Las extrañas movidas presupuestales de Gerardo Vega para justificar inversiones en la compra de tierras

Crédito: Foto: Colprensa

3 Marzo 2024

Las extrañas movidas presupuestales de Gerardo Vega para justificar inversiones en la compra de tierras

Según documentos de la Agencia Nacional de Tierras, su exdirector movió más de 600.000 millones de pesos de esa entidad a un fondo creado por el acuerdo de paz, con el fin de justificar su ejecución presupuestal y pese a que el presidente Petro había ordenado manejar directamente los recursos.

Por: Paola Herrera

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En agosto de 2023, el presidente Gustavo Petro les jaló las orejas a los miembros de su gabinete por la baja ejecución presupuestal e incluso amenazó con sacarlos si no se ponían las pilas para mejorar las cifras. Según el Ministerio de Hacienda, a solo cuatro meses de acabarse el año, la plata ejecutada para inversión del Gobierno apenas alcanzaba un 17 por ciento.

Para ese entonces, el mandatario de los colombianos les pidió a los ministros que de ser necesario hicieran ajustes en sus entidades adscritas y adjuntas, y la primera que lo hizo fue la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, quien le pidió inmediatamente la renuncia al director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Gerardo Vega, uno de los que menos resultados estaba dando en el sector. 

No obstante, la salida de Vega no ocurrió en ese entonces, ya que él logró convencer al presidente Petro de darle una oportunidad a cambio de empezar a mostrarle resultados con relación a la aplicación de la reforma rural integral y la compra de tierras, cuyos avances hasta ese momento eran muy pobres. 

Fue así como en octubre de esa misma vigencia, al señor Vega y a su equipo en la agencia se les ocurrió una jugada para poder demostrar gestión y asegurar sus puestos en la entidad. 

A partir de una decisión que tomaron para trasladar el presupuesto de un bolsillo a otro, mágicamente las cifras de ejecución empezaron a aumentar, aunque en la práctica la plata seguía congelada y no se estaba utilizando para comprar tierras como era el propósito de aquel llamado que hizo Petro. 

Disfrazaron la ejecución

Si una entidad no ejecuta su presupuesto o gasta menos de lo que le dieron, significa que no necesita esos recursos. Aunque en el caso de la Agencia Nacional de Tierras siempre se dijo que la plata sí se necesitaba para poder implementar la reforma agraria, lo cierto es que Gerardo Vega no logró hacerlo directamente ya que, según él, le pusieron muchos obstáculos para adquirir los predios y por eso sus resultados iban tan mal. 

Cuando la Contraloría General de la República también se pronunció por el problema que podría representar la baja ejecución presupuestal, a Vega le tocó prender el acelerador y empezó a buscar la forma de trasladar los recursos. En primer lugar lo intentó con Findeter pero se le apareció la virgen cuando recordó que existía una subcuenta en el Fondo Colombia en Paz (FCP), que le pertenecía a la ANT y que la podía usar como patrimonio autónomo.

Entonces, firmó el convenio con ese consorcio con el objetivo de que en el Fondo Colombia en Paz se realizaran “actividades destinadas a la adquisición de predios para personas en proceso de reincorporación; comunidades étnicas y campesinas en los municipios PDET, en el marco de la Reforma Rural Integral”. Es decir, para que fuera el fondo el encargado de comprar las tierras.

Para ese propósito, Gerardo Vega le entregó al FCP un total de 430.000 millones de pesos y así le pudo demostrar a sus jefes, -la ministra Mojica y el presidente Petro-, que la plata de su entidad ya se estaba ejecutando. 

El problema es que dicho fondo tiene un régimen especial, lo que significa que no tiene vigencias y puede gastarse la plata cuando quiera. Por eso es que en noviembre de 2023 los dineros transferidos a través de un convenio seguían quietos, y pese a que la agencia disfrazó la supuesta ejecución, a esa fecha no se había comprado ni un solo predio con esos recursos. 

“Eso quiere decir que hubo una vulneración al principio de eficacia y eficiencia en la inversión, porque se manda la plata a patrimonios autónomos que no tienen el afán de ejecutar”, explicó una fuente a CAMBIO. 

Una nueva jugada

Sumado a lo anterior, el exdirector de la Agencia Nacional de Tierras hizo una nueva movida presupuestal que le permitió seguir mostrando resultados, aunque estos fueran solo en el papel.

A finales de noviembre, movió a través de la firma de un otrosí al convenio otros 215.000 millones de pesos al Fondo Colombia en Paz, lo que le permitió seguir subiendo sus índices de ejecución, a pesar de que estos no se materializaban en la práctica.

Lo hizo tres días después de que el propio presidente Petro firmara una directiva ordenando a las entidades que no se hicieran este tipo de jugadas, que no transfirieran recursos a fiducias y que los ejecutaran directamente, ya que, al final del día, los dineros terminaban en fondos y cuentas, y no en los programas bandera del Gobierno nacional.

