Mi libro favorito: "El último encuentro"

¡Difícil tarea pensar en un solo libro! Cada momento de mi existencia está asociado a distintas historias narradas en ellos, unas reales otras ficticias, pero la gran mayoría dejando huella en mis días. La memoria me lleva a alrededor de los 10 años cuando mi padre puso en mis manos un libro enorme, versión adulta (¡me di cuenta con la edad!), Las mil y una noches, que me transportó durante muchas tardes al lejano oriente, a otra cultura, a otras maneras de entender la vida, y a la magia de las letras. ¡Mil historias en un solo libro! Esas páginas que toqué durante muchos días serían la puerta de entrada a una de las mayores pasiones de mi vida.  

Si tengo que escoger uno diría El último encuentro, de Sándor Márai, libro que me atrapó de una manera inusitada, llevándome a leerlo varias veces seguidas, buscando extraer y sentir toda su extraordinaria belleza. La historia trata de dos amigos, inseparables de jóvenes, que se encuentran después de muchos años de distanciamiento para entablar una conversación, casi un monólogo que, con una tensión palpable que va en aumento a medida que avanza, nos va desvelando los misterios de la relación.

Con una prosa exquisita y perfecta Sándor Márai nos transporta desde fastuosas veladas al final de una época, la decadencia de Europa después de una implacable guerra. Un secreto y el recuerdo imborrable de una mujer es el centro de la historia, a través de la cual el escritor expone magistralmente una crónica de amistad, amor, honor y traición.

Al final, sin explícitamente responder todas las preguntas que van surgiendo, entendemos que en realidad se trata de la búsqueda de la verdad como lo único que nos puede liberar. Esta obra me hizo sentir la importancia de poder hurgar en lo recóndito de nuestros corazones, en las debilidades y profundidades del ser humano, nuestras limitaciones, para, a pesar del dolor que esto puede causar, al mismo tiempo sentir la pulsión imparable que significa estar vivos. Magistral y entrañable.