8 consejos sabios para llevar unas finanzas sanas

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8 consejos sabios para llevar unas finanzas sanas

Tener una adecuada salud financiera es tan difícil y requiere tanto compromiso como nuestra salud física o mental. Requiere disciplina, organización, sacrificios y metas claras. Si hacemos una analogía con nuestro propio cuerpo, la salud de nuestra economía requiere ejercicios diarios, reducir lo que le hace daño, mantener una vigilancia frecuente, alimentarla adecuadamente y tener conciencia de que lo que hagamos hoy afectará nuestro futuro.

Por: Contenido especial

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Estos son ocho sencillos consejos que pueden parecer obvios o simples, pero no lo son. Si usted los comprende y los aplica conscientemente, su bolsillo empezará a mejorar y el resultado a largo plazo será una economía personal más sana.

Organice su economía
La única manera eficiente y veraz para saber el estado de sus finanzas es organizándolas. Y este es un consejo que se puede asumir en todo sentido: organizar la cantidad de productos bancarios que mantiene y reducirlos si es preciso, organizar las fechas de pagos de sus obligaciones para no incumplirlas, organizar los gastos para comprender en qué se va el dinero y controlarlo.

Lleve un presupuesto
Llevar un presupuesto al detalle es vital para mantener una buena salud financiera. Este es un registro de las tres bases fundamentales de la economía: ingreso, gasto e ingreso neto (el primero menos el segundo es igual al tercero). Llevar un presupuesto implica la disciplina de anotar todos los movimientos de sus finanzas y el resultado permite definir, por ejemplo, si los ingresos son suficientes, si se ha superado la capacidad de pago de deuda, si es posible ahorrar y qué planes se pueden poner en marcha para incrementar el patrimonio. 

Cuide los gastos hormiga
Los gastos hormiga son todos aquellos que por ser pequeños no nos preocupan, pero que el sumarlos significan un egreso mayor. Son, por ejemplo, pagos de transporte en trayectos cortos, suscripciones a streaming, el café diario, pequeños antojos en el mercado. Muchas veces, como en el caso de las compras digitales, estos gastos van entrando a la tarjeta de crédito y solo nos percatamos de ellos cuando se han convertido en un problema de peso para nuestra deuda.

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Medite las compras impulsivas
Otra categoría de gastos que debemos controlar son las compras impulsivas, aquellas que hacemos de inmediato, sin analizarlas y por motivaciones diferentes a la razón. Generalmente son ostentosas, no las necesitamos en realidad y significan un gasto grande. Por ejemplo, la compra de una joya costosa, la organización de unas vacaciones a última hora o el cambio del celular cuando aún funciona bien el que tenemos. Para evitar caer en compras impulsivas es recomendable, por ejemplo, no cargar siempre la tarjeta de crédito y desarrollar la fortaleza de darse unos días para pensar y evaluar la verdadera necesidad de aquellas compras costosas y suntuosas.

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Elimine los vicios 
Los vicios son un desagüe continuo para las finanzas. Estos pueden ser, por ejemplo, adicciones al café, al cigarrillo, al alcohol, a los juegos de azar, a los videojuegos, a las compras por internet… Al reducir los vicios no solo mejorará la salud y el desempeño social, sino también el bolsillo. Haga la cuenta del gasto que significan los vicios anualmente para sus finanzas y empiece a tomar acciones para eliminarlos.

Aproveche los descuentos
Generalmente, los descuentos están hechos para que las tiendas vendan más, y esto no es negativo. Por el contrario, usted puede aprovecharlos en beneficio de su economía. Por ejemplo, los supermercados tienen descuentos según el día de la semana, y si usted debe llevar carnes, haga la compra el día en que las carnes están en rebajas y así obtendrá un mayor beneficio. Si debe cambiar algún electrodoméstico, espere a los días de grandes rebajas, como CiberMonday o Black Friday.

Evite las multas
Evitar las penalizaciones, en general, significa mantener un buen comportamiento apegado a las normas. Y esto es importante recordarlo, ya que las multas pueden abrir agujeros muy peligrosos en sus finanzas. Hablamos, por ejemplo, de comparendos de tránsito, multas por el no pago de impuestos o sobretasas por mora en sus créditos. El retraso en el pago de la tarjeta de crédito es uno de los factores más comunes en este sentido y puede hacer que la deuda se encarezca aún más.

Piense en el futuro
Suena fácil, pero realmente no lo es. De hecho, las personas que tienen la capacidad de visualizar su futuro y el de su familia son las que mejor organizada llevan su economía. Pensar en el futuro significa tener un punto claro al que se quiere llegar y definir el camino adecuado para alcanzarlo. Y nos ayuda, además, a comprender que la gratificación del gasto inmediato no es tan importante como el ahorro para asegurar nuestra vida durante los años que vendrán. 
 

Peso a Peso, Paso a Paso es una colaboración periodística entre Cambio y Bancolombia para la educación financiera.

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