Everth Veloza, alias ‘HH’ desmiente a Chiquita Brands y revela las empresas que patrocinaron a las AUC

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En una entrevista realizada por Julio Sánchez Cristo para La W, Everth Veloza, alias ‘HH’, excomandante del Bloque Bananero de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), reveló desde la cárcel de Itagüí detalles sobre la relación de las empresas bananeras con los grupos paramilitares en Urabá. Veloza afirmó que empresas como Chiquita Brands financiaron voluntariamente a las AUC, desmintiendo las afirmaciones de la compañía sobre haber sido obligada a hacerlo. Según el exparamilitar, las bananeras no solo contribuyeron económicamente, sino que también facilitaron la entrada de armas y otros recursos para apoyar la causa paramilitar.

Veloza explicó que, al llegar a la zona bananera, su misión fue liberar los cultivos de banano de la influencia de los sindicatos y la guerrilla, asegurando así el control de la producción y el comercio del banano. Esta cooperación con las empresas no fue forzada bajo amenaza, sino parte de un acuerdo que beneficiaba tanto a los paramilitares como a las bananeras. El excomandante mencionó que desde 1995 se financiaba a las Autodefensas con dinero de las empresas bananeras, y con la creación de las cooperativas Convivir, se estableció un mecanismo de financiación "legal" liderado por Raúl Hazbún, conocido como ‘Pedro Bonito’.

Además, Veloza detalló cómo la colaboración de Chiquita Brands, a través de su filial Banadex y con la complicidad del jefe de seguridad en Colombia, permitió la entrada de armamento para los paramilitares. Estas actividades se realizaban a través del puerto, con envíos encubiertos de armamento en cargamentos de urea. Este apoyo logístico y financiero por parte de las empresas fue crucial para la expansión y el fortalecimiento del control paramilitar en la región.

El excomandante también relató que las fincas bananeras estaban bajo vigilancia constante, con trabajadores y administradores que colaboraban con las AUC. Estos individuos, como alias ‘Pimpino’ y ‘Walter’, actuaban como intermediarios y supervisores, asegurándose de que no hubiera paros laborales y que la producción de banano continuara sin interrupciones. Veloza resaltó que los paros representaban una amenaza para la economía de los bananeros, y por ende, se tomaron medidas drásticas para evitarlos, incluso declarando a los trabajadores en paro como objetivos militares.

Finalmente, Veloza señaló que, además de Chiquita Brands, otras grandes empresas también financiaron a los paramilitares, mencionando a las multinacionales DOLE y las gigantes de bebidas gaseosas Postobón y Coca-Cola. Estas empresas, junto con algunos ganaderos de la zona, participaron en la financiación de las actividades paramilitares, contribuyendo de manera significativa a la perpetuación de la violencia en Urabá. La entrevista devela la compleja red de intereses y colaboraciones entre las empresas y los grupos armados, reflejando el impacto de estos nexos en la dinámica del conflicto armado en Colombia.

Escuche la entrevista completa a continuación: