El mercado de la vivienda también terminó 2022 en desaceleración
Crédito: Fotoilustración: Yamith Mariño
Las cifras de ventas, desembolsos de créditos e inicio de construcción de nuevas viviendas en el cuarto trimestre de 2022 fueron más bajas. El mercado sintió el frenazo del consumo.
Por: Angélica M. Gómez
En los últimos días, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) publicó una serie de indicadores sobre los precios de vivienda, los desembolsos de nuevos créditos hipotecarios y el inicio de obras de viviendas. En ellos se evidencia que, en el último cuarto de 2022, los precios subieron y los créditos y obras bajaron.
Según el Índice de Precios de la Vivienda Nueva (IPVN), en los últimos tres meses de 2022 los precios de los apartamentos aumentaron 1,74 por ciento, mientras que los de las viviendas, que desde 2021 suben con mayor intensidad, se incrementaron en 3,24 por ciento.
Para profundizar: Las ventas de vivienda nueva descendieron 50 por ciento en enero
El Dane explicó que, si se compra con el precio promedio del último trimestre de 2021, “el promedio de la variación del precio de venta de la vivienda nueva presentó una variación anual de 8,78 por ciento”. Esto se debe a que, mientras los precios promedio de las casas aumentaron 12,68 por ciento anual, los de los apartamentos lo hicieron en 8,58 por ciento.
Por ciudades, la entidad identificó que Ibagué (19 por ciento), Armenia (16,20 por ciento) y Popayán (15,50 por ciento) fueron las ciudades con los mayores incrementos de precios de la vivienda. En contraste, Cartagena, con apenas una variación de 1,43 por ciento; Neiva, con 6 por ciento, y Cundinamarca sin Bogotá, con 6,27 por ciento, fueron las de menor aumento en los precios de la vivienda.
Por su parte, el Índice de Precios de la Propiedad Residencial (IPPR) de Bogotá muestra que en el último trimestre de 2022 los precios de las viviendas en la capital aumentaron 4,68 por ciento frente al mismo trimestre del año anterior, pese a que, si se comparan los precios con el trimestre anterior, es decir con el tercero de 2022, estos bajan 0,49 por ciento.
Mientras se daban estos incrementos en los precios de la vivienda y en las tasas de interés para acceder a nuevos créditos por parte del Banco de la República, los desembolsos para compra de vivienda bajaron. El Dane reportó que en el mismo trimestre los créditos hipotecarios bajaron 37,3 por ciento, y el leasing habitacional disminuyó 26,5 por ciento.
Si las cifras se comparan con el cuarto trimestre de 2019, justo antes de la pandemia, también se ve la desaceleración en la financiación de viviendas. Los desembolsos bajan 22,9 por ciento, pues mientras los créditos hipotecarios disminuyen 24,1 por ciento, el leasing habitacional se reduce en 19,9 por ciento.
En total, durante el último trimestre de 2022 se desembolsaron 5,03 billones de pesos, distribuidos en 33.247 desembolsos, según el Dane. De ese monto, 1,12 billones de pesos se destinaron a la compra de vivienda de interés social (VIS) y los restantes 3,9 billones de pesos se asignaron a la compra de vivienda no VIS.
Por otro lado, la entidad destacó que, mientras los establecimientos de crédito reportaron una caída de 45,7 por ciento en el número de desembolsos que hicieron para la compra de vivienda, el Fondo Nacional del Ahorro (FNA) reportó un crecimiento de 91 por ciento en sus cifras.
Construcción de viviendas
Finalmente, el Dane también reportó una disminución en el número de inicios de obra para construir viviendas VIS y no VIS en el último trimestre del año pasado. Según sus reportes, las VIS iniciadas fueron 29.457 unidades, casi 3.000 menos que el trimestre anterior; las No VIS iniciadas fueron 17.500 unidades, unas 1.700 unidades menos que en el tercer trimestre.
En total, calculó el Dane, en el cuarto trimestre se inició la construcción de 46.967 unidades de vivienda, “lo que significó un decrecimiento de 8,6 por ciento con respecto al trimestre inmediatamente anterior”.
