
Alfredo Saade, antiabortista, negacionista científico y político camaleónico
Alfredo Saade, nuevo jefe de gabinete del presidente Petro.
Crédito: Presidencia - CAMBIO
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El nuevo jefe de gabinete del presidente Petro, quien ha pedido cerrar el Congreso, los medios de comunicación e incluso la red social X y no “homosexualizar al país”, llega al Gobierno ondeando la bandera de convocar una constituyente. Perfil.
Por: Armando Neira

El “pastor” Alfredo Rafael Saade Vergel no es pastor. Aunque se dio a conocer así cuando irrumpió en la consulta del Pacto Histórico en el año 2022 —en la que de antemano se sabía que ganaría Gustavo Petro—, no representa a ninguna iglesia. En esa ocasión, quedó de último, con apenas el 0,38 por ciento de los votos, pero logró un éxito enorme al alcanzar visibilidad nacional por los debates transmitidos en televisión, las entrevistas y sus insólitas declaraciones.
“La Asociación Internacional de Ministros del Evangelio, Adme, en ningún momento reconoce al señor Saade como pastor”, afirmó esta organización tras revisar sus archivos de los últimos 15 años. “Nunca ha solicitado su registro o membresía en nuestra asociación. Por lo tanto, el referido señor en ningún momento puede atribuirse nuestra representación”, añadió la Adme, que cuenta con personería jurídica del Ministerio del Interior.
Esto no ha sido obstáculo para que él mismo se hubiera autodenominado pastor y obtuviera poder burocrático en ese ministerio tras el triunfo electoral de la izquierda. Allí puso a su cuota, Amelia Cotes, en la Dirección de Asuntos Religiosos, un derecho que creía ganado porque ambos hicieron campaña por Petro.
Se trata de una dependencia crucial para la relación con las comunidades religiosas del país. Cuando llegó Juan Fernando Cristo, la declaró insubsistente y Saade lo acusó de darle el cargo a quienes “están de acuerdo con el golpe blando al presidente” y de echar a quienes “ayudamos a elegir a Petro”.
Saade no se rindió. “Tiene la virtud de que nada le quita el sueño; mientras otros en la derrota se hunden, él sigue en lo suyo”, dice alguien que lo conoce desde sus tiempos de campaña para la alcaldía de Valledupar, en el departamento del Cesar.
Entre vallenatos y Jesucristo
Allí tuvo su primer cargo de relevancia como director del Área Metropolitana durante la administración del alcalde Augusto Ramírez Uhía, conocido como 'Tuto Uhía', quien fue un escuchado cantante de música vallenata, borracho, parrandero y terminó en la cárcel acusado de corrupción. Aunque ambos aseguran que, si bien el pecado los arrastró al infierno, hasta allí llegó Jesucristo para salvarlos.

Años atrás, Saade fue un convencido defensor de Álvaro Uribe Vélez y luego de Germán Vargas Lleras, jefes naturales del Centro Democrático y de Cambio Radical, dos partidos históricamente opositores a Petro.
De hecho, Saade fue candidato al Senado en 2014 con el número 55 por Cambio Radical y, tras no ser elegido, en 2015 intentó sin éxito llegar a la Alcaldía de Valledupar con el lema 'seguridad y orden'.
“Gracias, presidente Gustavo Petro, por su confianza. A Dios todo honor y toda gloria; a mis detractores los invito a tomar café, el país nos necesita para que el amor pueda vencer al odio. Levántate, Colombia cautiva de esperanza”, publicó Saade en su perfil de X.
Su amable mensaje contrasta con un extenso historial de discursos, entrevistas, declaraciones y publicaciones en redes sociales en los que eleva el tono para defender su ideario antiabortista, negacionista científico y machista. Y, claro, “en defensa del pueblo” y en contra de la “ultraderecha recalcitrante”.
A propósito, y al estilo de Nicolás Maduro, ha pedido cancelar Twitter por seis meses, como ocurrió en Venezuela, alegando que “el presidente Petro debe ordenar suspender la red X al menos durante seis meses mientras se sacan adelante proyectos de gran envergadura que a diario son perjudicados por la mentira de periodistas”.
La prensa es el enemigo
El escritor Juan Carlos Botero afirmó que el nombramiento de Saade confirma que Petro no desea rodearse de los más capaces, sino de los más obedientes. Prefiere funcionarios activistas —aunque sean radicales o corruptos— que aceptan sin objeciones todo lo que dice el presidente. “¿Cómo es posible que tanta gente valiosa de izquierda apruebe esto?”, se preguntó.

