi, destacó que la educación debe evolucionar, y aunque “la educación superior es innovadora hacia afuera, hacia adentro es conservadora. Debemos asegurar que la educación híbrida sea de calidad, el mundo está cambiando hacia lo digital”, además, invitó a las universidades a romper los paradigmas, pues “sabemos que se van a crear nuevas carreras, pero seguimos siendo muy conservadores a nivel interno y eso debe cambiar. Debemos ofrecer alternativas modulares que permitan estar en una constante actualización”.
En este espacio, el hermano Niky Alexander Murcia Suárez, rector de la Universidad de La Salle, se comprometió a seguir transformando la educación utilizando la tecnología como un apalancador, además, garantizar que cualquier persona tenga las habilidades de emprender, así no decida hacerlo, pues esto también impulsa la innovación.
En esta charla también se enfatizó el papel transformador de la tecnología en la educación. Se discutió cómo las herramientas digitales y la innovación pueden mejorar la calidad de la enseñanza y el aprendizaje, así como la importancia de asegurar que estas tecnologías sean accesibles para todos los estudiantes.
El impacto de la inteligencia artificial en la academia también llamó la atención de los panelistas en la charla sobre ‘Tecnologías y nuevas realidades que transforman la educación’. Allí, Natalia Jaramillo, directora del sector educativo para la región Andina Sur de Microsoft, habló sobre cómo estas tecnologías no solo nos ayudan a ser más eficientes, sino que “nos impulsan a desarrollar nuevas habilidades. Se dice que necesitamos cerca de 200.000 desarrolladores, pero eso pronto va a cambiar porque la IA ya sabe programar, ahora necesitamos personas que entiendan y manejen estas plataformas”.
Ante este escenario, Juan David Aristizábal, CEO de Protalento, afirmó que la IA tomará cada vez más relevancia y estará presente en los diferentes aspectos de la vida diaria. “Debemos preguntarnos cuál será el rol humano en 2050, cuando seguramente la tecnología hará la mayoría de trabajos y es posible que estemos recibiendo regalías de esto. Entonces ¿qué tipo de seres humanos queremos ser?”.
“La revolución tecnológica no para y no podemos quedarnos atrás. Debemos seguir trabajando en la visión de país, apostarle desde ya a ciberseguridad, a biotecnología, turismo sostenible, para que demos saltos cuánticos en la competitividad del país”, complementó Ricardo Pineda, presidente de Hackers del Talento, y añadió: “Las instituciones de educación superior deberían apostarle a ampliar su portafolio, ofrecer educación técnica y tecnológica, para abarcar una mayor oportunidad de negocio”.
En este sentido, Claudia Velandia Gómez, directora de la Firma Angulo & Velandia, habló sobre la nueva forma en la que el Instituto Tecnológico de Georgia busca diseñar su currículo con la tecnología como factor transversal. “Esta universidad entendió la necesidad de estar actualizados, por lo que ahora sus programas son dirigidos hacia estudiantes sin edad, además, incluirá Blockchain así como IA en todo, utilizando esta última tecnología para acompañar al estudiante en su proceso educativo. Además, hacen un enfoque en humanismo y reflexión ética, pues hay que humanizar lo que ya está tecnificado”, explicó.
Por esto último, Enrique González Bacci, vicepresidente corporativo de Talento Humano y Cultura de Bancolombia, expresó que la tecnología no es buena o mala de por sí, es lo que se hace con ella: “No podemos olvidar el sentido humano que nos permite aplicar adecuadamente la tecnología. Las habilidades blandas son las que marcan la diferencia en el mundo digital”.
En este mismo panel, Sindey Carolina Bernal, viceministra de Transformación Digital y mejor profesora de Iberoamérica, hizo un llamado para que se vea a la tecnología no solo como un montón de dispositivos, sino también como una herramienta de cambio ajustable. “No podemos diseñar recetas porque los territorios son diversos y esa es la clave, debemos ir a cada zona para que sean ellos mismos quienes nos digan qué es lo que necesitan y cocrear con ayuda de las herramientas tecnológicas que tenemos”.
Por su parte, Wilson Manuel Mantilla, vicerrector del estudiante del Politécnico Grancolombiano, resaltó que la tecnología por sí misma no apalanca la educación, por ello, hay que diseñar un modelo que brinde facilidades y educación de calidad. “Actualmente tenemos más de 40.000 estudiantes en virtualidad y queremos seguir apostándole a esto, pues entendimos que esta herramienta nos permite llegar a sitios donde la educación presencial no puede”.
Además, afirmó que “aunque la tecnología sea algo esencial y útil en la transformación social, no nos podemos olvidar de las habilidades del siglo XXI, porque la humanización no se puede perder, esa es la quinta revolución industrial".
La jornada concluyó con el conversatorio: ´Formación técnica y el reto de la competitividad´, donde Gilberto Salcedo, presidente de la Asociación Nacional de Entidades de Educación para el Trabajo y Desarrollo Humano (Asenof), aseveró que debe haber una articulación entre MinTrabajo y MinEducación para que haya una formación flexible que permita responder rápidamente a las necesidades de las empresas. “El conocimiento académico para el sector productivo debe ser dinámico, hay que actualizar a los estudiantes constantemente y la universidad actualmente no es eficiente”, comentó.
Por su parte, Mario Pacheco, presidente de Inversiones Roma S.A.S., afirmó que se deben mostrar las bondades del nuevo sistema de formación para el trabajo diseñado por el Gobierno, pues ayudará a resolver este problema, educando a las personas con los perfiles que se adaptan más a lo que se está desarrollando en América Latina.
El foro concluyó con un llamado a la acción y la colaboración de todos los actores involucrados en el sistema educativo en Colombia. Los participantes destacaron que enfrentar los retos de la educación requerirá un esfuerzo conjunto, en el que Gobierno, educadores, padres de familia y sociedad civil se unan para implementar soluciones transformadoras.
Este foro organizado por CAMBIO se erigió como un espacio crucial para visualizar un futuro prometedor en la educación de Colombia. Al superar los retos identificados y aprovechar las oportunidades de cambio, se espera avanzar hacia una educación más inclusiva, equitativa y acorde con las demandas del siglo XXI.
Este evento es organizado por CAMBIO con el apoyo de la Alcaldía de Soacha, la Secretaría de Educación de la Alcaldía de Bogotá, Global, Seguros, el Politécnico Grancolombiano, el Servicio Nacional de Aprendizaje -Sena-, la Universidad de La Salle, la Universidad Icesi y la Fundación Corona.
