¿Por qué los procesos por presunto daño patrimonial en las casas de los Moreno de Caro no avanzan?

Crédito: Fotografía: Google maps

11 Enero 2024

¿Por qué los procesos por presunto daño patrimonial en las casas de los Moreno de Caro no avanzan?

En 2017, funcionarios del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural identificaron diez casas de interés patrimonial que la familia Moreno de Caro intervino sin permiso para montar allí la Institución Universitaria de Colombia. Seis años después de las denuncias, los casos no avanzan, entre otras razones porque las autoridades no han podido entrar a las edificaciones. ¿Qué se puede hacer para ordenar inspeccionarlas?

Por: Iván Serrano

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Corrían los años 30 y en Bogotá se consolidaba uno de los procesos más importantes de expansión en la historia de la ciudad. Las familias pudientes, que vivían en el centro de la ciudad, tenían sus casas de recreo en Chapinero. Pero el aumento de la población y el colapso de los servicios públicos en los sectores residenciales del centro motivaron a muchas familias a mudarse. Esto dio vida a barrios como La Merced y el Sagrado Corazón, contiguos al Parque Nacional.

Las viviendas siguen en pie, pero tras algunas de esas fachadas de tres pisos, se esconde algo que las autoridades locales intuyen pero no han logrado constatar: la alteración irreversible de al menos tres viviendas de propiedad de uno de los políticos más polémicos de la historia reciente colombiana: Carlos Moreno de Caro.

En 2013, el periodista de Noticias Uno Felipe Romero registró la denuncia de unos vecinos que vivían en el barrio Sagrado Corazón, a unos metros del Parque Nacional. Los denunciantes hablaban de la intervención de una casa de arquitectura neoclásica –ubicada en la carrera 7° con calle 35– construida en 1939 en un lote de 1.900 metros cuadrados que Julio Ramírez Johns le compró a la Comunidad del Sagrado Corazón.

Casa de interés cultural ubicada en la carrera 7 con calle 35. Fotografía: Google Maps


El 23 de mayo de 1990, la casa pasó a manos del excongresista Carlos Moreno de Caro, que la compró por 25 millones de pesos. Tres años después, quedó a nombre del Centro Colombiano de la Productividad, empresa familiar de los Moreno de Caro. Por más de una década, la propiedad ha servido de sede a la Institución Universitaria de Colombia, también de propiedad de Moreno de Caro.

Según el informe de Noticias Uno, el propietario de la vivienda, Carlos Moreno de Caro, le solicitó al Instituto Distrital de Patrimonio autorización para intervenciones menores en la edificación de interés patrimonial. Pero sin que dichos permisos le fueran concedidos las obras se ejecutaron, y tal y cómo quedó evidenciado en las imágenes captadas por el noticiero, la intervención no fue solo locativa.

En su momento, María Eugenia Martínez, entonces directora del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, dijo: “esto no es una obra menor, esto altera la volumetría del bien cultural”.

Cambio Colombia

En 2017, las denuncias no se limitaban a esta casa. Para ese entonces, 10 casas de interés patrimonial ubicadas en ese sector, y en el barrio Las Mercedes, ubicado al frente del Parque Nacional ( y en donde la  Institución Universitaria de Colombia tiene sus sedes) habrían sido intervenidas sin que se hubiesen expedido las licencias de construcción y los permisos de las entidades de velar por la preservación del patrimonio histórico de los Colombianos.

Cambio Colombia

¿Cuál es la importancia patrimonial de este sector?

CAMBIO habló con el arquitecto y urbanista Alberto Escovar, quien explicó la importancia patrimonial de las casas de este sector. Escovar fue director de Patrimonio y Memoria del Ministerio de Cultura hasta agosto de 2022. 

Según Escovar, este conjunto de casas tiene especial valor cultural porque su arquitectura influyó en el resto de la ciudad, incluso en sectores cuyos propietarios tenían menores ingresos: “Ese sector tuvo la influencia de un movimiento que venía de los Estados Unidos, llamado City Beautiful, en el que es muy importante la recuperación de las zonas verdes, junto al Parque Nacional, que es un gran pulmón verde, casas con antejardines y patios generosos. Esa arquitectura tuvo luego un impacto en todos los niveles sociales de Bogotá. Sin duda, el barrio La Merced es el sector que mejor conserva ese tipo de arquitectura en nuestra ciudad”.

¿Qué ha pasado con las quejas?

CAMBIO investigó en qué van los procesos sancionatorios contra la empresa familiar de los Moreno de Caro sobre las casas donde funcionan las sedes de la Institución Universitaria de Colombia.

En la alcaldía local de Santa fe confirmaron que tres denuncias, en tres casas diferentes, fueron remitidas al Instituto Distrital de Patrimonio Cultural. Se trata de tres viviendas ubicadas en la calle 34 con 5. De los diez casos, solo dos están cursando en la Secretaría Distrital de Cultura, Recreación y Deporte. Leonardo Garzón, director de Arte, Cultura y Patrimonio, le confirmó a CAMBIO que en ninguno de los casos existe una sanción en contra de la empresa de los Moreno de Caro, entre otras cosas porque los Moreno no han permitido la entrada de los funcionarios de la Secretaría a hacer las inspecciones.

¿Qué se puede hacer para ordenar las inspecciones?

El arquitecto Alberto Escovar le dijo a CAMBIO que una violación al patrimonio es sencilla de identificar: "Si tienes una licencia de construcción que te autoriza construir dos pisos y tienes tres, pues es muy fácil establecer que el proyecto aprobado no se ajusta a lo que se hizo. Esto lo hace un inspector de Policía porque la institución de Patrimonio no tiene poderes policivos. El inspector de Policía puede ordenar la demolición pero no hay plazos para hacerlo y ahí es cuando suelen naufragar los procesos".

Por su parte, Leonardo Garzón le dijo a CAMBIO que las diligencias de visita a un predio sobre el que hay denuncias de alteración a bien cultural puede ser programada en dos ocasiones. En la eventualidad de que el propietario no permita el ingreso de los funcionarios al inmueble, se darán como ciertas las denuncias y se procederá a aplicar sanciones, que bien pueden ser una demolición o el pago de multas.

En el caso de los inmuebles de la familia Moreno de Caro, las denuncias fueron conocidas por la Secretaría de Cultura en el año 2018, un año después de que a dicha entidad se le asignara la competencia para conocer y sancionar casos de alteración a inmuebles de interés cultural. Hoy la Secretaría tiene dos expedientes abiertos.

Luis Fernando Larios, representante legal de la empresa familiar de los Moreno de Caro, le confirmó a CAMBIO que no existe ninguna sanción contra sus representados por presuntos daños a bienes de interés cultural.

Recientemente, Carlos Moreno de Caro, fundador de Universitaria de Colombia, volvió a ser noticia. En  videos ampliamente difundidos  se le vio tratando de manera abusiva y desobligante  a trabajadoras del centro universitario.

En uno de esos videos se escucha a Carlos Moreno de Caro diciendo: “no se hagan ilusiones con el Ministerio de Trabajo, yo sé manejar eso”. Según una de las denunciantes, Moreno de Caro hacía alarde del control que ejercía en el Ministerio de Trabajo.

Las denuncias en contra de Moreno de Caro han sido muchas y muy diversas:  infracciones de tránsito, daños a bien de interés cultural, y ahora acoso laboral. Ninguna con sanción conocida. En 2024 se cumplen 11 años desde que los vecinos decidieron hacer las primeras denuncias, y a la fecha, parece que todos han dejado jugar al Moreno.

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