La industria tecnológica en Colombia está preocupada por el megaproyecto de conectividad de Petro

El megaproyecto del Gobierno Petro para conectar con el internet el Pacífico colombiano, La Guajira y el Amazonas y que prevé inversiones por más de 2 billones de pesos tiene prendidas las alertas en la industria tecnológica del país que incluso ya le pidió a la Procuraduría que intervenga para que revise la forma en la que se estructuró el negocio. 

CAMBIO conoció seis cartas que desde noviembre de 2023 ha enviado la Asociación de Operadores de Tecnologías de la Informaciones y Comunicaciones de Colombia, Asotic, gremio que reúne a más de 20 empresas prestadoras de servicios de internet de la más grandes del país, al Ministerio de las TIC y a la Procuraduría en las que advierten sobre los problemas del contrato entregado a Internexa que, prácticamente, cerró la puerta a la competencia.

Ese proceso firmado entre el MinTic e Internexa, según lo revelado por CAMBIO, está presentando serios retrasos ya que a la fecha y después de ocho meses de haberse firmado, aparentemente no ha podido llevar el internet ni a un solo hogar. 

Eso pese a que solo 38 municipios fueron incluidos en la primera fase por un valor de 270.000 millones de pesos y que, según el ministro Mauricio Lizcano, iban a tener el servicio antes de terminar 2023. 

“Gracias a este acuerdo, antes de finalizar 2023, se beneficiarán 447.097 personas pertenecientes a 144.225 hogares de estratos 1 y 2, así como las Comunidades Organizadas de Conectividad”, manifestó Lizcano en medio de un evento realizado en Chocó en octubre del año pasado. 

Las preocupaciones de Asotic 

Una de las primeras comunicaciones que el gremio de los operadores envió con relación al proyecto de conectividad en el Pacifico llegó a la Procuraduría General de la Nación. Fue remitida en noviembre del año pasado y en ella se solicita el acompañamiento de esa entidad de control ya que las observaciones que hizo Asotic no fueron tenidas en cuenta antes de firmar el contrato que se entregó de forma directa.  

En la carta manifiestan preocupación por el hecho de que los recursos se hayan comprometido a través de un convenio interadministrativo que aunque sí se podía entregar de esa forma porque se trata de dos entidades públicas (el MinTic e Internexa), “no puede desconocerse que sigue siendo una actuación pública, y por tanto la misma debe adelantarse a través de los mecanismos de elección que establece el régimen de contratación pública en Colombia”.

Pero eso no es todo. Lo que Asotic considera como uno de los riesgos o irregularidades más graves del proyecto es que no se tuvo en cuenta la neutralidad tecnológica, porque Internexa solo proveerá fibra óptica dejando por fuera otras formas de conectar las regiones contratadas, como por ejemplo usando el internet satelital y otras que son utilizadas para zonas apartadas de difícil acceso.  

“El proceso solo permite la participación de un solo tipo de tecnología para prestación del servicio, lo cual viola principios de la ley 1341 de 2009, como son la libre competencia y la neutralidad tecnológica sin que exista una razón objetiva para realizarlo”, reza la carta enviada por la industria al Ministerio Público. 

Además, señalan que no fueron publicadas con claridad las reglas del proceso y solo se otorgaron tres días de publicación de términos de referencia definitivos para presentar propuestas. 

Y es que el documento se publicó el viernes 24 de noviembre de 2023 con cierre el 29 de noviembre de ese mismo año, lo cual genera que se puedan presentar solo quienes conocían que no se iban a acceder a las observaciones.

A eso se le suma que no hubo divulgación en la página de contratación pública Secop desconociendo lo establecido en el artículo 13 de la Ley 1150 del 2007, aplicable a procesos de selección de entidades estatales con regímenes especiales de contratación.

Es por eso que para Asotic es urgente una intervención de la Procuraduría ya que puede existir en este caso una vulneración al respeto a la legalidad y la transparencia. Adicionalmente, se pide revisar “los riesgos que implican una posible vulneración al ordenamiento jurídico, una afectación al patrimonio público, y una violación de los derechos o las garantías fundamentales de los ciudadanos para participar de un proceso de selección”.

Las otras cartas 

Como la industria de la tecnología no fue escuchada en sus primeras advertencias siguieron enviando cartas al MinTic pidiendo más información sobre la forma en que se desarrolla la gran iniciativa del gobierno del presidente Gustavo Petro. 

Tal como lo reveló CAMBIO, Internexa solo se encargará de poner a disposición la red troncal de fibra óptica pero no llevará el internet hasta las casas de las familias beneficiarias y, por ende, falta la última milla. 

Por eso, entre enero y febrero de este año en otras cartas dirigidas a Mauricio Lizcano, el sector dijo que no ha sido claro ni la forma como MinTic e Internexa pretenden seleccionar a los prestadores de los servicios y la función que podrán cumplir los ISP o los operadores que se encargarán de hacer esa tarea. 

Lo que más preocupa es que hay una restricción tecnológica y solo se pueden presentar proyectos donde hay fibra óptica aunque  muchos de los operadores no la tienen y por eso los costos no les darían generando que no logren un cierre financiero. 

Eso significa que es muy alto el riesgo de que no se concluyan los proyectos, no haya conectividad y se terminen desviando los recursos públicos dejando en evidencia una verdadera improvisación del Gobierno en la ejecución de uno de sus programas bandera. 

Además, el programa para llevar internet se estaría dejando en manos de pequeños prestadores que no pagan impuestos, no están legalizados y no cuentan con la experiencia para proveer de internet a los más de 100.000 hogares que el ministerio prometió conectar.

Si bien se conoce el documento de Asotic, otros operadores también se pronunciaron en ese mismo sentido, asegurando que los incentivos podrían volverse negativos al generar subsidios cruzados en manos de operadores con poca experiencia, con poca legalidad.