¿Por qué quieren sacar a el aguardiente amarillo de la rumba bogotana?
Para que el aguardiente pueda circular en otras regiones debe tener un permiso de las gobernaciones.
Crédito: Crédito foto: Aguardiente Amarillo
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En los últimos días se ha hecho viral que el aguardiente amarillo de Manzanares podría dejar de ser comercializado en Bogotá y otras ciudades del país pero, ¿a qué se debe esto?
Por: Redacción Cambio
El aguardiente amarillo de Manzanares 24° está, por estos días, ocupando los primeros lugares en las tendencias nacionales. Esto, porque algunos usuarios en redes sociales han mencionado que hay desabastecimiento del producto y podría dejar de ser comercializado en Cundinamarca.
Para que este licor, que es producido por la Industria Licorera de Caldas (ILC), pueda circular en otras regiones requiere de un permiso de las gobernaciones.
En el 2017 el departamento de Cundinamarca le otorgó este permiso a la licorera para que el aguardiente pudiese ser comercializado en la zona. Además, en el 2019 se adicionó el permiso, como describe la ILC.
En medio del revuelo, la licorera caldense emitió un comunicado informando que el desabastecimiento se debe a que "el departamento de Cundinamarca, mediante un acto administrativo, revocó el permiso otorgado a la ILC para el ingreso y venta del producto aguardiente amarillo de Manzanares 24° dentro del territorio de Cundinamarca de manera arbitraria ". Es decir, con la resolución 797 del 6 de junio de 2023 se elimino el permiso que la licorera tenía.
La Gobernación de Cundinamarca argumenta que la suspensión se da por el incumplimiento de una serie de requisitos formales para distribuir el licor en la región.
Según la licorera, al tomar esta medida "no se siguió el procedimiento de ley para tal fin", lo que afecta "el derecho del debido proceso de la ILC, al no haber solicitado el permiso escrito y expreso para la cancelación del permiso".
A lo que la ILC añade que "no se otorgaron los recursos de reposición y de apelación, para poder controvertir".
La productora y comercializadora de bebidas alcohólicas también mencionó que a nivel económico se dará un impacto negativo, porque para este 2023 "tenía proyectado transferir a Cundinamarca cerca de 71.885 millones de pesos por impuestos al consumo del aguardiente y 1.100 millones de pesos por derechos de explotación.
Así las cosas, la Industria Licorera de Caldas agregó que "se encuentra analizando todas las acciones legales a que haya lugar en contra de esta decisión que consideran arbitraria".
