Un año de crisis en las universidades públicas: recursos insuficientes, malos manejos y estudiantes en paro

Universidades públicas en el país.

Crédito: Ministerio de Educación.

30 Diciembre 2024 06:12 am

Un año de crisis en las universidades públicas: recursos insuficientes, malos manejos y estudiantes en paro

2024 fue un año complejo para las instituciones de educación superior públicas del país: la crisis financiera se acentuó, los estudiantes salieron a marchar para exigir sus derechos y la solución en el Congreso avanza a paso lento.

Por: Claudia M. Quintero

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El 2024 no fue alentador para las 67 instituciones de educación superior públicas (IES) que hay en el país, porque la crisis financiera que vienen arrastrando desde hace más de 30 años se acentuó y en algunas ese fenómeno se sumó a malos manejos y escándalos por presunta corrupción. Para otras, este fue un año de intensas manifestaciones y de reclamar el valor del voto de la comunidad. 

Y con las crisis han llegado otra serie de problemas por las medidas que se están tomando. Unas universidades, por ejemplo, se están endeudando, mientras otras le apuestan a planes de austeridad que tienen asustados a maestros y estudiantes. “Estamos preocupados, sobre todo por el miedo de que quiten beneficios como matrícula cero o los diferentes convenios y beneficios que tiene la institución”, dijo un alumno de la Universidad del Valle que prefirió no ser citado por su nombre. 

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Manifestaciones de estudiantes. Foto: Colprensa. 

Universidad Nacional: el movimiento estudiantil levantó su voz

Este año, los estudiantes de la Universidad Nacional de Bogotá demostraron de qué están hechos: la defensa de la autonomía, de su voto y de la educación pública están por encima de cualquier cosa. 

El ambiente en el claustro universitario más importante del país se comenzó a tensar desde principios de año. Pero en marzo, cuando el Consejo Superior Universitario (CSU) designó a Ismael Peña como rector, fue troya. Los estudiantes quedaron inconformes y se fueron a paro. 

En julio y después de casi cuatro meses de protesta, el CSU 'corrigió' las presuntas irregularidades que hubo en la elección y esta vez resultó escogido Leopoldo Múnera. Sin embargo, el lío jurídico de la elección todavía continúa. 

Además de toda esa situación, el tema financiero no pasa inadvertido en la Nacional. Por un lado, la infraestructura del Instituto de Ciencias Naturales está afectada y hasta la lluvia se ha colado por el techo. Y, algo que no es menor: hace unos días se conoció que la institución perdió 12 millones de euros de cooperación internacional para adecuar la sede de Tumaco, Nariño. En este caso, CAMBIO conoció que el Ministerio de Educación pondrá esos recursos para garantizar la construcción.

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El Gobierno le apuesta a atender la crisis de las universidades con la reforma a los artículos 86 y 87 de la Ley 30 de 1992. Foto: Colprensa. 

Universidad Pedagógica Nacional: estudiantes hacinados  

Otra de las situaciones complejas es la de la Pedagógica, como le dicen los estudiantes. De acuerdo con la misma comunidad, los recursos que hoy reciben no alcanzan para reparar las sedes y garantizar espacios para las clases.  

En marzo de 2024 emitieron un comunicado en el que reconocen públicamente que los problemas en la infraestructura generan hacinamiento, Algunas de las sedes tienen condiciones complicadas, de manera especial, la de Valmaría, situada en el norte de Bogotá. 

Y, como le relató un líder estudiantil a CAMBIO: “El índice normal establece que sean ocho metros cuadrados por estudiante. Sin embargo, tenemos cuatro metros por cada uno”. 

Universidad de Antioquia: reclaman más recursos de las administraciones 

Los estudiantes de la UdeA se han manifestado para hacerle saber a Medellín, Antioquia y al país que el patrimonio de los paisas atraviesa por una situación financiera complicada. Desde septiembre, el rector, John Jairo Arboleda, venía señalando que la institución acumula una desfinanciación de 340.000 millones de pesos y lleva varios meses tratando de manejar la situación con créditos. 

