Pelea por el Partido Liberal está al rojo vivo

La crisis ministerial en el Gobierno de Gustavo Petro y su consecuente terremoto político también tocó al Partido Liberal. La colectividad que tiene como jefe único al expresidente César Gaviria vive horas tensionantes por cuenta de una fractura interna que quedó reflejada en una carta firmada anoche por 18 congresistas liberales.

La división dentro de ese partido tiene antecedentes en la campaña presidencial del año pasado, cuando un grupo de liberales ‘progresistas’ decidieron apoyar a Gustavo Petro, mientras que la dirigencia nacional, encabezada por el propio Gaviria, aterrizó en la campaña de Federico Gutiérrez. La fisura se logró contener en los albores del Gobierno Petro. La participación en la nómina de ministerios y entidades y la declaratoria del partido como parte de la coalición de Gobierno conjuró la división. Sin embargo, fue el debate de la reforma a la salud el que reactivó la crisis del partido. En la sesión de la Comisión Séptima del pasado martes 25 de abril la fractura en las toldas rojas quedó al descubierto.

Durante la discusión, el oficialismo liberal publicó un pronunciamiento de César Gaviria en el que reiteró que su partido no apoya la reforma a la salud y advirtió a los congresistas que tenían que actuar en consecuencia a las decisiones de la bancada o se expondrían a las sanciones contempladas en los estatutos del partido. Incluso habló del delito de cohecho para quienes reciban prebendas del Gobierno, refiriéndose a los rumores de que el Gobierno estaba presionando a los congresistas para que votaran a cambio de puestos y cupos indicativos.

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“A aquellos que reciban recursos del Estado y cuyo propósito sea vulnerar las decisiones del Partido Liberal Colombiano, en relación con el proyecto en discusión, recibirán sanciones del mismo tipo. Tales conductas podrían ser entendidas como cohecho, con la aplicación de sanciones conforme a los fallos que han sido aplicados por la Corte Suprema en el pasado reciente”, se lee en la comunicación del Partido Liberal.

Minutos después de la advertencia, la representante liberal María Eugenia Lopera desobedeció a Gaviria y votó positivamente el informe de ponencia del Gobierno. Para explicar su decisión la congresista dijo: “Esta noche dormiré tranquila” y “podré mirar a mi mamá a los ojos”. El voto de Lopera fue clave para que el proyecto de la ministra Carolina Corcho sobreviviera.

Los otros liberales rebeldes y sus intereses

María Eugenia Lopera es una de las firmantes de la carta enviada a Gaviria. En ella también aparece el representante Dolcey Torres. El congresista atlanticense hizo público su desmarque del expresidente César Gaviria la semana pasada y en ese momento anticipó que eran 25 los representantes que se unían a la rebeldía, pero no se aventuró a dar nombres.

Además de sus convicciones, al representante Torres lo mueven los intereses del clan familiar al que pertenece: los Torres, una familia que tiene su fortín político en Puerto Colombia y negocios principalmente en el campo del alumbrado público. Todos apoyaron a Petro en la campaña y aterrizaron en la campaña presidencial gracias a Armando Benedetti y al hoy senador del Pacto Histórico, Pedro Flórez, cuñado de Dolcey Torres.

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"No se trata de un cálculo político. Si fuera por cálculo ni siquiera habríamos apoyado a Petro. Fuimos el único sector tradicional del Atlántico que le hizo campaña", le dijo a CAMBIO el representante Torres.

Otro de los liberales firmantes de la carta contra César Gaviria fue Andrés Calle Aguas, representante cordobés y aliado de Petro desde los tiempos de campaña. Su hermano, Gabriel Calle, fue el gerente de la campaña de Petro en Córdoba y hoy es precandidato por el petrismo a la gobernación de ese departamento.

Olga Beatriz González también se unió a la rebeldía. La representante tolimense ya había cantado su apoyo a la reforma a la salud el pasado 24 de abril a través de sus redes sociales. La hija de González, Eleonora Betancur González, fue nombrada en diciembre de 2022 como directora general de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia (APC).

