Las remesas colombianas alcanzaron cifra récord

Todos los meses, Valeria Ávila abre una aplicación en su teléfono y desde allí envía dinero a Colombia a su mamá y a su hermano. Vive en Los Ángeles, Estados Unidos, a donde llegó hace dos años para estudiar inglés y terminó quedándose. Hoy está casada y no planea volver. 

“Lastimosamente el peso colombiano está muy devaluado. Si yo mando 250.000 pesos, que son cerca de 60 dólares, para mí acá no es mucho, es lo que me gasto en una salida a comer con mi esposo, pero en Colombia es plata”, dice. 

Muchos colombianos que tienen un pariente o amigo que vive fuera del país, trabaja y les envía dólares o euros que se multiplican en Colombia. Estas transferencias que mandan los migrantes a su país de origen se conocen como remesas.

En 2023, Colombia ocupó el puesto 22 a nivel global entre los países que más remesas reciben, la cuarta posición en América Latina por detrás de México, Guatemala y República Dominicana, de acuerdo con las cifras del Banco Mundial. 

Con excepción del año de la pandemia, cuando cayeron 2,5 por ciento, los envíos de remesas hacia Colombia han aumentado en los últimos años. En 2023 ingresaron al país 10.091 millones de dólares por este concepto, de acuerdo con los registros del Banco de la República.

Esta cifra significó un aumento de 7,02 por ciento en el valor de las remesas que llegaron al país en 2023, en comparación con 2022, y un repunte de 662 millones de dólares, pues en 2022 las remesas fueron 9.249 millones de dólares. 

Si en 2023 entraron al país 10.091 millones de dólares en remesas, se podría decir que los colombianos que viven en el exterior enviaron diariamente alrededor de 28 millones de dólares, unos 109.955 millones de pesos al cambio actual. 

“Las remesas en Colombia han ganado mucha importancia. Esos más de 10.000 millones de dólares significan que han entrado en remesas alrededor de 3 puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB), que en magnitudes es cerca de lo que pesa un sector como la minería en el PIB”, aseguró Sergio Olarte, economista principal del Banco Scotiabank Colpatria.

De acuerdo con Olarte, buena parte de esas remesas llegan a hogares de ingresos medios o bajos, y son un flujo de dinero fundamental para gastos como el mercado y los estudios de las familias que reciben este dinero. 

“Las remesas de los trabajadores son un aliciente para el ingreso de las familias en Colombia y todo apunta a que seguirá esta tendencia si Estados Unidos y España, los dos países desde donde mandan más remesas, siguen creciendo de manera importante durante 2024”, mencionó Olarte. 

¿De dónde vienen y para dónde van las remesas? 

Aunque no hay una cifra precisa, se estima que entre 4 y 5 millones de colombianos viven en el extranjero. Estados Unidos ha sido históricamente el principal receptor de migrantes colombianos; Venezuela fue el principal destino en América Latina hasta mediados de 2012; y países como España, Chile, Ecuador y Canadá también figuran en varios reportes. 

Según el Banco de la República, entre enero y septiembre de 2023 –último registro por regiones y países que tiene el Emisor– llegaron a Colombia 3.976 millones de dólares en remesas provenientes de Estados Unidos. Las remesas desde España totalizaron 955,3 millones de dólares en los primeros nueve meses del año pasado; las de Chile 331,4 millones de dólares; Las de Reino Unido 261,7 millones de dólares, y las de Venezuela 23,1 millones de dólares. 

Por regiones, los principales departamentos receptores de remesas en Colombia, entre enero y septiembre de 2023, fueron los siguientes:  

• Valle del Cauca: 1.940 millones de dólares
• Cundinamarca: 1.190 millones de dólares
• Antioquia: 1.169 millones de dólares
• Risaralda: 357,13 millones de dólares
• Atlántico: 264,6 millones de dólares
• Santander: 250,8 millones de dólares
• Tolima: 180,3 millones de dólares
• Norte de Santander: 176,38 millones de dólares
• Quindío: 161,48 millones de dólares
• Caldas: 147,59 millones de dólares

Por la historia del país, la migración, y una moneda altamente devaluada, las remesas constituyen un aporte económico clave, no solo para las familias sino para toda la economía colombiana. Los colombianos que viven fuera del país seguirán enviando dólares o euros, sus familias seguirán recibiéndolos y el dinero seguirá fluyendo.