¿Se acaba el tiempo para tramitar la reforma a la Policía?

El pasado 24 de octubre, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, se reunió con el presidente del Congreso, Roy Barreras. El encuentro tuvo lugar en el Capitolio Nacional minutos antes del debate en la plenaria del Senado de la prórroga a la Ley de Orden Público. 

Uno de los temas principales fue el de la alteración de orden público en Bogotá durante los últimos días, que ha puesto en el centro de la discusión a la Policía, el Esmad y los protocolos para atender la protesta social y los hechos de vandalismo. 

Barreras le pidió al ministro que presente cuanto antes al Congreso los proyectos necesarios para reformar a la Policía Nacional y crear el Ministerio de Seguridad, una de las propuestas de campaña del ahora presidente Gustavo Petro.

Según el senador, hay una coyuntura de irrespeto y falta de credibilidad sobre esta institución, lo que hace necesaria una reforma que permita fortalecerla y acercarla a la ciudadanía.

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"En Colombia hay una sensación de irrespeto a la autoridad policial y una sensación de pérdida de control de la seguridad, sobre todo, urbana, con algunas expresiones, relacionadas o no, con la protesta por derechos legítimos", dijo Roy Barreras.

A pesar de la importancia de la reestructuración de la Policía para el Gobierno, aún no hay ningún texto radicado al respecto en el Congreso, y solo restan siete semanas para que culmine el actual periodo legislativo.

Carrera contra el reloj

Esto aprieta los tiempos para aprobar estas iniciativas aprovechando las mayorías que conserva el presidente Petro en el Congreso. La reforma implicaría la creación de un nuevo ministerio, además de una reestructuración de la Policía, por lo que estos proyectos necesitarían mínimo cuatro debates consecutivos, que implican su paso por las comisiones correspondientes en Cámara y Senado, así como en las plenarias correspondientes. 

Por ello, la petición de Barreras está orientada a cumplir con los tiempos legislativos y no es la primera vez que lo hace. En agosto de este año, le llamó la atención a los ministros porque en ese momento varias carteras aún no habían presentado las reformas que se habían prometido. 

Además, el trámite de otras reformas, como la tributaria y la política, han requerido de álgidas negociaciones entre el Gobierno y las bancadas que se declararon de Gobierno, como la liberal y la conservadora, para tramitar las inconformidades que han expresado.

Esto también implica que el trámite de la reestructuración a la Policía deba hacerse de manera ágil para que pueda llegar a sanción presidencial antes de cumplirse el primer año del Gobierno de Petro.