La presencia de Luis Fernando Velasco -funcionario del alto Gobierno- en la cena de anoche con la bancada liberal no fue casualidad. El exsenador lideró al grupo de ‘liberales progresistas’ que adhirieron a la campaña de Petro en el congreso desarrollado el 17 de mayo de 2022 en el Hotel Tequendama.  A ese encuentro también asistieron otros políticos liberales que, si bien ya no están en el Congreso, siguen teniendo influencia en su partido.

Es el caso del exsenador y dirigente pastuso, Guillermo García Realpe, quien el pasado fin de semana se quedó con el aval de la Colombia Humana para aspirar a la Gobernación de Nariño, y tiene a su hijo como viceministro del Interior. Situación similar la del excongresista caldense José Luis Correa, quien se sumó al apoyo a Petro y posteriormente fue nombrado como gerente de Positiva Seguros.

¿Quién es María Eugenia Lopera?

La representante antioqueña es debutante en el Congreso a donde llegó con más de 87.000 votos. Fue fórmula del senador Juan Diego Echavarría y ambos hacen parte de la corriente de "Renovación Liberal" que lidera el controversial Julián Bedoya, exsenador y cacique regional acusado de haber falsificado su título como abogado.

Bedoya es precandidato a la Gobernación de Antioquia y, como contó CAMBIO en febrero pasado, tiene una alianza con el senador conservador Carlos Andrés Trujillo, el barón electoral de Itagüí. Los dos políticos han consolidado una alianza bipartidista dentro del Pacto Histórico para las elecciones regionales y para ello están aprovechando su cercanía con el sector político del alcalde Daniel Quintero. De hecho, en el debate del pasado 25 de abril, la ministra Corcho conversó unos minutos con el senador Trujillo en los pasillos adjuntos al Salón Elíptico.

Para profundizar: Julián Bedoya y Carlos Trujillo: los aliados incómodos que se acercan al Pacto Histórico en Antioquia

Lopera, Echavarría y Bedoya apostaron por Petro desde 2022 en la campaña presidencial, a pesar de que no fue una decisión institucional del Partido Liberal. Con la maquinaria que tienen a su disposición le organizaron eventos de campaña al presidente como el que se llevó a cabo en La Estrella, el municipio antioqueño que es el fortín de Julián Bedoya.

Desde los primeros días de abril de este año, Lopera empezó a moverse haciendo lobby a favor de la reforma a la salud. Trató de interceder frente a César Gaviria y ante su negativa empezó a gestionar la rebeldía en otros representantes que también apoyaron a Petro en campaña. Los oficios de Lopera Monsalve terminaron en la carta que firmaron ayer 18 representantes liberales criticando al expresidente.

En el oficialismo Liberal ya se están evaluando las sanciones que podrían recaer sobre Lopera por la presunta violación a la ley de bancadas. La sanción podría incluso ser la pérdida de voz y voto en el Congreso entre uno y tres años. Sin embargo, tanto Lopera como los otros congresistas rebeldes argumentan que la decisión tomada en bancada el 11 de abril fue la de discutir de manera "libre y abierta" el contenido de la reforma a la salud pero no de votar de una forma u otra el proyecto. Siendo así, no se estarían violando ni los estatutos del partido ni la ley de bancadas. La decisión queda en manos de las instancias discplinarias internas de los liberales.

Además de Lopera, los otros dos parlamentarios que le salvaron la papeleta a la reforma del Gobierno fueron los conservadores Gerardo Yepes y Alexander Quevedo, así como el representante del Partido de la U, Camilo Ávila, quienes decidieron retirarse de la sesión. Con esta movida, redujeron el cuórum y el Gobierno necesitó solo 10 votos para que el informe de ponencia fuera aprobado y se abriera la discusión del articulado. Lopera fue la única congresista de los partidos discrepantes que votó positivamente y, según fuentes consultadas por CAMBIO, fue ella la que lideró la concertación de la jugada para reducir el quórum.