Galeón San José: así encontraron el tesoro

Desde hace dos años la Presidencia de la República dejó en manos de la Armada Nacional y la Dirección General Marítima el trabajo de detallar en el lecho marino los tesoros que guarda el galeón San José.

“La Armada de Colombia desarrolló la planeación, preparación y ejecución de cuatro campañas de observación en las que se emplearon equipos de alta tecnología y herramientas informáticas para el procesamiento de la información y la comprobación del estado del naufragio”, señaló el almirante Gabriel Pérez, comandante de la Armada. 

Para lograrlo fue necesaria la utilización de un vehículo operado remotamente (ROV) y la competencia de un grupo interdisciplinario de especialistas colombianos que garantizara la seguridad y la protección de este tipo de contextos arqueológicos sumergidos.

Las imágenes registradas por las cámaras de última tecnología dejan ver partes de la embarcación en las que reposan varios cañones, alforjas y hasta piezas completas de una vajilla.

“Se desvirtúa un posible saqueo a la embarcación, hundida en el siglo XVII en una zona cerca de Cartagena, pues es custodiada por varias fragatas de la Armada”, advirtió el almirante.

La pelea por el San José

El San José era una de las embarcaciones insignia de la corona española –con 66 cañones y el sello de delfín que la caracterizaba– para el transporte de riquezas de América a España, durante el reinado de Felipe V. 

Según historiadores colombianos, el último viaje del San José ocurrió a finales de 1708.

Cuando navegaba de México hacia Cartagena, con destino final La Habana, fue sorprendida por el buque inglés Expedition, que lo hundió y causó el naufragio de más de 600 navegantes y cargamento de oro, plata y otras piezas valiosas.

Con la emboscada se hundieron las esperanzas españolas de superar a los ingleses en la Guerra de sucesión.

El 5 de diciembre de 2015, el presidente Juan Manuel Santos le anunció al país que el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (Icanh), en conjunto con la Armada de Colombia y científicos internacionales, habían dado con la ubicación exacta donde reposaba la embarcación española.

El descubrimiento originó una fuerte disputa entre Colombia y España para definir quién es el dueño del navío, cuyo avalúo oscila a primera vista entre los 1.500 y los 10.000 millones de dólares en lingotes de oro y plata, armas y diferentes tipos de moneda.

Colombia, para proteger la embarcación como patrimonio nacional, expidió el decreto número 204 de 2022. España, por su parte, exige que se le otorguen los derechos sobre el galeón, basada en las normas de la Unesco, que establecen que al tratarse de un “barco de Estado”, tiene jurisdicción sobre la nave.

Otras dos naves

La exploración permitió descubrir otras dos embarcaciones naufragadas: un galeón de la época colonial y una goleta de la época republicana. El nuevo hallazgo será estudiado por el Ministerio de Cultura y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (Icanh).

 “Con la tecnología podemos no solo llegar a ellos sino proteger este patrimonio sumergido, y buscar mecanismos sostenibles de financiamiento para su extracción en el futuro, protegiendo todos los hallazgos como patrimonio de la nación e indivisibles”, señaló el presidente Iván Duque.