Gregorio Eljach: llegó el día de la última etapa en el 'tour' por la Procuraduría

Según una tradición no escrita del ciclismo, en la última etapa del Tour de Francia no se compite y nadie ataca. Es un día de celebración de los equipos por haber completado la carrera y de disfrute del campeón, que, montado en su bicicleta, brinda con champaña en el centro de París. Todo apunta a que –como ciclista prodigioso de la política– Gregorio Eljach tendrá su etapa de victoria en el Capitolio Nacional.

La plenaria, citada para este 2 de octubre, será de trámite. La mayoría de los partidos cantaron su respaldo por el hoy exsecretario general del Senado horas después de que el presidente Gustavo Petro lo anunciara como su ternado oficial. Sus 12 años en el cargo le permitieron hacer tantos amigos que a su aspiración se subieron desde liberales hasta conservadores, pasando por senadores del Pacto Histórico, Comunes y el Partido de la U.

El favoritismo de Eljach es tanto, que podría quedar como el procurador con más votos en la historia, récord que ostenta Fernando Carrillo, quien en 2017 obtuvo 92 votos. Hasta el momento –y en cálculos de servilleta– Eljach tiene asegurados 93 votos de 105 posibles (hay tres sillas vacías):

• Partido de la U: 10 votos.
• Pacto Histórico: 20 de votos.
• Partido Conservador: 15 votos.
• Partido Liberal: 13 votos.
• Comunes: 5 votos.
• Centro Democrático: 12 votos.
• En Marcha: 3 votos.
• Mira: 3 votos.
• Alianza Democrática Amplia: 2 votos.
• Alianza Social Independiente: 1 voto.
• Partido Alianza Verde: 8 votos.
• Colombia Justa Libres: 1 voto.

A este consolidado podría sumarse algún voto de Cambio Radical. Los 11 senadores de ese partido no tienen una posición unánime y llegarán con libertad de acción a la plenaria. Algunos apoyarán a Germán Varón; otros a Henao, mientras que varios ven con buenos ojos a Eljach. Además, el voto en blanco también es una alternativa por la que ya se decantó el senador David Luna en los siguientes términos: 

“Hoy, ante la inminente elección del próximo procurador, tengo la responsabilidad de actuar en coherencia con mis principios. Por esa razón, he decidido votar en blanco. No considero pertinente que el candidato que llegue a ocupar este cargo sea el ternado por el presidente Gustavo Petro”.

A pesar de las posturas críticas como la de Luna, o las de algunos representantes a la Cámara, solo una catástrofe privaría a Eljach de ganar y que la Casa de Nariño pierda ese pulso. En los últimos días, tanto el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, como otros encargados de la política del Ejecutivo, como Alexander López, han asegurado con doble llave el apoyo de las bancadas a Eljach. Al fin de cuentas, el sacrificio en coherencia del presidente Petro al decidir ternarlo no puede ser en vano. 

“Es una jugada que se entiende por estrategia y, aunque nos hubiera gustado otro nombre, no podíamos permitir que Vargas Lleras pusiera un cercano en la Procuraduría”, dijo un senador del Pacto Histórico.

Aunque la movida de ajedrez del presidente Petro es vista como una medida necesaria para ganarle el juego a Germán Vargas, el Gobierno impulsa la aspiración de Eljach como uno de los primeros ejemplos del nuevo acuerdo nacional. 

“La postulación de Eljach es una bandera blanca que saca el presidente al Congreso en medio de unas confrontaciones que se han dado”, dijo el ministro Cristo días después del anuncio sobre el ternado oficial del presidente Petro.

Esta hipótesis no es descabellada, pues el apoyo a Eljach es uno de los pocos temas en los que coinciden el presidente del Senado, Efraín Cepeda, y la Casa de Nariño. Cepeda y la bancada conservadora no dudaron en anunciar su respaldo al próximo procurador.

“El doctor Eljach ha demostrado en los cargos que ha ocupado ser firme defensor de la separación de poderes, las instituciones, la Constitución y la ley”, dijo el Partido Conservador sobre las razones de su respaldo a Eljach.

Las especulaciones de pasillo apuntan a que el respaldo conservador a Eljach viene con una cláusula de representación burocrática en la Viceprocuraduría. Para el cargo ha sonado el actual viceprocurador Carlos Mario Zuluaga, quien en diálogo con CAMBIO negó esa versión.

“Estoy muy feliz en la Contraloría, donde estamos dando resultados y no quiero moverme de mi lugar de trabajo. Desconozco los acuerdos de la bancada conservadora (...) Siempre he dicho que no tengo interés en la Procuraduría”, dijo el vicecontralor.

También hay versiones que apuntan a un segundo al mando en la Procuradiría cercano al Pacto Histórico o al Partido Liberal, pero ninguna ha sido confirmada.

Más allá de los rumores, el reto de Eljach será encontrar espacio para todos sus patrocinadores, superar el calificativo de aliado del Gobierno y estar aquí y allá, pero en ninguna parte. Su inminente llegada a la Procuraduría será vista como una victoria –costosa, pero al fin victoria– del Gobierno. Pero también como un guiño a la clase política tradicional. En otras palabras, nadie sabe en qué bolsillo estará Gregorio Eljach.