Crédito: Alcaldía de Cartagena
'Puede ser una forma de discriminación pura y dura': director de Caribe Afirmativo sobre propuesta de "Zona de adultos" en Cartagena
En entrevista con CAMBIO, Wilson Castañeda Castro, director de Caribe Afirmativo, explicó por qué están en contra de la propuesta del alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, de crear una "Zona de adultos" para las personas trabajadoras sexuales de la ciudad.
Por: Gabriela Casanova
El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, propuso crear una 'Zona de adultos'. Según el mandatario, este sería un espacio que permitiría a las personas trabajadoras sexuales realizar su labor en condiciones seguras y sanitarias.
Solo se le permitiría el ingreso exclusivo a mayores de edad, mediante controles estrictos de ingreso con escáneres de cédulas originales de ciudadanía, y evitando el ingreso de personas con antecedentes criminales o peligrosas. Para Turbay, el propósito de esta estrategia es luchar contra la esclavitud sexual, la trata de personas y la pederastia.
Sin embargo, no todos los representantes de las personas que se dedican a las actividades sexuales pagas se mostraron de acuerdo con esta iniciativa. Uno de ellos es la corporación Caribe Afirmativo, organización que vela por los derechos de las personas con orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género diversas en Colombia.
Hablamos con Wilson Castañeda Castro, director de la organización, quien explicó por qué está en contra de la medida, especialmente si la zona se ubicará en las afueras de Cartagena, una opción que el alcalde ha considerado.
Discriminación de los trabajadores sexuales
Para Castañeda, este tipo de zonas fomentan prácticas de exclusión y tienden a un aumento de las violaciones de derechos humanos. "Nuestra preocupación estructural es que la propuesta puede ser considerada una forma de discriminación pura y dura", dijo.
Por ello, piensa que esta propuesta conlleva una segregación que no solo sería antidemocrática, sino que enviaría un mensaje erróneo a los cartageneros de que la práctica de las trabajadoras sexuales es "denigrante, inhumana y anticiudadana".
“Para el caso concreto en Colombia, escenarios como Lovaina en Medellín o Santa Fe en Bogotá, que en los años 80 fueron creados como zonas de tolerancia para el trabajo sexual, demostraron con el tiempo ser epicentros de prácticas sistemáticas de violación a los derechos humanos y espacios que, precisamente por la ausencia del Estado, terminaron copados por prácticas ilegales”, comentó.
Control en el ingreso a la zona: ¿criminalización del trabajo sexual?
La propuesta de Turbay incluye un control en el ingreso a la "Zona de Adultos". Si la Policía estará a cargo de este filtro, Castañeda lo considera como algo inapropiado, pues señala que Caribe Afirmativo ha documentado casos de agresión por parte de miembros de la Policía en el Centro Histórico de Cartagena hacia trabajadores sexuales de la comunidad LGBTIQ, producto de la homofobia y transfobia.
“Nuestra Policía termina creyendo que ellas son responsables, que se buscaron esa práctica de violencia por las actividades a las que se dedican”, dijo Castañeda.
El director de la corporación cree que poner a la Policía al frente de estos asuntos sin una perspectiva de derechos humanos puede generar cuatro problemas: “Quienes son propensas a ser víctimas son vistas como victimarias; no centrar la atención en las prácticas delincuenciales que ponen en riesgo a los trabajadores sexuales; no garantizar medidas de atención basadas en derechos, sino en prejuicios sociales; y criminalizar el trabajo sexual o las actividades sexuales pagadas en la ciudad".
Para Castañeda, es importante en esta situación tener en cuenta el fortalecimiento del Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que aún está en formulación. Aunque desde Caribe Afirmativo consideran positivo que la alcaldía contemple que el área donde se desarrollen estas prácticas sea un lugar con acceso a derechos, dice que no es necesario crear una zona específica para ello. Por ello, la corporación propone que estos lugares se definan en el Plan de Ordenamiento Territorial y, de esta forma, sean fruto del diálogo y no una imposición del gobernante.