Cementerio de Pobres – Columbarios, un nuevo parque para Bogotá dedicado a la memoria
Render que muestra cómo se verá el parque Cementerio de Pobres - Columbarios.
Crédito: Render realizado por Consorcio Arquitectura y Espacio Urbano
En el flanco occidental del Cementerio Central estaba el Cementerio de Pobres, del cual sólo se conservan los columbarios, unas edificaciones donde Beatriz González realizó su instalación ‘Auras anónimas’. El objetivo es construir un parque dedicado a la memoria de los anónimos y desposeídos que allí fueron sepultados. ¿Cómo va el proceso?
Por: Eduardo Arias
Un proyecto que avanza en Bogotá desde hace ya casi cuatro años son los estudios y diseños par la la construcción del Parque Cementerio de los Pobres-Columbarios. El parque está ubicado en un terreno del conjunto funerario del Cementerio Central en el cual antes funcionaba el Cementerio de Pobres, donde se enterraban sin ninguna pompa a aquellos que estaban signados en por una condición religiosa o social (o por haber muerto de manera oprobiosa) que los hacía indignos de un entierro digno y de ser recordados. Este cementerio sufrió toda clase de vejaciones, cerró sus puertas y el único testimonio de él que quedó en pie son los columbarios.
En 2007 la maestra Beatriz González dio un paso fundamental al hacer en las bóvedas su instalación Auras anónimas. Como ella señala, “Auras anónimas es un proyecto que nació en 2007 y que se inauguró en el 2009 gracias al apoyo del exalcalde Antanas Mockus. La idea surgió una noche de luna cuando veníamos con mi marido del aeropuerto por la calle 26 y observé los columbarios con las cavidades negras sobre muros blancos. En ese momento comenté que podría hacer lápidas para tapar las cavidades porque yo había hecho una exposición en donde trabajé algunas lápidas”.
La construcción a pocos metros de distancia del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, que se inició en 2008 y se inauguró en 2012, reforzó el significado del lugar, que para varios políticos y empresarios no era más que un lote de engorde. Como señala Beatriz González, “a lo largo de su realización el proyecto ha tenido grandes enemigos, iniciando con el exalcalde Peñalosa, que aspiraba a borrar el cementerio del mapa bogotano porque le parecía un lugar que no debía permanecer en la imaginación de los bogotanos. Afortunadamente la obra ha tenido grandes defensores y apoyo, como el exalcalde Antanas Mockus, el historiador Malcolm Deas, el exdirector de Patrimonio Alberto Escovar, la galería Casas Riegner, y recientemente la alcaldesa Claudia López y su equipo encabezado por Patrick Morales y Lina Díaz”.
La idea de este proyecto, que ya se encuentra muy avanzado en su etapa de estudios, es restaurar y reforzar los columbarios del Cementerio Central y vincularlo espacialmente al Centro de Memoria, Paz y Reparación para crear allí un lugar de encuentro abierto al público de disfrute, pero también de reflexión y de memoria.
Desde 2020 el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (IDPC) se ha interesado en la protección del antiguo Cementerio de Pobres y sus columbarios a través de dos estrategias que han avanzado en paralelo. Por un lado, los procesos necesarios para la intervención del predio y la construcción de un parque, y por otro, una estrategia de investigación y activación que, de manera participativa, ha buscado rastrear, comprender y compartir todas aquellas historias silenciadas y borradas que están vinculadas al antiguo cementerio.
Dentro de los resultados del proceso de activación e investigación se encuentra La Bogotá de los muertos: borraduras y permanencias en el Antiguo Cementerio de Pobres, libro escrito por Ana Margarita Sierra Pinedo, Eloisa Lamilla Guerrero y Javier Ortiz Cassiani, que aborda la exploración de este espacio funerario. A pesar de hacer parte del Cementerio Central y colindar con su parte más apreciada (la Elipse y el Trapecio), ha sido no sólo olvidado sino también agredido por proyectos urbanísticos.
Al respecto, Patrick Morales, director del IDPC, dice ese proceso de investigación y de activación comunitaria “hace que este lugar pueda convertirse en un homenaje a las capas de memoria que hay allí. Un homenaje a las clases populares que se enterraron allí durante tanto tiempo. Un parque abierto al público en una localidad que tiene poco espacio público para disfrutar y en una ciudad que tiene pocos lugares de memoria”.
Al mismo tiempo el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural ha adelantado los procesos necesarios para que allí se construya el Parque Cementerio de los Pobres-Columbarios. El 9 de septiembre de 2020 el Consejo Distrital de Patrimonio Cultural de Bogotá aprobó la declaratoria de Bien de Interés Cultural (BIC) a los columbarios del Cementerio central. Al año siguiente se iniciaron trabajos para la protección y primeros auxilios de los Columbarios. Se instalaron sobre cubiertas que han garantizado la durabilidad y estabilidad de las edificaciones necesarias para el reforzamiento estructural y para proteger las Auras anónimas de Beatriz González.
Como señala Ricardo Escobar, arquitecto del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, “la sobrecubierta han cumplido con el objetivo evitar el deterioro mayor de la estructura. Esta se mantendrán hasta el final. En caso de que llegaran a ver alguna afectación tendríamos un intervención de protección y mantenimiento. La obra de la maestra de Beatriz González está protegida. Otras entidades hacen mantenimiento y eliminan el material vegetal que la podría afectar”.
Gracias a un convenio con el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) se adelantó un la prospección geofísica del predio y el levantamiento topográfico como insumo para la elaboración de los diseños del parque.
Desde ese mismo año y hasta 2023 se realizaron los estudios técnicos para poder ejecutar la obra de reforzamiento estructural y consolidación de los columbarios.
Morales señala que Beatriz González ya tiene en su bodega una nueva obra que reemplazará la que se ve actualmente en los columbarios. “Fue un proceso que financió el Ministerio de Cultura. Una vez se finalicen las estructuras, la nueva obra de Beatriz González, que está en un soporte más duradero que el original, se reinstalará como parte del proceso del reforzamiento estructural. Al final de la intervención se entregará la obra en unas nuevas y mejores condiciones, con una mayor garantía de permanencia en el tiempo".
El Ministerio de Cultura ya aprobó el reforzamiento estructural y la obra está en el proceso del trámite ante la Curaduría Urbana. El parque ya cuenta con un aval previo del Instituto IDRD, de quien es el responsable administrador. Estamos sorteando los trámites ante Ministerio de Cultura y digamos que ya queda de alguna manera blindada la necesidad de continuar con el proceso adicional al proceso que se está adelantando.
Como señala Morales, “este proyecto lo entrega esta administración muy avanzado, casi en un 95 por ciento de lo que llamamos la fase 3. Es decir, estudios completos, con licencias y permisos”.
En 2024 se espera afinar la licitación de obra en interventoría para así poder iniciar entre 2024 y 2025 la construcción del parque. Como señala Beatriz González, “la presente alcaldía ha reconocido los valores de memoria del globo B donde se encuentran los columbarios y dejó proyectada y financiada la restauración total de los columbarios de 'Auras anónimas' y la realización de un parque contemplativo. Con mi obra yo buscaba salvaguardar un sitio de memoria, y con este proyecto el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural ha logrado plantear un parque de reflexión”.
