Bruder, la cervecería artesanal de dos boyacenses que llegó a la bolsa de valores

Los hermanos Héctor y Julián Martínez comenzaron a fabricar cerveza de manera artesanal en la casa de su abuela hace 14 años. Ellos son los creadores de Bruder, la primera pyme colombiana en llegar al mercado de capitales. Juntos tocaron la campana de la Bolsa de Valores de Colombia el 23 de abril de este año. 

Los dos hermanos, de 34 y 37 años, nacieron en Boyacá. Ambos estudiaron Ingeniería Química en la Universidad Nacional, y gracias a un intercambio académico en Múnich, Alemania, decidieron adentrarse en el mundo de la cerveza. Aprendieron diferentes estilos de elaboración y conocieron de primera mano las bases de una industria cervecera sólida y diversa. Entonces dijeron: Esto puede funcionar en Colombia. 

“Inicialmente estábamos en un apartamento muy pequeño, luego invadimos la casa de nuestra abuelita, en ocho metros cuadrados, y a partir de ahí empezamos a crecer y a explorar qué podría ser diferente y qué no existía en el mercado colombiano en ese momento”, comenta Héctor. 

La química detrás de todas las cervezas es una triada perfecta entre agua, cebada y lúpulo. A partir de allí son muchas las técnicas y estilos de elaboración que se utilizan, y los hermanos Martínez comenzaron a explorar con ingredientes locales como frutas y especias. Maracuyá, cereza, café, chocolate y caramelo son algunas de las notas que acompañan los sabores de la marca, que hoy tiene un portafolio con 25 productos. 

Luego de tres años dentro de los ocho metros cuadrados que les había brindado su abuela y con los que arrancaron a mediados de 2009, los hermanos se tomaron toda la casa en 2012, pero a medida que el negocio iba creciendo el espacio se comenzó a quedar corto. En 2017 tuvieron que buscar una nueva ubicación, conexa a la planta actual. Para ese entonces su producción ya era de 20.000 litros por año. 

“Todo fue muy rústico al comienzo, en la medida que íbamos vendiendo, íbamos invirtiendo en la compañía. Hemos pasado por varias etapas y distintas versiones y con el tiempo hemos ido actualizando la tecnología y los equipos. Así hemos ido creciendo”, cuenta Julián.

Para capitalizar la compañía, los hermanos hicieron en principio lo que hacen muchos emprendedores: pedir créditos a los bancos. Esto les permitió crecer poco a poco. Pero fue en 2018 cuando se les apareció un ‘ángel inversionista’, como se le conoce en el argot de los negocios a personas o entidades que cazan pequeñas iniciativas empresariales con futuro e invierten en ellas. Eso marcó un punto de inflexión para Bruder. 

Con ello también llegaron nuevos inversionistas interesados en la distribución de la cerveza y los hermanos empezaron a pensar en otras formas de financiar la compañía. 

El camino hacia el mercado de valores 

Hoy Bruder tiene una planta de 1.400 metros cuadrados ubicada en Tunja y 10 puntos de venta que funcionan como pub-restaurante. La empresa emplea a 120 personas y produce 800.000 litros de cerveza al año, su producción aumentó 40 veces en los últimos siete años y el plan ahora es aumentar 10 veces esta producción en los próximos cinco años. 

A medida que la marca y el interés de los inversionistas iba creciendo, también aumentó la necesidad de expandir la compañía. A mediados de 2019, los hermanos tocaron las puertas de ‘a2censo’, el programa de crowdfunding, o financiación colaborativa, de Nuam Exchange, el mercado de valores que agrupa a la Bolsa de Valores de Colombia, la Bolsa de Comercio de Santiago (Chile) y la Bolsa de Valores de Lima (Perú). A través de ‘a2censo’ las personas hacen una especie de ‘vaca’ para financiar start ups. 

Tras cumplir con las condiciones del programa, la empresa logró su primera emisión de deuda en 2022, es decir, puso en el mercado bonos de deuda a su nombre a cambio de financiamiento. 
    
Toda esta experiencia fue lo que llevó a Bruder a tocar la famosa campana en la bolsa. Luego de 18 meses de trabajo, la cervecería artesanal se convirtió en la primera pyme colombiana en emitir acciones preferenciales en el mercado de capitales colombiano a través de ‘a2censo’. 

La compañía tiene la meta de captar 4.500 millones de pesos. Durante las primeras 24 horas de la emisión ya había alcanzado los 528 accionistas, y logró un recaudo de 1.257 millones, el 27,93 por ciento de la meta de capitalización. Esta decisión implica compartir un porcentaje de su empresa con el público, con paquetes de acciones que van desde un millón de pesos. 

Pero las fronteras de Colombia no son el límite para los dos hermanos. Los próximos pasos de la compañía también apuntan al exterior. Bruder ya logró los permisos de exportación del Invima y el certificado de venta libre; también ya se registró la marca en Estados Unidos. “Si el plan se ejecuta correctamente, esperamos el próximo año que ya se pueda conseguir nuestras cervezas tanto en Panamá como en La Florida (Estados Unidos). Por eso estamos haciendo esta capitalización”, cuenta Héctor. 

¿Y qué tienen de especial estas cervezas?

La marca le ha apostado a un segmento premium, y a pesar de tener 14 premios internacionales, buscan mantenerse cercanos al público. Bruder opera hoy en Boyacá y Bogotá, y logró permisos para su distribución en Santander, Casanare, Antioquia, Tolima y Quindío. Eventualmente, quieren llegar a 15 departamentos, y consolidarse en el mercado local. 

Los hermanos mantienen su esencia boyacense, pero son fieles a su inspiración alemana. Bruder significa hermano en alemán, y lo escogieron como nombre no solo por los dos hermanos que realizan sus cervezas con técnicas alemanas, sino para representar la cultura de hermandad que hay cuando se comparte una cerveza.  

“La clave y el foco de Bruder siempre ha sido la calidad. Lo llevamos al extremo que podamos llevarlo. Nos volvimos vegetarianos con el fin de desarrollar más las papilas gustativas para poder catar mejor la cerveza y poder hacer ajustes y mejoras en el proceso que nos den mayor calidad. Esa es nuestra mayor motivación y nuestro motor”, dice Julián.