Daniel Coronell
2 Julio 2023 03:07 am

Daniel Coronell

OPERACIÓN TAPADERA

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Óscar Iván Zuluaga le ha mentido al país sobre la financiación de su campaña presidencial, acogió para su causa a Daniel García Arizabaleta –un corrupto ya sancionado en esa época–, aceptó que Odebrecht le pagara a su asesor propagandístico Duda Mendonça más de 1,5 millones de dólares por debajo de la mesa y, lo que es más grave, durante seis años se dedicó a manipular testimonios, ocultar evidencias y obstruir a la justicia.

Las grabaciones encubiertas que le hizo su cómplice Daniel García Arizabaleta –para asegurarse y negociar cuando fuera el momento– ponen a Zuluaga al borde de la cárcel. Los audios entregados a la Fiscalía y publicados por Semana muestran cómo funcionó esta operación de ocultamiento.

El 6 de enero de 2017 publiqué una columna titulada “Duda sobre Duda”. En diciembre la revista Veja de Brasil había publicado un documento de la Policía Federal Brasilera en el que aseguraban que el director financiero de la empresa del publicista Duda Mendonça había recibido pagos en efectivos en un hotel de Sao Paulo.

Informe Policía Brasilera

La primera semana del año llamé a Óscar Iván Zuluaga y le pregunté:

–¿Usted está seguro de que Odebrecht no le pagó al señor Duda por la asesoría, o por parte de la asesoría, que le brindó a su campaña?

–Lo único que yo conozco, que fue lo que acordamos con Duda, fue el pago que se le hizo, que está registrado en la contabilidad nuestra y que es una suma muy importante.

Con la publicación de los audios queda claro que ahí arrancó la operación tapadera. En la grabación, Zuluaga le pregunta a García Arizabaleta si existen faxes, correos electrónicos o cualquier mensaje suyo con Odebrecht. García Arizabaleta responde “que yo recuerde no” y agrega: 

–Porque lo primero que yo hice cuando salió la noticia de Daniel Coronell fue escribirle a Luis como saludándolo, además, eso fue en enero.

Más adelante Zuluaga dice:

–Pero yo creo que, aun teniendo esos riesgos, yo lo voy a hacer. Que la persona nos contacte en Brasil y mire a ver si de buena, de una actitud amistosa ¿a ellos de qué les sirve jodernos a nosotros? 

El 4 de febrero de 2017 publiqué una nueva columna llamada “El silencio de García Arizabaleta” que ocasionó una reacción inesperada: el lunes, muy temprano, el abogado Jaime Granados, apoderado de Zuluaga, trató de deslindar a su cliente de Odebrecht y pidió, en cambio, que la Fiscalía pusiera una lupa sobre García Arizabaleta

En las grabaciones, publicadas este fin de semana, Zuluaga le pide perdón por eso a García Arizabaleta:

–Pues primero pedirle muchas excusas con esto de lo de Carolina, la afectación, lo de ese momento de Jaime Granados, y eso, estas cosas no las controla todo.

–No, tranquilo –le responde, de manera aún más hipócrita, García Arizabaleta mientras lo graba.

En marzo de 2018, el periodista Gerardo Reyes publicó en Univisión las diligencias de declaración de varios directivos de Odebrecht que hablaban de la financiación de la corrupta multinacional brasilera a las campañas de Juan Manuel Santos y Óscar Iván Zuluaga. La columna “Más allá de cualquier duda” registró esas declaraciones. 

Lo dicho por los declarantes no le convenia a Zuluaga. Le contó a su cómplice que tenía en marcha un plan para contactar a los ejecutivos de la multinacional con el propósito de lograr testimonios favorables a él:

–Ya tenemos la forma de establecer contacto con Luis Batista (director de comunicaciones de Odebrecht), está en Bahía, el hijo de Duda lo conoce. Son grandes amigos, ya está enrutado en eso, pero yo quería preguntarle en qué términos debemos hablar con él. Ya se habló con el abogado de (Eleuberto) Martorelli (presidente de Odebrecht en Colombia), también está contactado. El acercamiento y eso es un poco más difícil para nosotros, pero digamos que estoy dispuesto a ir allá para ver ellos qué van a decir o qué van a plantear en su declaración extrajuicio.

El excandidato quería que los ejecutivos mintieran diciendo que ni él, ni nadie de su campaña, sabía de los pagos de Odebrecht a Duda:

–Tenemos que tratar que Luis y Martorelli puedan colaborar en su declaración extrajuicio, mandando un mensaje que la campaña, ni nadie de la campaña, sabía de eso.

El propio Duda fue persuadido del plan para alterar los hechos. Zuluaga le contó a su compinche:

–Hoy en la tarde por fin es la reunión con Duda. Él, desde la semana pasada, aceptó dar las declaraciones que se le han planteado y ya regresó a Bahía.

El exministro le garantizó a García Arizabaleta que no había registros de cámaras de seguridad sobre las reuniones que tuvieron con los hombres de Odebrecht en su propia casa:

–¿En su edificio hay cámaras? –pregunta García Arizabaleta.

–Nada –contesta Zuluaga.

–¿Hay registros de entrada?

–Nada, no existe –lo tranquiliza Zuluaga

–Porque yo tengo la preocupación de que uno dice cualquier cosa y mañana van y piden registro.

–Nada. Ya eso lo miré.

Zuluaga también invocaba en sus conversaciones con García Arizabaleta los consejos del sacerdote Arturo Uría, quien según él le recomendó salvarse haciendo uso de la “restricción mental” que un manual sobre el Opus Dei define como “mecanismo para evitar comunicar la verdad de las cosas tal como son”. Según el excandidato, el  religioso le aconsejaba:

–“A usted nada lo obliga a no protegerse y proteger a su familia”. Incluso me lo dijo: “Eso está en la fe, habla de la restricción mental, usted no tiene por qué inmolarse”.  

En agosto de 2021 murió el asesor político Duda Mendonça. Con él se fueron muchos secretos de la campaña de Óscar Iván Zuluaga. A raíz de su fallecimiento escribí una columna en Los Danieles llamada “Duda en la tumba”.

Óscar Iván Zuluaga reaccionó con molestia frente a la columna. Le dijo a la periodista Paola Páez de Pulzo que yo resucitaba un refrito para perjudicar al uribismo.

Cambio Colombia

 

Los hechos se encargaron de demostrar que no era un refrito, el tema sigue vigente. También comprueban que la perdición de Óscar Iván Zuluaga no vino de un reportero sino de Daniel García Arizabaleta, el hombre que rompió lo que él llama “el secreto de sangre” y que ha sido uno de los más caracterizados uribistas.
 

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