Colombia: una utopía atrapada en el poder, según la esposa colombiana del Nobel de Economía

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Este reconocimiento fue otorgado a Robinson y su colega Simon Johnson por sus investigaciones sobre cómo se forman las instituciones y su impacto en la prosperidad de los países, un trabajo desarrollado en centros académicos de Estados Unidos.

Bautista compartió que, en tono de broma, su esposo le había sugerido tener lista una pijama bonita en caso de que alguna vez ganara el Nobel, para estar presentable ante los medios. Esta idea quedó como un chiste recurrente en su familia, hasta que, de forma inesperada, sucedió. En la madrugada del anuncio, Bautista se despertó, revisó su celular y, al ver numerosos mensajes de felicitación, comprendió que su esposo había sido galardonado. Con emoción, relató cómo le comunicó la noticia a Robinson, quien se levantó, se preparó y, minutos después, ya estaba recibiendo llamadas de la prensa.

En cuanto a su rol en el trabajo de Robinson, Bautista explicó que, aunque inicialmente sus conversaciones se centraban en temas de clase, ahora mantienen una interacción más profunda y horizontal, donde discuten ideas y conceptos. Este diálogo constante les permite reflexionar juntos sobre cómo contribuir al conocimiento desde sus perspectivas, enriqueciéndose mutuamente y potenciando sus aportes en el ámbito académico.

Durante la entrevista, Bautista hizo una reflexión sobre el Estado colombiano, tema tratado en los trabajos de Robinson y Johnson. Explicó que, en su opinión, Colombia fue concebida como una utopía con leyes robustas, pero enfrenta patrones de desigualdad difíciles de romper debido a las dinámicas de poder económico y político. Este fenómeno ha llevado a lo que Bautista define como instituciones extractivas, donde los intereses de unos pocos prevalecen sobre el bienestar general.

Reviva a continuación la entrevista completa: