Estos son los cambios que vienen para el SOAT

Estos son los cambios que vienen para el SOAT

Recientemente, los colombianos que necesitan tomar o renovar el Seguro Obligatorio contra Accidentes de Tránsito (SOAT) se han encontrado con nuevos requisitos: es casi imposible adquirirlo por por canales digitales, y en los puntos de venta fijos se forman largas filas y se exige la presentación de los documentos originales (licencia de tránsito y cédula del propietario del vehículo).

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Así, un trámite que anteriormente se realizaba desde casa y con mucha facilidad hoy es complejo y demanda tiempo. Y no es todo: sumado a esto, el Gobierno nacional tiene listo un paquete de cambios en el funcionamiento del SOAT. 

Una de las razones que motivan los ajustes en el trámite de esta póliza es que, según la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda), en los últimos meses se vienen presentando estafas relacionadas con el SOAT, en las que se suplantan los canales digitales de las aseguradoras. Por esta razón, según la agremiación, se decidió suspender temporalmente la venta digital mientras se toman las medidas necesarias para evitar los fraudes.

Además, Fasecolda lanzó una campaña de información dando recomendaciones para que los usuarios no caigan en estas estafas: desconfiar en ofertas y descuentos injustificados en la venta del SOAT, evitar compartir documentos e información privada en redes sociales y evitar hacer el pago del SOAT a cuentas personales.

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¿Qué cambios vienen?

El SOAT es obligatorio en Colombia, de tal forma que todos los vehículos que se movilizan en el país deben tenerlo, y su falta acarrea sanciones. La razón es sencilla: esta póliza de seguro protege a los involucrados en un accidente, de tal forma que se asegure su inmediata atención médica.

Pero, según Fasecolda, la realidad es diferente a la norma: en Colombia, 47% de los vehículos en circulación no cuentan con este seguro, y esto ha llevado a que todo el sistema de atención de accidentes de tránsito se debilite, poniendo en riesgo su funcionamiento. 

Para el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, “esta situación está desfinanciando al sistema”. En su intervención en el reciente congreso de Andemos, el funcionario explicó que “buscamos superar la gravísima situación que tiene el SOAT y vemos la solución desde varias perspectivas”.

Así, uno de los grandes retos que afronta el SOAT es reducir la evasión y, por esto, una de las medidas que se tomarán es agravar la infracción para que, además de la multa de un salario mínimo mensual vigente, se cause la inmovilización inmediata del vehículo.

El ministro Reyes fue enfático al anunciar que se alista una reglamentación que permitirá que el SOAT se cobre “a la fuerza, es decir, con los mecanismos legales”: si se evade el pago, los conductores quedarían inhabilitados para realizar diversos trámites, como comprar un vehículo nuevo y hacer un traspaso, así como cambiar placas, colores y tipo de servicio que presta el carro o moto.

Pero también la nueva reglamentación contempla premios a los conductores por su buen comportamiento en la vía –no haber reportado accidentes y renovar la póliza antes de su vencimiento–. Así, según la norma aprobada, “Los propietarios de vehículos que en 2020 y 2021 registren un buen comportamiento vial tendrán derecho a un descuento, por única vez, de 10% sobre el valor de la prima del SOAT que aplique para 2022”.

La nueva atención de choques “de latas”

Los cambios también afectan la atención de accidentes simples en la vía. Por ejemplo, la policía ya no intervendrá en casos en los que no se presente más que daños materiales. Así, los involucrados tendrán que conciliar y retirar los vehículos de la escena en el menos tiempo posible.

Para asumir los daños en estos casos, se ha determinado que las mismas aseguradoras que ofrecen actualmente el SOAT tengan a disposición de los usuarios pólizas complementarias y voluntarias que se encarguen de cubrir los daños propios y a terceros en casos de accidentes simples.

Peso a Peso, Paso a Paso es una colaboración periodística entre Cambio y Bancolombia para la educación financiera.

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