Salud mental en Ibagué: ¿qué pasa con el puente de la variante?
Crédito: Foto: Colprensa - Externos
Recientemente, hubo un nuevo intento de suicidio en el puente de la variante en Ibagué. ¿Por qué los casos de atentar contra la propia vida son repetitivos en este lugar? CAMBIO conversó con Flor Elisa Murcia Zapata, neuropsicóloga y creadora de la Fundación Rescatando Vidas Ibagué, quien reflexiona sobre los hechos que han transcurrido en torno al puente.
Por: Redacción Cambio
Ibagué, como cualquier otra ciudad, cuenta con una larga lista de atracciones turísticas como el Conservatorio del Tolima, el Cañón del Combeima, el Jardín Botánico San Jorge, el Nevado del Tolima y el Museo Panóptico, pero hay cierto lugar que no hace parte de los sitios que ponen en alto el nombre capital del Tolima, y ese es el puente de la variante.
También conocido como el Puente de la vida, es una estructura de más de 100 metros de altura situada en la vía Ibagué–Cajamarca. Este es un punto que ha puesto en conflicto la salud mental en Ibagué, pues es utilizado por algunas personas para lanzarse al vacío.
La problemática ha estado presente desde hace más de 20 años. Las muertes en este sitio continúan siendo un factor preocupante para la comunidad ibaguereña y las autoridades.
¿Por qué ocurre este fenómeno?
Flor Elisa Murcia Zapata, neuropsicóloga clínica y creadora de la Fundación Rescatando Vidas Ibagué, reflexiona sobre los hechos que han transcurrido en torno al puente de la variante.
Murcia explica que en los suicidios siempre hay un plan, es decir, un paso a paso, y un método, que es la técnica que utiliza la persona para “autoeliminarse”. Sin embargo, aclara que, a pesar de que alguien tenga la intención de suicidarse, puede que no tenga un plan estructurado y tampoco un método.
Ese tipo de personas, quienes se limitan a la ideación del pensamiento suicida, al escuchar las noticias sobre alguien que se lanzó del puente, "empiezan a considerar la efectividad del lugar" y lo escogen como un medio para quitarse la vida.
Un ejemplo dado por Murcia es el suicidio de una mujer en febrero de 2019, quien se lanzó del puente llevándose consigo a su hijo de diez años. La noticia llegó a medios nacionales e internacionales como la BBC y El Español causando conmoción.
“Eso (suicidio) se disparó totalmente en aquellas personas que tenían un riesgo bajo o que habían contemplado la ideación de suicidio”, comenta la neuropsicóloga.
Según datos recolectados por Ibagué Cómo Vamos 2022, en el periodo 2017-2021, 2019 fue el año con mayor número de casos de suicidio y de intentos de suicidio en la ciudad con un total de 730 intentos y 60 muertes, a comparación de otros años como 2018, con 442 intentos de suicidio y 40 muertes.
En este caso, las noticias sobre las personas que se lanzaban del puente de la variante “detonaron algo que comúnmente llaman efecto dominó”, precisa Murcia. Este fenómeno provocó que personas de otros municipios de Colombia fueran a Ibagué a acabar con sus vidas.
Murcia no está de acuerdo con el nombre "Puente de la vida", ya que involucra el estado emocional de las personas y eso hace que lo relacionen directamente con los hechos ocurridos. Según la neuropsicóloga, sería correcto no darle ninguna connotación para que así pase desapercibido. “Se equivocaron al darle un nombre, esperaban que se asociaran más a la vida, pero lo que ocurrió fue un efecto contrario”, agrega.
¿Qué pasa con la seguridad en el puente de la variante?
A partir de una acción popular solicitada por la Personería de Ibagué, el Tribunal Administrativo del Tolima, a través de un fallo, ordenó a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y la Sociedad App Gica, encargadas del diseño, construcción, operación y mantenimiento del corredor que, en un término no mayor a tres meses, deberán adoptar las medidas necesarias para evitar que el puente de la variante sea utilizado por personas con intenciones suicidas para lanzarse al vacío.
El fallo también exige que, en un término no mayor a dos meses, la Secretaría de Salud de Ibagué disponga de líneas de atención psicológica con disponibilidad las 24 horas del día y de cámaras de seguridad con el fin de monitorear el puente de forma ininterrumpida.
La decisión responde a la falta de elementos y estrategias de seguridad en el puente, además de la ausencia de las autoridades competentes en el lugar.
Por ejemplo, en septiembre del año pasado había sido instalado un Puesto de Mando Unificado (PMU) en el puente, una iniciativa de Saúl Guzmán, representante legal de las empresas de seguridad Asves y Grusep.
Los empleados de Grusep vigilaron el puente día y noche por 65 días. Según una publicación de El Nuevo Día, salvaron a 90 personas que quisieron lanzarse al vacío.
Aunque su labor evitó varias tragedias, decidieron renunciar debido a la falta de apoyo de las autoridades y entidades gubernamentales locales, que se encontraban ausentes desde la inauguración del puesto de vigilancia.
¿Qué han hecho las autoridades locales al respecto?
A pesar de la poca seguridad en el puente, la Alcaldía de Ibagué ha fortalecido las estrategias de prevención del suicidio, lo que habría reducido la tasa de incidencia de la conducta suicida en un 2,14 por ciento en 2022, según un comunicado de la Secretaría de Salud de Ibagué.
La administración municipal ha creado programas para la prevención del suicidio, como Escuadrón defensores por la vida, que consiste en un equipo de psicólogos que recorren barrios la ciudad ofreciendo orientación en salud mental y sobre líneas de atención cuando ocurre una crisis.
También está habilitada la línea gratuita 123, que está disponible las 24 horas para atender a toda la población en primeros auxilios psicológicos.
Así mismo, la alcaldía oferta el curso de primeros auxilios psicológicos, en el cual los ciudadanos aprenden sobre las bases y herramientas necesarias para ser los primeros respondientes ante una crisis emocional, desastre o evento traumático.