No obstante, existen afinidades con el presidente. Petro ha mantenido un abierto enfrentamiento con la prensa, postura que Saade respalda: “Es hora de abrir el debate sobre hasta dónde pueden llegar los medios y sus empleados al micrófono. Diariamente, sin sonrojarse, mienten, destruyen la moral del presidente y de todos los que buscamos el cambio para dignificar la vida del poder popular”. ¿Cómo? “Sacan titulares que ponen lápidas y no miden consecuencias. Se llevan por delante al que sea con tal de destruir a quien no piensa como ellos; son generadores de odio y de narrativas perversas. Hay que poner freno a esos medios de comunicación antiéticos y mentirosos, es hora de legislar”.
Además, mientras el presidente mantiene un pulso con el Congreso, Saade va más allá y propone su cierre definitivo. La mayor coincidencia se da ahora cuando en Palacio gravita la idea de una constituyente. Dice que es hora de “ponerse los pantalones”, ya que “el exceso de democracia también perjudica al Gobierno de Gustavo Petro”.
Saade, abogado de la Universidad Libre con especialización en Gerencia en Gobierno y Gestión Pública, cumple los requisitos para el cargo, según Benedetti. Entre sus funciones están la dirección de la Unidad de Cumplimiento —oficina que hace seguimiento a la ejecución de las propuestas del Gobierno—, la coordinación de esquemas de seguridad y la autorización de las misiones de los funcionarios en el exterior, entre otras tareas.
Esa es la teoría. En la práctica, la importancia de su cargo y su influencia en las decisiones del Gobierno dependerán del presidente Petro.
Hasta esta semana, Saade había manifestado su intención de ser candidato presidencial en 2026. “Me comprometo contigo a que si me eliges presidente en 2026 llamaré inmediatamente a una constituyente. No me dejaré manosear por el Congreso de la República. Levántate, Colombia”. Al asumir su nuevo rol, esta aspiración queda suspendida.
‘Iban a envenenar al presidente’
Aunque a Saade se le señala como frecuente difusor de noticias falsas, el presidente confía en él. Prueba de ello es lo que pasó en septiembre de 2024, cuando se propagó la alarma de un supuesto plan para envenenar al mandatario. Por ello, fue el invitado central en el noticiero de RTVC, el sistema de medios públicos, y presentado como “el pastor que tiene información sobre el atentado contra el presidente”.
“Un envenenamiento para que luego los medios pudieran decir que, tras una sobredosis de droga, el presidente de Colombia había fallecido”. Sin aportar pruebas ni mayores detalles, aseguró que aquellas fuentes eran de “alta credibilidad”. Esa noche, cerró su intervención con una invitación: “Yo invito al país a que, a pesar de los falsos titulares, se levante”.

Saade ha oscilado sin reparos entre posturas progresistas y un conservadurismo extremo; entre alarmas apocalípticas y la necesidad de abrazar a Jesús para encontrar la salvación; entre mensajes de fin del mundo y la intención de avanzar políticamente junto a figuras como Clara López, Roy Barreras y Benedetti.
Con un escaso caudal electoral, llegó con su movimiento cristiano Levántate al multitudinario evento de presentación de la candidatura presidencial de Petro en la Plaza de la Paz de Barranquilla, con la tarima en forma de P. La historia dice que Saade hizo su arribo de la mano de Nicolás, hijo del presidente, acusado de lavado de activos y enriquecimiento ilícito durante la campaña.
En ese momento, distintas corrientes de centro y centroizquierda del Pacto Histórico rechazaron la adhesión y la calificaron de insólita, dadas sus posturas antiaborto y homofóbicas. Ante las críticas, Saade se defendió asegurando que no era ni lo uno ni lo otro: “No soy homofóbico, no soy antiaborto, amo la vida. Dejen de autodestruirse. Gana solo Uribe”, insistía.
‘El coronavirus es una mentira’
Por entonces se hizo viral un video de la pandemia en el que Saade corta una pelota de plástico para —según él— frenar el avance del covid-19: “Siguiendo la directriz del Espíritu Santo, que me ordenó quitarle las coronitas y declarar en el nombre de Jesús que te secas, coronavirus”, dice Saade en el video. Desde entonces quedó con el rótulo de negacionista científico.
A él poco le importaron las críticas y burlas. Por el contrario, y a pesar de que el virus mató a 142.727 colombianos, se reafirmó en su postura. Dijo que el covid-19 formaba parte de una conspiración con cuatro objetivos siniestros: “El tiempo me dará la razón y todos sabrán que el coronavirus es una mentira para: 1. Enriquecer a los bancos. 2. Enriquecer a los actores que manejan la salud. 3. Atemorizar al pueblo para subyugar aún más sus vidas. 4. Acabar temporalmente con la democracia para tomar decisiones”.
En línea con su movimiento Levántate, volvió a ser centro de controversia nacional por un tema diferente. En 2023, durante el Día del Orgullo LGBTI+, las cuentas oficiales de la Presidencia cambiaron su imagen de perfil por el escudo nacional con los colores de la bandera gay y el mensaje “Súmate a la ruta diversa”.

