"Colombia no solo es un país injusto, sino también poco incluyente": Patricia Lara
En el Foro 'Colombia Diversa e Incluyente' la fundadora de CAMBIO, Patricia Lara, dio las palabras de inicio con un recuento de las preocupantes cifras que ilustran la magnitud de la desigualdad en Colombia.
Por: Patricia Lara Salive
Buenos días a todas las personas aquí presentes y a las que nos sintonizan a través de nuestras plataformas digitales y de Red + Noticias.
Para mí es un gusto presentar este Foro de CAMBIO, 'Colombia, diversa e incluyente'. Estábamos en mora de hacerlo porque nuestro país, a pesar de que es muy diverso, es muy excluyente. Y a pesar de que hemos avanzado en inclusión en los últimos años, aún estamos lejos de ser la nación que dibuja nuestra Constitución.
En Colombia hay más mujeres que hombres. Según el Dane, las mujeres somos el 51,2 por ciento de la población.
Y somos más educadas que los hombres.
Miremos las estadísticas: el 58,3 por ciento de las mujeres tienen grados en educación superior, versus el 49,7 por ciento de los hombres. Esta es una tendencia que, según cifras del Ministerio de Educación, ha crecido cerca de 10 puntos en los últimos 10 años.
Pero eso no significa que las oportunidades hayan crecido de igual manera. En el primer trimestre de este año, la desocupación de las mujeres llegó a 14,2 por ciento, mientras que la de los hombres estuvo en 9,4 por ciento. Una diferencia que responde a la brecha en oportunidades que hay en contra de las mujeres, para no hablar de la preocupante cantidad de trabajo no remunerado que asumen las mujeres dentro de su hogar.
Y esa realidad no es muy distinta en la población LGBTI. Según el Dane, en el último año, la tasa de desocupación en ese segmento, que constituye el 10 por ciento de la población del país, fue del 13,2 por ciento.
Pero Colombia no solo ha tenido desigualdades profundas entre géneros.
Entre las razas la inequidad es evidente. La mayoría de los negros e indígenas son más pobres que el resto de la población. Según el último censo del Dane, en 2018, 2 de cada 3 afrocolombianos pertenecían al estrato 1. Y el 41 por ciento de la población negra vivía en situación de pobreza. Y el 17,4 por ciento de ella padecía pobreza extrema. Además, la proporción de negros sin acceso al agua era cinco veces mayor que la del resto de la población. Y en el caso de las mujeres negras, las cifras son más preocupantes: la tasa de pobreza en los hogares que tienen madres negras como cabezas de familia, ¡era del 47,9 por ciento!
Y entre las poblaciones indígenas las cifras son peores: mientras que según el censo de 2018, en la población que no es afro ni indígena, la pobreza multidimensional era del 44 por ciento, en la población negra esta cifra subía al 61 por ciento, y en la indígena alcanzaba el 86,5
Además, Colombia no solo es un país injusto, sino también poco incluyente. Según el último informe del Dane sobre inclusión, publicado en 2022, entre las personas con discapacidad, en edad de trabajar, en 2021, solo el 21,9 por ciento pudo hacerlo, en comparación con el 63,6 por ciento de las personas sin discapacidad. Y únicamente un 10 por ciento de la población discapacitada cotiza para pensionarse. Ello significa que la brecha de desigualdad los acompañará durante toda su vida.
Por todo lo anterior, el foro 'Colombia diversa e incluyente' tiene como objetivo principal profundizar y analizar detalladamente las distintas estrategias y soluciones que se requiere implementar, para transformar a Colombia en un país incluyente, donde cada individuo, sin importar su género, o su origen étnico, cultural, socioeconómico o religioso, sea igualmente respetado por la sociedad.
Y si bien en los últimos años, en Colombia se ha promovido el respeto a la diversidad étnica, cultural, de género y de orientación sexual; ha progresado la inclusión de todas las personas en diversos ámbitos sociales, políticos, laborales y culturales; y ha habido avances que han permitido que se aprueben leyes y políticas tendientes a proteger los derechos y a fomentar la igualdad de oportunidades de las mujeres y de las poblaciones negras, indígenas y LGTBI, es mucho lo que falta por hacer.
De ahí que en este espacio de diálogo y reflexión, busquemos que se exploren y se examinen las medidas concretas que promuevan la igualdad de oportunidades, el respeto a la diversidad y la construcción de una sociedad justa y equitativa; es decir, todo aquello que haga de Colombia un país diverso e incluyente.
Muchas gracias.