La Corte llamó a juicio al congresista Pedro Suárez Vacca por decisión que tomó cuando era juez en Boyacá

En la mañana de este 3 de agosto, se conoció que la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia llamó a juicio al congresista Pedro Suárez Vacca por el delito de prevaricato por acción agravado.

Cuando Suárez Vacca ejercía como juez de ejecución de penas en 2008, le concedió prisión domiciliaria a Lelio Nevardo Ávila Santana, narcotraficante que no cumplía con las condiciones para pagar su pena fuera de una cárcel. El beneficio habría sido a cambio de un soborno de 35 millones de pesos, según una investigación del columnista Yohir Akerman.

Además, un año después el funcionario ratificó su decisión teniendo conocimiento de que el detenido había sido condenado por secuestro simple y que no podía dársele tal beneficio hasta que pagara el 60 por ciento de la pena, como lo estipula la legislación en Colombia. 

En ese momento Suárez justificó su decisión asegurando que el detenido era padre cabeza de hogar y que sus hijos podrían quedar abandonados si se dictaba sentencia intramural, según una supuesta inspección judicial.

"Sin embargo, esa inspección no se habría realizado y lo que habría existido era un acta levantada en la oficina del juez", explicó la Sala de Instrucciones de la Corte Suprema de Justicia.

Las pruebas en contra del representante del Pacto Histórico

Como lo reveló la columna de Akerman para CAMBIO, en contra de Suárez Vacca hay varias pruebas, entre esas, diez cuadernos originales, 21 anexos, 37 CDS, un DVD, 118 elementos materiales probatorios con su respectivo rótulo en cadena de custodia, y dos cartas que demuestran la culpabilidad del congresista.

En una de las cartas que muestra la relación del congresista con Ávila Santana se lee: 

“Agradezco que no se comunique a mis celulares, pues definitivamente es mejor evitar sorpresas (no dar papaya). Espero que todo esté bien para usted y su familia, así como para sus hijos. Cuando yo vea que es posible busco la manera de que nos veamos, por ahora es mejor por esta vía y Jhon está autorizado para hablar con usted de mi parte, solo él. Usted entenderá igualmente que no puedo recibir a nadie más ni atender otro asunto, pero cuando yo vea que todo está en situación normal vemos cómo nos comunicamos más directamente”. 

Además, John, que es nombrado en la misiva y que había sido uno de los guardaespaldas del entonces juez, testificó y aseguró en su momento que fue testigo de una reunión presencial entre Vacca y Ávila en un establecimiento del centro de Bogotá, cerca del Palacio de Justicia.