
Crédito: Nicole Acuña | JEP
Cuerpos encontrados en La Escombrera pertenecen a cuatro personas y presentan heridas con tiros de gracia
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De acuerdo con el primer balance quincenal de la JEP sobre la búsqueda de cuerpos en La Escombrera, de la Comuna 13, los cuerpos hallados hasta el momento pertenecen a cuatro personas y presentan heridas por tiros de gracia.
Por: Carolina Calero

La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) presentó el primer balance quincenal de su intervención en La Escombrera, en la Comuna 13 de Medellín, en donde se localizaron estructuras óseas de al menos cuatro personas, incluidas mujeres jóvenes, víctimas de desaparición forzada entre 2002 y 2003. Los análisis forenses revelaron que todas las víctimas presentan lesiones causadas por proyectiles de arma de fuego, específicamente tiros de gracia.
Estos hallazgos, realizados por el Grupo de Apoyo Técnico Forense (Gatef) de la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) de la JEP, junto con la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD), evidencian que algunas víctimas fueron asesinadas y enterradas en el mismo lugar.
Además, en al menos un caso, los cuerpos muestran signos de tortura y maltrato, confirmando que las víctimas fueron reducidas a un estado de indefensión antes de ser ejecutadas.
Tras remover más de 37.000 metros cúbicos de escombros, las excavaciones alcanzaron hasta 15 metros de profundidad, una labor que desde el inicio ha contado con la participación activa de los familiares de las víctimas, quienes realizan veedurías y reciben reportes diarios del avance.

La intervención en La Escombrera forma parte del Subcaso Antioquia del Caso 08, que investiga las violaciones a los derechos humanos ocurridas durante el conflicto armado. Entre 2001 y 2004, este territorio fue escenario de 34 operaciones militares en medio de la disputa por el control territorial entre guerrillas y paramilitares.
Un lugar de ejecución y desaparición forzada
Los peritajes confirman que La Escombrera no solo fue utilizada como un sitio de entierros clandestinos, sino también como escenario de ejecuciones extrajudiciales. Según la magistratura de la JEP, estas evidencias reafirman la verdad judicial previamente documentada.
“Negar esta realidad es desconocer el sufrimiento de las víctimas y la lucha de sus familias, que por décadas han buscado la verdad y justicia”, señaló Luz Elena Galeano, representante de las víctimas.

De los cuatro cuerpos recuperados, dos cuentan con perfiles genéticos que podrían facilitar su pronta identificación. La JEP y la UBPD han solicitado a los familiares de personas desaparecidas en la zona aportar muestras de ADN para acelerar este proceso.
La intervención en La Escombrera es resultado de años de presión social liderada por familiares de desaparecidos y organizaciones de víctimas de la Comuna 13. Su insistencia permitió que se dictaran medidas cautelares y ampliara el polígono de búsqueda.
