Por qué la regulación sobre el consumo de cannabis terminó de nuevo hundida en el Congreso

En la tarde del pasado 12 de diciembre, la plenaria del Senado se llevó la atención de la opinión pública por el cuarto debate del proyecto para regular el cannabis de uso adulto. Horas antes, miembros de las redes sociales y algunas figuras públicas metieron presión para que la discusión no terminara aplazada. Al final, la estrategia funcionó y la iniciativa quedó de primera en el orden del día. 

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Sin embargo, las buenas expectativas sobre el proyecto se difuminaron rápidamente a medida que la plenaria avanzaba. De hecho, antes de que el contenido del proyecto empezara a debatirse fue radicada una proposición de archivo que sumó 46 votos a favor, suficientes para que el proyecto se hundiera.

Los votos que cortaron el trámite de la iniciativa llegaron de las bancadas de Cambio Radical (salvo el senador David Luna) y el Centro Democrático, así como de buena parte de los senadores del Partido Liberal, el Partido de La U, el Partido Conservador y los partidos cristianos. Así, los votos del Pacto Histórico y la Alianza Verde fueron insuficientes para salvar el proyecto. La escena culminó con los senadores uribistas celebrando y golpeando de júbilo sus puestos en el Salón Boyacá.

Así como sucedió en los últimos días de la legislatura pasada, la intención de la mayoría de los senadores que se opusieron al proyecto no fue precisamente ideológica (la preocupación por incentivar el consumo de marihuana en los colombianos), sino enviarle un mensaje contundente al Gobierno nacional. Así lo leyó el representante liberal Juan Carlos Losada, principal promotor de la iniciativa en los últimos años.

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"Tengo la enorme tristeza de que posiblemente el decreto que derogó el decreto del presidente Duque tuvo un rol demasiado grande y ahí hay una responsabilidad gigante del gobierno nacional, que no entendió que sacar este decreto tres días antes podía poner en mucho peligro la regulación del cannabis de uso adulto", dijo Losada.

Justamente, las bancadas de oposición utilizaron como argumento la controversia que trajo el famoso decreto de la discordia, mediante el cual el presidente Petro tumbó la sanciones administrativas a portadores de dosis mínimas de drogas que había impuesto Iván Duque. Así lo ratificó el expresidente Álvaro Uribe, quien tuvo un fuerte cruce con Gustavo Petro en redes sociales tan solo dos semanas después de haberse tomado el famoso tinto para debatir la reforma a la salud. Uribe felicitó a los senadores que votaron para hundir al proyecto y ha publicado decenas de trinos oponiéndose al decreto presidencial del pasado 7 de diciembre. "Felicitaciones a los 45 senadores que con su voto impidieron la legalización del consumo recreativo de la marihuana", escribió el expresidente a lo que Petro respondió rápidamente:

La frustración del Gobierno quedó perfectamente retratada en la intervención del ministro del Interior Luis Fernando Velasco, quien, visiblemente molestó, criticó la hipocresía de las posturas sobre el cannabis en época decembrina, cuando el consumo de alcohol y tabaco aumenta.

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"Aquí nos rasgamos las vestiduras porque no queremos que un niño vea a alguien fumando marihuana en un parque, pero eso sí, en diciembre somos felices con la copa de whisky (...) no nos parece lógico que algunas personas tomando esta decisión quieran mandarle mensajes al Gobierno, porque el mensaje no se lo están dando al Gobierno", dijo Velasco.

La senadora María José Pizarro también criticó los cálculos políticos de los senadores que votaron a favor del archivo de la iniciativa: "Me sorprende que hay senadores que votaron en contra y que en cambio firmaban un proyecto exactamente igual, pero ahí sí no se avergüenzan de la falta de coherencia", dijo Pizarro, quien se refería principalmente al senador de la Alianza Verde JotaPe Hernández, quien le dio su voto favorable al hundimiento de la regulación del cannabis de uso adulto y expresó su felicidad por el archivo del proyecto: "Seguiremos cuidando el país de todo proyecto o reforma que amenace con destruir nuestras familias y como tal nuestra nación", escribió Hernández en su cuenta de X.

El hundimiento de la iniciativa no solo obedece al decreto presidencial de la discordia. También es el anuncio de lo que puede pasar en el Senado con la reforma a la salud, la cual aterrizará en febrero del próximo año en la Comisión Séptima y –eventualmente– en la plenaria de esa corporación, en donde ya el Gobierno ha experimentado varias derrotas, como la elección de Iván Name como presidente del Congreso y el hundimiento de la reforma política.