El legado de Claudia Hakim en el MamBo
31 Diciembre 2023

El legado de Claudia Hakim en el MamBo

Claudia Hakim.

Crédito: Gregorio Díaz. Cortesía del Museo de Arte Moderno de Bogotá – MAMBO.

El 20 de febrero de 2024 Claudia Hakim se retira de la dirección del Museo de Arte Moderno de Bogotá para concentrarse en su trabajo como artista y en las galerías NC Arte y la nueva NC Diseño, que hace pocas semanas abrió sus puertas.

Por: Eduardo Arias

Entre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsAppEntre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsApp

En marzo de 2016 Claudia Hakim asumió de manera oficial la dirección del Museo de Arte Moderno de Bogotá, MAMBO, cargo que entregará dentro de dos meses. Ella ha sido una artista plástica y una gestora cultural con una trayectoria muy destacada. De origen libanés, nació en una familia marcada por la gran cantidad de médicos destacados que ha tenido. Sin embargo, ella no siguió la tradición familiar y estudió textiles en la Universidad de los Andes y comenzó a trabajar las fibras no sólo desde su componente artístico sino también industrial. En un año sabático en Oxford, entre mediados de 1995 y de 1996, tomó cursos de escultura, cerámica, historia del arte y computadores.

A su regreso a Colombia se unió con un grupo de cinco artistas mujeres y montaron un taller en Puente Aranda, una zona industrial y de bodegas de Bogotá. Allí comenzó a hacer sus tejidos en metal y el resultado fueron esculturas de gran formato que sólo podían exponer en espacios públicos ya que las galerías no se atrevían a exhibir piezas tan grandes. Eso llevó a que, gracias al apoyo del empresario y filántropo Nayib Neme, su esposo, creara la Galería NC Arte en el barrio La Macarena, de Bogotá, que abrió sus puertas al público a finales de 2010.

Cinco años después asumió el reto de dirigir el Museo de Arte Moderno de Bogotá, el MAMBO, al que le aportó toda su vitalidad y energía al frente de su equipo de trabajo. CAMBIO habló con ella para pedirle un balance de su trabajo al frente del MAMBO.

CAMBIO: ¿Cuál es, a grandes rasgos, el balance del museo en los años en que usted lo dirigió?

Claudia Hakim: Después de casi ocho años de dirigir el MAMBO, siento que su balance ha sido particularmente positivo, resultado del que me siento orgullosa, así como de haber sido parte de su historia. Al asumir el cargo como directora me enfrenté a una etapa con muchos desafíos, aprendizajes y logros; un panorama que exigía esfuerzos considerables para recuperar y mejorar no solo la parte financiera de la institución, indispensable para su funcionamiento, sino también su imagen pública.

CAMBIO: ¿Cómo encaró usted estos desafíos?

C. H.: Emprendí varias iniciativas, algunas audaces, implementando estrategias innovadoras en busca de un constante cambio para fortalecer su posición en el campo cultural, cultivando relaciones sólidas con diversas instituciones y con la empresa privada, que nos permitieran cumplir muchas de las metas planteadas, tanto en lo financiero como en lo administrativo. Nuestro compromiso con la calidad, la innovación y la integridad ha sido fundamental para construir el reconocimiento estable que hoy tiene el museo.

CAMBIO: ¿Cómo ve usted hoy el museo que deja?

C. H.: Hoy el museo es ese espacio visible con una notable transformación que tanta falta le hacía, experimentando crecimiento en sus actividades y en el número de visitantes. Recuperamos el acceso principal al museo, renovamos sus salas de exposición, actualizamos el auditorio, hicimos un acuerdo con una franquicia para tener restaurante. Modernizamos diversas áreas como la biblioteca, los talleres de educación y conservación, organizamos el comedor para nuestro personal, arreglamos la tienda y abrimos una sede en el norte; implementamos la red MAMBO y el programa de membresías.  Por otro lado, hemos realizado durante cinco años la Gala MAMBO, evento anual de filantropía que tiene el propósito de conseguir fondos para poder mantener vivo el museo.

CAMBIO: ¿Cuántas exposiciones se montaron durante su gestión?

C. H.: Desde 2016 hemos exhibido 42 exposiciones nacionales y 19 internacionales. Registramos 270.400 visitantes entre niños, jóvenes y adultos, y más de 153.000  personas en la programación educativa. Realizamos más de 100 conversatorios, 28 publicaciones y más de 560 asistentes nos acompañaron a la Gala Mambo en cada una de sus versiones.

CAMBIO: ¿Cómo es su percepción acerca de los públicos que van al museo?  ¿Han cambiado a lo largo de su gestión?

