Yo también soy una mujer: Velia Vidal

Sí, yo también soy una mujer.

Al leer la decisión de la Corte Constitucional sobre el aborto, sentí la alegría de tener, al menos hoy, una respuesta positiva a la pregunta de Sojourner Truth.  ¿Acaso no soy yo una mujer? Pues hoy sí; sentí que todas cabemos en una decisión que no es un regalo sino el resultado de una lucha histórica de muchas, que han actuado como activistas, abogadas, políticas y servidoras públicas.

Celebro la universalidad de esta decisión porque, contrario a lo que muchos creen, las mujeres negras, las indígenas y las que viven en la ruralidad, también han pagado con su vida y con los sufrimientos de su cuerpo, el precio de no tener derecho a la autonomía, a la lección libre sobre su futuro.

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“...sentí que todas cabemos en una decisión que no es un regalo sino el resultado de una lucha histórica de mucha”.

Puede ser que en las calles de mi pueblo no haya mujeres saltando de alegría y con pañuelos verdes amarrados al cuello, pero sé que el aguapanela que a esta hora hierve o el pescado que se frita en las cocinas tendrán un sabor especial venido de la sonrisa secreta de la que los prepara, porque en esas mismas cocinas se han contado antes – yo misma lo escuché- las historias de las que casi mueren por lo que hasta hoy era un delito.