Caso de crueldad con monos búho en experimentos científicos será investigado por la Fiscalía
Crédito: Cortesía: Fiscalía.
Los experimentos denunciados por crueldad animal contra monos búho en los centros de investigación de Caucaseco y la Fundación Centro Primates, en Cali, fueron financiados con impuestos de colombianos y estadounidenses.
Por: Redacción Cambio
Vivían entre sus propias heces en jaulas oxidadas sin ventanas, tenían alopecia e infecciones en la piel, eran alimentados con comida de perro y agua de panela, morían por sus heridas infectadas y se cree que eran capturados ilegalmente. Así pasaban los días 108 monos búho, también conocidos como nocturnos, en la Fundación Centro de Primates y el Centro de Investigación Científica Caucaseco, en Cali.
Los primates eran utilizados en medio de unos experimentos para hallar la vacuna contra la malaria.
La denuncia contra los centros de investigación dirigidos por la pareja de esposos conformada por el reconocido médico Sócrates Herrera Valencia y la investigadora Myriam Arévalo Ramírez, fue publicada a principios de enero por la organización defensora de animales, Peta.
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Los experimentos con los monos búho han recibido 22.000 millones de pesos del Estado colombiano -de Colciencias y ahora MinCiencias- y unos 17 millones de dólares del gobierno estadounidense -de parte del Instituto Nacional de Salud- desde 2003.
Este viernes 17 de febrero, la Fiscalía anunció que le puso el ojo a la denuncia de crueldad animal y encargó al Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal (Gelma) a investigar las presuntas conductas ilícitas de los centros científicos.
La línea investigativa está relacionada con la posible comisión de delitos contra la vida, la integridad física, y emocional de los animales; el medio ambiente y los recursos naturales y la administración pública.
Gelma afirmó que se concentrará en indagar sobre las maneras que usaron la Fundación Centro de Primates y Caucaseco para transportar los monos, además de si los primates sufrieron afectaciones físicas o emocionales innecesarias para la experimentación biomédica.
Los 108 monos ya fueron recuperados por la Corporación Autónoma del Valle del Cauca, CVC, en uno de las operaciones más grandes en la historia de Colombia contra el maltrato animal.