Sin vacilar expresó su molestia: “Esto envía un mal mensaje al país. Somos respetuosos de las minorías, pero el escudo es uno solo y no se ha hecho ningún cambio legal. Pido a la Presidencia que retire ese escudo que no representa a Colombia. Ni queremos homosexualizar el país ni quebrantar derechos. El orden comienza en casa”.
Y así como se mostró categórico en que el Gobierno no debería “homosexualizar al país”, también sostuvo que había que frenar a quienes defienden la interrupción voluntaria del embarazo, hecho que él define como “proasesinato disfrazado de aborto”.
La defensa de Petro
¿Cómo ha hecho Saade para ser protagonista de un gobierno que, en teoría, es progresista? Cuando colectivos de mujeres del Pacto Histórico protestaron, Petro respondió que la colectividad no es homogénea y que en ella convergen todas las ideas y libertades de culto: “Nadie puede en el Pacto Histórico decir que no entra alguien porque es evangélico o católico; eso rompería los principios del Pacto”, zanjó Petro.
Ya en el Gobierno, Saade se movió en varios frentes. Estuvo en la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo (UNGRD) con un contrato para potenciar las ollas comunitarias en La Guajira, proyecto defendido por su director Olmedo López, uno de los cerebros del más grave entramado de corrupción que hoy tiene a varios ministros y congresistas ante la justicia. Tras la llegada de Carlos Carrillo a la dirección de la UNGRD, Saade renunció a su contrato.
En ese momento se le cuestionó su nula experiencia en un tema tan sensible como técnico. Desde el Gobierno se defendió que él, como miembro del Pacto Histórico y en su condición de “cristiano progresista”, se había ganado el derecho a formar parte del proyecto que gobierna al país.

Como en otras ocasiones, sectores cristianos le pidieron al Ejecutivo no considerarlo su vocero. “Rechazamos que Alfredo Saade sea presentado como nuestro representante”, dijo Clara Lucía Sandoval, pastora de Misión Carismática Internacional.
“Alfredo Saade no es pastor, no tiene congregación ni reconocimiento pastoral en ninguna iglesia. En Valledupar nadie lo avala como pastor”, añadió César Llanos, presidente de Adme.
‘Un charlatán antiderechos’
Por estos días, en la ciudad bañada por las aguas del río Guatapurí están muy sorprendidos por la designación de Saade en semejante posición en el organigrama de Palacio, como lo están varios líderes de opinión en el resto del país. El exministro de Salud Alejandro Gaviria advirtió: “Parece un chiste, pero el nombramiento de este charlatán antiderechos representa una amenaza”.
Saade, por su parte, está emocionado. Dice que logró un sueño de fe, pues asegura que cuando conoció a Petro hace un par de décadas vio en él el mensaje de Jesucristo.
“Yo soy partidario de la tesis que lanzó el presidente, respecto a que Colombia necesita una Asamblea Constituyente. Creo que en este momento hay un bloqueo institucional”, ha dicho el recién posesionado Montealegre. “¿Y qué tipo de constituyente? Una constituyente de iniciativa popular”, agrega el jurista. “Desde hace dos años he pedido una asamblea constituyente. Es un deseo de mi corazón”, afirma, por su parte, el nuevo jefe de Gabinete.
Saade ha dicho también que está listo para trabajar por la reelección del presidente Petro y se muestra orgulloso de una nueva foto en la que posan con él y la bandera bolivariana de colores roja, negra y blanca, con la que el Libertador declaraba la muerte a los españoles que no apoyaran la causa independentista. En la imagen escribió: “Constituyente ya”.
