Azules al rojo vivo: los conservadores quieren tumbar a su presidente
8 Febrero 2023

Azules al rojo vivo: los conservadores quieren tumbar a su presidente

Crédito: Fotoilustración de Yamith Mariño

Carlos Andrés Trujillo, quien todavía preside el Partido Conservador, tendría sus horas contadas como dirigente de esa colectividad. ¿Por qué lo quieren sacar y quién sería su reemplazo?

Por: Andrés Mateo Muñoz

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El senador Carlos Andrés Trujillo tambalea como presidente del Partido Conservador, por la inconformidad de otros pesos pesados de su partido que ya tienen cocinada su salida.

Trujillo, un político antioqueño que inició su carrera en Itagüí, llegó en junio de 2022 a la presidencia del Partido Conservador en reemplazo de Omar Yepes Alzate, en medio de un remezón en esa colectividad. Pocos días después del triunfo de Gustavo Petro en la segunda vuelta presidencial, Trujillo logró unir a más de 30 congresistas conservadores para expresar su apoyo a los proyectos que fueran a presentar los nuevos inquilinos de la Casa de Nariño. El respaldo, materializado en una carta, fue celebrado por el mismo Petro:

El documento causó que el entonces presidente del Partido Conservador, Omar Yepes, renunciara. En ese río revuelto, Carlos Andrés Trujillo consiguió llegar a lo más alto de su partido. A partir de allí, los conservadores empezaron a cruzar guiños con el Gobierno. El primero fue la designación de Guillermo Reyes, muy cercano a Trujillo, como uno de los integrantes del equipo de empalme y posteriormente como ministro de Transporte. Luego, los conservadores devolvieron el gesto apoyando a Carlos Hernán Rodríguez, el candidato de Petro para la Contraloría. Finalmente, en septiembre del año pasado hicieron oficial su posición como partido de Gobierno.

Sin embargo, la luna de miel entre el Partido Conservador y el Gobierno nacional no duró mucho. En el debate de la reforma tributaria, los azules tomaron una posición crítica frente a esta propuesta y exigieron una mayor representación en el gabinete. El agravante es que Guillermo Reyes nunca ha sido considerado como un conservador original, pues es cercano a Trujillo pero no al partido. 

Aunque las discrepancias fueron saldadas temporalmente por las gestiones de los ministros José Antonio Ocampo y Alfonso Prada, el no nombramiento de fichas conservadoras en el 'cuerpo' del Ministerio de Transporte volvieron a tensar la relación entre ese partido y el Gobierno. Las direcciones de el Invias, la Agencia Nacional de Infraestructura, la Agencia de Seguridad Vial y la Aerocivil eran plazas que los conservadores tenían en sus cuentas y al día de hoy no tienen a nadie allí, algo que no ocurría en décadas.

Con la llegada de 2023, año en que el Gobierno presentará sus reformas sociales, los conservadores más tradicionales esperaban que Trujillo fuera más exigente con el presidente Petro y fijara una postura fuerte, como sí lo ha hecho César Gaviria y el Partido Liberal, pero esto no ocurrió. Lo único que se conoció fue un tímido comunicado en el que el Partido Conservador aseguró que estudiaría qué posición tomar frente al paquete de reformas.

Ante esta situación, según fuentes consultadas por CAMBIO, los integrantes del directorio nacional del Partido Conservador tienen lista una carta en la que piden la salida de Carlos Andrés Trujillo, a la que solo le falta una firma para conformar una mayoría simple. La estructura directiva nacional de esa colectividad está compuesta por 18 personas, y la carta ya fue firmada por nueve de ellos.

Entre los rebeldes al presidente de los conservadores está el cacique electoral del Atlántico Efraín Cepeda, uno de los opcionados para reemplazar a Trujillo. 

Trujillo contratacó y presentó otra carta firmada por un grupo de conservadores de la directiva nacional respaldándolo e indicó que se reuniría presencialmente con el sector disidente para arreglar las diferencias.

¿Un revés para el presidente Petro?

Con esta crisis interna de los conservadores, las alarmas están encendidas en la Presidencia, pues, al salir Trujillo, el Gobierno perdería un importante aliado en el Congreso y también en regiones como Antioquia y La Guajira pensando en las elecciones territoriales de octubre.

Sea Cepeda, o cualquier otro conservador, el que reemplace a Carlos Andrés Trujillo, lo cierto es que la posición de los azules será mucho menos benevolente y diplomática con el Gobierno de Petro. Esto supone un riesgo para el trámite legislativo de reformas fundamentales para el Ejecutivo como la de salud.

Igualmente, el retorno de los conservadores a su hábitat político natural volvería a acercarlos a otras fuerzas como el Centro Democrático, Salvación Nacional y hasta al expresidente Andrés Pastrana, quien está a la espera de que el Consejo Nacional Electoral le permita revivir su partido Nueva Fuerza Democrática.

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