Por vender partes de jaguares y águilas, caen tres integrantes de red de tráfico de fauna silvestre

Un juez de control de garantías envió a la cárcel a Diego Fernando Mora Obando, Vivian Vanessa García Rivero y Darwin Carmelo López Cotes, tres presuntos integrantes de Harpía, una red delincuencial dedicada al tráfico de fauna silvestre. Un fiscal les imputó los delitos de tráfico de fauna y concierto para delinquir, pero no aceptaron los cargos.

Según la Fiscalía, estas personas serían las encargadas de extraer y vender partes o subproductos de jaguares, águilas harpía, guacamayas y animales exóticos. 

• Rescatan a Doki, el perro que fue cruelmente amarrado con cinta a un poste en Barrancabermeja
• Semana Santa: recomendaciones para cuidar de su mascota si va a viajar
• Nace raro hipopótamo pigmeo en el zoológico de Atenas

¿Cómo operaba esta red criminal? 

El ente investigador mencionó que Harpía comercializaba sus productos a través de las redes sociales, donde "usaban la fachada de venta de artesanías".

Según la investigación, Mora Obando sería el cabecilla de la organización y, desde Orito, en el departamento de Putumayo, solicitaba los productos de especies de fauna silvestre colombiana como colmillos y plumas.

López Cotes sería el encargado de conseguir las partes y García Rivero sería la persona que manejaba las redes sociales y concretaba las transacciones.

"Harpía estaría dedicada al tráfico de fauna desde 2021, cuando fueron incautadas 94 partes de águilas arpía (2 tarsos y 92 plumas) en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, las cuales iban a ser trasladadas a destinos internacionales", describe la Fiscalía.

Asimismo, el ente acusador acreditó diez actividades delictivas entre 2021 y 2022, en las que la red comercializaba las partes de animales.