¿Quién responde?: las versiones encontradas sobre la muerte de Juan Pablo González

A la conmoción generada por la denuncia de abuso sexual que hizo la joven de 17 años, Hilary Castro, se sumó el desconcierto por la repentina muerte de su presunto agresor Juan Pablo González Gómez, quien fue encontrado sin vida en la URI de Puente Aranda en el occidente de Bogotá el pasado 6 de noviembre.

González llevaba apenas un día en custodia de las autoridades y ya le había sido impuesta una medida de aseguramiento en centro carcelario por parte de un juez de garantías.

Sin embargo, Hilary Castro no alcanzó ni siquiera a identificarlo y, además, la joven violentada declaró que se enteró de la captura de González a través de los medios de comunicación y no por información directa de la Policía, la Fiscalía o la Alcaldía Mayor de Bogotá.

Las versiones contradictorias de la misteriosa muerte

Según las investigaciones que se han desarrollado hasta el momento, González llegó a la URI de Puente Aranda proveniente del complejo judicial de Paloquemao sobre el mediodía del 7 de noviembre y fue ubicado en la celda 2 del cuarto piso.

Sobre las 2:12 de la tarde, uno de los funcionarios a cargo de su custodia entró a la celda y se encontró con el cuerpo del sujeto que ya no tenía signos vitales.

Posterior al hallazgo, autoridades judiciales llegaron al lugar para inspeccionar la escena y el cuerpo de González Gómez. Según el informe inicial, el cadáver presentaba politraumatismos que sugerirían que el detenido fue asesinado a golpes en la celda.

Debido a esta hipótesis, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Carlos Triana, anunció que ya está en curso una investigación disciplinaria para determinar el nivel de responsabilidad de los uniformados que debían custodiar al presunto abusador sexual de 42 años.

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"Inicia una investigación de tipo disciplinario para determinar las responsabilidades de los policías custodios que se encontraban de servicio durante este día", dijo el general Carlos Triana.

A pesar del reporte judicial, el secretario de Seguridad de Bogotá, Aníbal Fernández, declaró en la mañana del 7 de noviembre a la W Radio que Juan Pablo González "estaba ingiriendo mucha agua en las duchas y posteriormente entra como en una especie de convulsión, o una especie de paro. Se le hacen los primeros auxilios, cuando llega la ambulancia los paramédicos lo encuentran sin signos de vida”.

Esto constituye una nueva versión de los hechos y se orientaría a un suicidio, aunque no explica por completo los traumatismos hallados en el cuerpo del detenido.

Debido a este cruce de declaraciones entre las mismas autoridades, tanto la Alcaldía como la Policía indicaron que están a la espera de los resultados de la necropsia que le practique Medicina Legal al cuerpo de González Gómez, los cuales revelarán la causa exacta de su muerte y permitirán esclarecer los confusos hechos del pasado fin de semana.

Mientras tanto, la abogada que representa a Hilary Castro, Jeniffer Hernández, dijo que la muerte del presunto agresor no puede sustituir a la justicia y añadió que: "Todos los hechos que han rodeado el caso, dejan en evidencia serias deficiencias en la garantía de los fines del Estado, y en su deber de proteger a las personas y sus derechos, así como la omisión de salvaguardar los derechos fundamentales de las mujeres a una vida libre de violencia".