Como si esto fuera poco, el exdirector de la ANT se encontró con una sinsalida a la hora de justificar el traslado presupuestal que hizo desde la entidad al Fondo Colombia en Paz, ya que los dineros debían usarse para comprar terrenos en todo el país, pero este fondo se limita a los 170 municipios llamados PDET.

¿Qué hacer entonces? El exfuncionario optó por volver a la Casa de Nariño a pedir que le permitieran cambiar el objeto del convenio que firmó con el FCP, porque, en últimas, esta sería la forma de empezar a mostrar resultados tangibles. En este proceso, aunque el propio Dapre frenó esa modificación, según le dijo una fuente a CAMBIO, desde Palacio se habrían hecho tres llamadas a funcionarios del fondo, dando su bendición para que así se diera. Y, en efecto, así se dio.

De esta forma, las entidades dieron luz verde para que el objeto del convenio firmado un mes antes se cambiara sobre la marcha y abriera el espectro para poder comprar tierras en todo el país y ya no solo en los municipios donde se está implementando el acuerdo de paz. 
 
Expertos en contratación consultados por CAMBIO explicaron que un objeto de un convenio es lo único que no se puede cambiar. También advirtieron que hacerlo es una falta disciplinaria porque al modificar el objeto también cambian las obligaciones específicas del acuerdo, afectando todo lo que se contrató y por lo que se pagó. ¿Por qué no se hizo un nuevo contrato y, por el contrario, se pidió la ayuda de Presidencia para hacer esa maniobra? 

No le temen a las autoridades 

CAMBIO pudo establecer que esa operación fue hecha por Tony Lozano quien lideraba la dirección de Acceso a Tierras y era considerado la mano derecha de Gerardo Vega en la ANT. El 24 de octubre de 2023, según le dijo una fuente a CAMBIO, se le habría escuchado decir a Lozano que él no le temía ni a la Procuraduría ni a la Contraloría y que lo único que le preocupaba era un proceso penal. 

Lozano llegó a ese cargo cuando Gerardo Vega sacó a Nury Luz Peralta Cardozo, quien había sido recomendada por la ministra Jhenifer Mojica y solo duró tres meses allí porque según Vega, era muy cobarde y no quiso firmar los procesos de compraventa de tierras que le ordenaba el director. 

“Yo no quería ni corruptos ni cobardes a mi lado y en la Agencia Nacional de Tierras hay mucho temor. Les da temor hacer los cambios que hay hacer y si eso sigue así, no habrá reforma agraria”, señaló Gerardo Vega. 

En diálogo con CAMBIO, el exdirector de la agencia también explicó que el presupuesto que se destinó a la ANT en 2023 fue de 1,3 billones de pesos. Sin embargo, en agosto les informaron que les entregarían una plata adicional que ascendía a 800.000 millones de pesos y que a esa hora, es decir, faltando solo cuatro meses para acabarse el año era muy difícil de ejecutar.

“Era un presupuesto adicional, el asignado para el año ya lo habíamos ejecutado en su totalidad y nos dieron más plata para seguir comprando tierras. Como era casi que imposible gastarlo en solo tres meses,  lo que hicimos fue pasar un total de 645.000 millones de pesos, a través de un convenio, al Fondo Colombia en Paz que es una entidad pública también y ahí se guardó el recurso para que no nos lo quitaran”, señaló el exfuncionario. 

Vega dice que está de acuerdo con el presidente cuando asegura que no se puede mostrar como inversión una plata que se tiene guardada en fondos o fiducias. A pesar de eso señala que el gobierno hizo esa adición presupuestal para garantizar los recursos de la compra de tierras y hoy, por haberlos pasado al FCP, están asegurados. “En enero esa plata ya se empezó a ejecutar y se están adquiriendo predios con los dineros que nos dieron para ese objetivo”. 

La pregunta que se hacen los conocedores del tema es ¿si la Agencia Nacional de Tierras sabía que no iba a poder ejecutar toda esa plata adicional, para qué la pidió? 

Finalmente Vega insiste en que no hay que seguir con los argumentos para no dejar avanzar la implementación de la reforma agraria. Dice que si no se cambian los procedimientos, la mentalidad y si no dejan de mirar con miedo los caminos y diferentes opciones que existen, ese programa no tiene futuro. 

Para este año, la Agencia Nacional de Tierras, tiene un presupuesto asignado de 5 billones, de los cuales 4 billones son para comprar tierras. A esos recursos, que doblan lo que les dieron el año pasado, se le suman los 645.000 millones de pesos que por orden de Gerardo Vega se quedaron guardados en el Fondo Colombia en Paz. ¿Alcanzarán a ejecutar todo? 
 

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