¿Por qué no habrá racionamiento de agua en Usme? La historia de La Regadera

En la mañana de este 8 de abril, la Alcaldía de Bogotá y el Acueducto anunciaron cómo se llevará a cabo el racionamiento de agua en la capital. La medida será aplicada por turnos que dividen a Bogotá y los municipios aledaños en nueve zonas. Sin embargo, una zona en la ciudad no se afectará por la medida restrictiva.

La emergencia que vive Bogotá y sus alrededores se da especialmente por el fenómeno de El Niño y el consumo de agua por habitante. Lo que hace que los embalses que surten la mayoría de Bogotá, al día de hoy, sigan al 16 por ciento de capacidad.

Como dio a conocer hace unos días el alcalde, Carlos Fernando Galán, Usme será el único territorio en Bogotá que no tendrá que afrontar la medida por el bajo nivel de los embalses que integran el Sistema Chingaza. 

La localidad, ubicada en sur de la ciudad, se surte del sistema El Dorado, que en este momento está en un 45 por ciento de capacidad, y no ha reportado ningún tipo de alerta por desabastecimiento.  

Embalse La Regadera: suministro de agua potable independiente para Usme

La razón por la que la localidad no comparte el suministro con el resto de Bogotá es porque hace años, cuando aún no gozaba con el servicio de agua potable, la junta de acción comunal de la zona tuvo que gestionar el proceso aparte del Acueducto, según información de la Universidad del Externado. 

"Este comité se conformó con la misión de gestionar los recursos económicos y financieros para la construcción de los acueductos veredales, priorizar los acueductos por construir, tramitar los permisos prediales para la construcción de infraestructura y realizar trámites para las concesiones de agua ante la CAR. También se encargó de realizar el acompañamiento en la zona a funcionarios, promoviendo la organización de la comunidad en las ESP, sensibilizando a la comunidad para que realizarán sus aportes, y ejerció el control social y seguimiento en la construcción de los acueductos", puntualizó la institución. 

Desde el embalse La Regadera, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) conduce el agua cruda por tuberías que atraviesan la zona rural de Usme hasta llegar a las plantas de tratamiento La Laguna y El Dorado, las cuales la potabilizan y distribuyen a la población de la parte urbana del sur de la ciudad.

Como lo documentó la universidad, lo anterior permitió que actualmente la localidad, que además tiene una riqueza natural enorme, tenga su suministro de agua independiente, una ventaja en situaciones de crisis como la que hoy está viviendo la ciudad debido a la falta de lluvias y el fenómeno de El Niño.