Luis Alberto Arango
7 Octubre 2022

Luis Alberto Arango

Control de cambios, otro trino innecesario

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La forma de gobernar del presidente Gustavo Petro a través de Twitter
lejos de dar tranquilidad genera incertidumbre.

Esta semana que termina está marcada por dos actos de gobierno que resaltan la irresponsabilidad del presidente Gustavo Petro y la frágil estrategia de comunicación de su mandato, si es que existe alguna. El presidente, amparado en la manera como él dijo en una reciente entrevista en Noticias Caracol, en la cual afirmó cómo se gana la vida… “como yo vivo de hablar” (*), habló de más al tratar de dar cátedra apelando a sus conocimientos de macroeconomía y de manejo de la banca central.

En la red social Twitter, en donde el mandatario de los colombianos tiene un poco más de 6 millones de seguidores, criticó vehemente que el Banco de la República haya aumentado la tasa de interés de intervención en 100 puntos básicos para pasarla del 9 al 10 por ciento. Petro no pudo contener su deseo de dictar clase en público sobre la manera como el Banco de la República debe tomar sus decisiones. Entendible cuando era candidato, pero como presidente sus palabras son analizadas con lupa y cualquier error se paga muy caro.

En uno de sus trinos, fechado el 5 de octubre de 2022, critica y advierte “La intención real de subir los intereses internos, en contra de nuestra propuesta, tiene que ver es con evitar la salida de capitales por el ascenso de la tasa de interés de los Estados Unidos. Se podía evitar con un impuesto transitorio de remesas a capitales golondrinas”. Subrayo la última frase de su trino, porque sus palabras crearon inquietud en el mercado cambiario. Al siguiente día el dólar rompió, en unos pocos minutos después de su apertura, la barrera de los 4.600 pesos, llegando durante esa fecha a un precio máximo de cotización de 4.657 pesos. El mercado entendió la frase del presidente como la advertencia de lo que podría venir, es decir un control de cambios, y como consecuencia de ello el posible desbarajuste posterior de la economía y la imposibilidad de retirar sus inversiones a voluntad y sin restricciones.

El control de cambios ha sido la señal más clara de debilidad en una economía y la que mayor desconfianza genera en los inversionistas. Lo dicho por el presidente Gustavo Petro no fue algo menor, ni pasó inadvertido. Hizo aumentar la demanda por dólares, pues un inversionista no quiere quedarse atrapado en una economía con control de cambios. El presidente colombiano ya ha tenido recientes desaciertos en sus trinos cuando habla del dólar y de la economía. Son trinos innecesarios y que no aportan nada positivo al manejo del Estado, ni a la economía del país.

“El control de cambios ha sido la señal más clara de debilidad en una economía y la que mayor desconfianza genera en los inversionistas”.

El día en el que el dólar rompió la barrera de los 4.600 pesos, por cuenta de la infortunada frase del presidente, su ministro de Hacienda salió a los medios de comunicación para enviar un mensaje de tranquilidad contradiciendo la idea que había dejado Petro en el aire: “El Gobierno no va a proponer control de cambios, ni a va imponer impuestos a los ingresos de capital (...) No hay ningún temor para estos inversionistas. Más aún celebramos que los capitales extranjeros estén entrando al país" y reafirmó en Twitter: “El Gobierno acoge a los inversionistas de portafolio que invierten en el país”.

Ese mismo día, también en Twitter, el director general de Crédito Público, José Roberto Acosta, reafirmó: “Contundente mensaje, en el que el control a flujos de capitales no es necesario ni útil, sino una POLÍTICA FISCAL SOSTENIBLE que sí garantiza la credibilidad y permanencia de los crecientes flujos netos de capital extranjero …”.

“Es evidente que el equipo económico del gobierno está haciendo todo lo posible para contener la ola de desconfianza que Petro creó…”.

Es evidente que el equipo económico del gobierno está haciendo todo lo posible para contener la ola de desconfianza que Petro creó cuando quiso dar cátedra sobre la forma como se debe manejar la economía del país y en especial cuando se refiere a cómo el Banco de la República debe cumplir con sus funciones constitucionales. Las cátedras de economía que Petro da en público a través de sus redes sociales son innecesarias, no solo por las falacias que expresan muchas de ellas, sino porque algunas veces causan tensión innecesaria en los actores de la economía, por el afán de recibir aplausos de sus seguidores.

Nuevamente tenemos un trino de Petro innecesario, una estrategia de comunicación fallida y la energía de funcionarios del gobierno concentrada en corregir en público y en privado el rumbo del manejo económico del país cuando al presidente, en su propósito de continuar haciendo política, se le olvida que está gobernando y que sus palabras afectan a todo el país. 

 

“Ahora no se trata de “vivir de hablar”, sino de hablar con prudencia, mesura y gobernar más”.

Los importadores colombianos compraron el jueves 6 y viernes 7 de octubre dólares entre 100 y 150 pesos más costosos que la semana anterior por cuenta del trino presidencial. La desconfianza aumentó en los inversionistas institucionales que invierten en la deuda pública colombiana y los empresarios sumaron una razón más para mantener la incertidumbre en las habilidades del gobierno actual para manejar la economía, llevar a cabo su supuesto plan de industrialización y aumentar la competitividad empresarial en Colombia. Ahora no se trata de “vivir de hablar”, sino de hablar con prudencia, mesura y gobernar más.
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(*) Entrevista a Noticias Caracol publicada en YouTube el 23 de Septiembre de 2022. Minuto 51:38.

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