Ricardo Bonilla pide que la negociación con los camioneros sobre el precio del diésel no inicie con chantajes

La semana pasada el Gobierno y los transportadores iniciaron una mesa de conversaciones con el objetivo de alcanzar acuerdos en torno a los aumentos del precio del diésel, que iniciarán el próximo año. El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha anunciado que el galón de acpm deberá subir alrededor de 8.000 pesos el próximo año, con el fin de equiparar el precio local al internacional, pero la noticia no ha sido bien recibida por todos los transportadores de carga. 

Tanto Colfecar como Fedetranscarga, los gremios del sector, han comentado que las bases camioneras no descartan irse a un paro, lo que ha tensado las relaciones entre el Gobierno y los transportadores. 

“La afirmación de que los camioneros están amenazando con un paro salió de los medios. En alguna parte está flotando en el ambiente que hay una amenaza, y lo que nos preocupa es que esta mesa que propusimos para llegar a un acuerdo sobre cómo manejar el tema del diésel comience con ese tipo de afirmaciones. No es el mejor escenario”, dijo Bonilla en declaraciones públicas en el desarrollo de un evento organizado por el banco BTG Pactual. 

El ministro de Hacienda también aseguró que “no es el mejor instrumento que alguien inicie con un chantaje de ese estilo”, y reiteró la propuesta del Gobierno de avanzar en un proceso concertado. 

El incremento en los combustibles hace parte de un proceso que inició el año pasado el Gobierno con el fin de cerrar el déficit en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC) que se generó durante la pandemia, por la decisión de congelar el precio de los combustibles para no afectar el bolsillo de los ciudadanos, en lugar de incrementar el valor de la gasolina y el diésel en línea con el mercado internacional. 

En 2022, el déficit del FEPC sumó 37 billones de pesos. Según Bonilla, para este año se calculaba que el déficit fuera de 17 billones, pero, por el aumento en los precios del petróleo, ahora se estima un hueco de 20 billones en 2023. “El FEPC se comió la tributaria, son 4 billones por gasolina y 16 billones por diésel”, dijo Bonilla en el evento. 

Las cuentas del Ministerio de Hacienda apuntan a que en 2025 se cerrará el déficit del FEPC, y para ese entonces el Estado habrá gastado alrededor de 100 billones de pesos en este fondo, cerca de “cinco reformas tributarias”, en palabras del ministro Bonilla.  

Desde que comenzaron los incrementos de la gasolina en octubre del año pasado, el precio del galón de gasolina ha subido hasta alcanzar los 14.564 pesos en el país. La meta de Hacienda es que el galón del diésel, que está en 9.065 pesos, se incremente a alrededor de 17.000 pesos de manera gradual. 

De acuerdo con el ministro, no se están tocando los dos combustibles al tiempo para que no se dispare la inflación. Según Bonilla, la idea es cerrar la brecha con gasolina, para la cual aún quedan dos aumentos, para luego seguir con el diésel, "para que no sea una sorpresa o un ajuste de manera autoritaria", aseguró. 

El ministro también habló sobre el aumento del consumo de diésel a raíz de los aumentos en la gasolina. "Colombia consume 12 millones de galones diarios de gasolina y diésel; hace diez años, era 6 millones de galones. En diez años se duplicó el consumo de los combustibles. A pesar de tener Barrancas y Reficar, el 40 por ciento de la gasolina es importada y el 20 por ciento del diésel es importado”, explicó Bonilla, quien reconoció que aunque el alza en el diésel “no viene de manera tranquila, y hay amenazas de paro, también hay que corregir el precio”.