C. H.: El reto de un museo es ser para todas y todos, esto no solo incluye personas de diferentes edades (niños, niñas, jóvenes, adultos, adultos mayores) sino también incluye los rasgos identitarios humanos como raza, etnia, género, clase y condición física. Esto implica llevar a cabo diferentes acciones. Desde adecuar y transformar la accesibilidad del museo y sus espacios hasta presentar exposiciones, estrategias y proyectos educativos de acuerdo con las necesidades de cada una de estas poblaciones. Desde esa perspectiva demográfica, cultural y social hemos desarrollado múltiples acciones en el museo y fuera de sus muros con el fin de poder llegar a mayor cantidad y a más diversos públicos, que han posibilitado brindar atención a niños, niñas, jóvenes, adultos, adultos mayores, personas en situación de discapacidad, personas LGBTIQ+, campesinos, habitantes de calle, mujeres en situación de vulnerabilidad, víctimas del conflicto, inmigrantes, indígenas, madres cabezas de familia, artistas autodidactas, entre otras.

CAMBIO: ¿Quiénes visitan el museo? ¡Jóvenes, o más bien adultos?

C. H: De acuerdo con los estudios de públicos que hacemos, se evidencia que a lo largo de estos años la población que más ha frecuentado el museo de manera autónoma han sido personas adultas entre 29 y 59 años. Lo anterior se relaciona claramente con una capacidad adquisitiva y a la posibilidad de trasladarse fácilmente para llegar al museo. Sin embargo, en estos tres últimos años ha habido un aumento del público joven de 18 a 28 años, siendo esta audiencia y la población adulta las que más nos visitan. Esto se debe a nuestra oferta de franjas, días gratuitos, taquilla 2x1, exposiciones con enfoque de género y a nuestras estrategias de comunicación en diferentes redes sociales, especialmente Instagram y Tiktok, que hoy en día son las más usadas por los jóvenes.

CAMBIO: Háblenos un poco del componente educativo, las visitas guiadas, las activaciones.

C. H: El Departamento de Educación MAMBO se dedica al desarrollo y fortalecimiento del papel educativo del museo desde la enseñanza no formal. Tiene a cargo la caracterización demográfica de los públicos y la labor de promover el aprendizaje, la comprensión de los contenidos que brinda el museo y contribuir con la formación artística, la participación ciudadana  y la transformación social.
Esto lo logra a través de los diagnósticos y estudios de públicos, la mediación,  la programación pública y el diseño de herramientas, salas didácticas y módulos pedagógicos. Así mismo, mediante estrategias de inclusión y accesibilidad y la ejecución de proyectos de formación en el Museo, en territorio y virtuales. El museo realiza visitas guiadas en diferentes momentos de la semana para todo público y así como para llegar eficiente y adecuadamente a colegios, a coleccionistas y a todo visitante interesado. Este año, en el marco de las franjas Allianz, los días jueves, a partir de las 6:00 p.m. y hasta las 9:00 pm, tenemos entrada gratuita, patrocinada por esa empresa amiga y allí hacemos actividades relacionadas con las exposiciones (performances, proyecciones, lanzamientos de libros) que le permiten al público asistente enriquecer la vivencia de la exposición. También buscamos generar mayor cantidad de programas los días sábados, ya que es cuando tenemos mayor afluencia de público.

CAMBIO: ¿Cómo desarrollan esas actividades?

C. H.: Todas estas actividades, están enmarcadas en líneas de acción de cada departamento. Museo y aprendizaje, todas aquellas que el museo hace en favor del aprendizaje para así conseguir un mejor y más fácil acceso al arte y la cultura. Museo y sus públicos, todas las acciones que la institución hace para conocer quién es el público, la experiencia durante la visita e ir transformándose de acuerdo a las necesidades. Museo social, todas las actividades que el museo hace para motivar la participación ciudadana, la descentralización de la institución  y la construcción de lazos con las comunidades locales.
Museo virtual: todo lo que hace el museo en favor del aprendizaje y la interacción social a través de la virtualidad.
El último domingo de cada mes, es gratuito. Desde julio de 2021, nos acompaña la Filarmónica Joven de Bogotá, interpretando música contemporánea, asiste un público variado, desde niños hasta adultos, y el aforo en las salas del museo es completo.

CAMBIO: ¿Qué hará cuando entregue el cargo?

C. H.: Entregaré el cargo el 20 de febrero. Lo haré plenamente y seguiré apoyando el museo en todo lo que pueda y con el mayor entusiasmo. El MAMBO, ya hace parte de mi vida y queda en mi corazón. Tengo varios planes, entre ellos retomar de dónde venía, la Fundación NC-arte, organizando su programación, y ampliando el nuevo programa NC-diseño, con mi hija Estefanía Neme.
Algo que me vibra y me tiene muy contenta es retomar el taller de escultura, pues tengo varias ideas y obras por desarrollar. Salgo llena de energía, con ganas, con planes en favor de la promoción y divulgación del arte. Algo que me tiene muy emocionada y con gran expectativa es la segunda fase del proyecto Atrio, que se viene construyendo desde algunos meses atrás. Se trata de un centro cultural que servirá a la ciudad, será un espacio para realizar exposiciones, conciertos, dar conferencias, y un sin fin de actividades, donde todos lo podremos disfrutar. Será un inmueble poli y multicultural que me llena de emoción por todo lo que se podrá hacer. Los artistas no paramos de pensar, la creatividad se desarrolla en cada espacio y oportunidad que nos dan.

Conozca más de Cambio aquíConozca más de Cambio aquí