“Estamos preocupados por la disponibilidad energética en el mediano plazo”: Acolgen

Natalia Gutiérrez, presidenta de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (Acolgen), gremio que agrupa el 80 por ciento de la capacidad instalada en Colombia, no se atreve a pronunciar la palabra “apagón”, pero sí advierte que el país está perdiendo seguridad energética. Según datos de la UPME, el colchón de demanda de energía a mediano plazo llegará a -2,7 por ciento entre 2025 y 2026, y a -5,7 por ciento entre 2026 y 2027.

Gutiérrez dice que, si no existe una contingencia extraordinaria en combustibles o logística, Colombia puede superar un fenómeno de El Niño porque tiene la capacidad de entregar la energía que se necesita. Sin embargo, después se avecinan los problemas: “Actualmente hay 9,5 por ciento de colchón, entre lo que se produce y la demanda de energía. Ya para nosotros eso es bajito, pues Colombia estaba acostumbrada a tener un 15 por ciento. Entre 2025 y 2026, vamos en 2,5 por ciento; y entre 2026 y 2027 estamos 0,4 por ciento. Eso quiere decir que ninguna planta puede salir a mantenimiento”.

La dirigente gremial cree que la transición energética que plantea el Gobierno está en cuidados intensivos y que no se puede renunciar a los grandes proyectos de energía como térmicas e hidráulicos porque le costará mucho al país. “Nos vamos a quedar sin luz si no nos ponemos las pilas”, resaltó.

Desincentivos a inversiones por cuenta de la eliminación del 75 por ciento de beneficios tributarios para proyectos de energías renovables, demora en la puesta en operación de proyectos solares y eólicos, falta de una ley de consulta previa y falta de nombramientos de Comisionados Creg son algunos de los aspectos que amenazan la transición energética, según Acolgen.

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“No han entrado los proyectos que tienen que entrar, no se han dejado construir las líneas que deberían y no se ha dado la señal de la subasta y los proyectos ya no se construyen en cuatro años sino en ocho porque las comunidades no dejan construirlo antes”, agregó Gutiérrez.

Acolgen también alertó sobre una nueva iniciativa del Ministerio de Ambiente relacionada con el caudal ambiental de los embalses ya construidos. La nueva metodología que se plantea haría reducir, según el gremio, 40 por ciento la operación.

El lío de las tarifas heredado del gobierno de Iván Duque

La líder de los generadores considera que la agenda del sector no puede ser acaparada únicamente por las tarifas de energía, pero resalta que la mejor forma de bajarlas es que los proyectos entren en operación. “Cuando se habla de tarifas de energía, nada es tan fácil como decir que es culpa de los generadores hidráulicos o térmicos. Esto tiene una explicación mucho más profunda y es diferente, incluso por regiones”, dijo.

Gutiérrez recordó que la iniciativa del gobierno de Duque de congelar las tarifas durante la pandemia tuvo consecuencias. A la fecha, el saldo por cobrar está en casi 4 billones de pesos. La consecuencia no solo se ve en las tarifas de energía sino en la caja de las empresas distribuidoras de energía.

“Para nosotros es muy importante la estabilidad en toda la cadena porque cualquier eslabón que se rompa en la cadena significa riesgo sistémico y poner en peligro la prestación del servicio”, dijo la presidenta de Acolgen, al tiempo que afirmó que ha presentado dos propuestas al Gobierno nacional, que aún no son tenidas en cuenta. La primera es que haya una financiación para las empresas distribuidoras de energía, para que puedan tener caja; y la segunda, volver un producto financiero la opción tarifaria y alargarla a más tiempo.