Otra de las medidas que está tomando la universidad es un plan de austeridad, que implica reducir algunos gastos como viáticos, así como limitar la asistencia presencial a algunos eventos, entre otros. Todo eso es bien visto por la comunidad. Sin embargo, un sector de los profesores ha manifestado su preocupación por los efectos de ese plan sobre los docentes. 

Hace unas semanas, la administración de la UdeA informó que no se autorizaron 160 contratos calendario para 2025. Ese tipo de convenios se hace con profesores que no están directamente vinculados, pero tienen asignaciones de 20 horas a la semana.

Si bien ese número de contratos ha cambiado en distintos años, los maestros insisten en que la universidad ha crecido de manera significativa y eso, de entrada, implica que se necesitan más y no que se dejen de contratar. 

Frente a la situación financiera, CAMBIO conoció que el Ministerio de Educación y el Ministerio de Hacienda se reunirán en los próximos días para definir un giro extra de recursos para la UdeA.

Universidad del Valle: apenas se siente la crisis  

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Manifestaciones en el país. Foto: Colprensa. 

El cierre del año para los estudiantes de esta institución en el Valle del Cauca fue desalentador. Nicol Sinisterra, representante estudiantil ante el Consejo Superior, aseguró que los efectos de la situación que atraviesan las IES en el país comenzaron a sentirse con los retrasos en los giros de Matrícula Cero. 

Pero la situación “les pegó” unos días antes de terminar el semestre, cuando los estudiantes recibieron una resolución de la rectoría que establecía medidas de austeridad. En el documento, con fecha del 27 de noviembre de 2024, queda claro que no se ha endeudado para suplir las necesidades de la institución, pero la situación fiscal del año generó déficit, por lo que tiene dificultad para cubrir los gastos operativos y de funcionamiento “en los niveles acostumbrados”.  

Uno de los reclamos de la comunidad universitaria, en general, es la necesidad de más recursos para poder financiar el funcionamiento de la sede en Cali y en los distintos municipios del Valle. 

Universidad Tecnológica del Chocó (UTCH): disputa rectoral y estudiantes divididos

La situación en la UTCH es, quizá, la más compleja de todas, porque agrupa conflictos internos y crisis financiera. En el último año, ha tenido dos rectores y ahora hay uno encargado, los estudiantes duraron más de tres meses en paro y aún no se ha definido quién será el rector en forma oficial. El tema es tan extremo, que a principios de diciembre un grupo de estudiantes incendió la sede administrativa. 

A raíz de algunas irregularidades que denunciaron miembros de la misma comunidad universitaria, el Ministerio de Educación relevo de la rectoría a David Emilio Mosquera y nombró a Vanessa Sánchez. Sin embargo, un juez administrativo ordenó el reintegro de Mosquera —que ya terminó su periodo—. 

Mientras esa disputa jurídica se surtía, los estudiantes se manifestaban. Muchos no estaban de acuerdo con la administración de Mosquera. Pero otro sector sí lo respaldaba y eso generó disputas internas en la institución. 

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Ilustración: Yamith Mariño. 

La Ley 30 de 1992, el problema estructural 

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Foto: Colprensa. 

El factor determinante en toda la situación de las IES públicas del país está en la Ley 30 de 1992. ¿La razón? El artículo 86 de esa norma define que la base presupuestal para las universidades públicas es lo que la nación y los territorios aportaron en 1993. Desde entonces, la cifra se ajusta cada año con el Índice de Precios al Consumidor (IPC). 

El problema es que todas las universidades públicas han crecido mucho más de lo esperado y mucho más rápido que el incremento de recursos. Eso implica, por sentido común, más gastos. El Ministerio detalla que, entre los años 2000 y 2023, la matrícula en las IES públicas aumentó un 176 por ciento, mientras que las transferencias de la Nación sólo se incrementaron en un 62 por ciento en términos reales a precios de 2023.

Entonces, como en las cuentas personales, si se gasta más de lo que se gana, pues se van produciendo cifras en rojo. Así vienen las universidades desde hace más de 30 años. 

Pero, además, hay otros factores que, según expertos, han acentuado el problema. Por ejemplo, Luz Karime Abadía, decana de la facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Javeriana, y Jennifer Pedraza, representante a la Cámara y quien fue líder estudiantil, coinciden en que el programa Matrícula Cero termina por afectar a las IES públicas. ¿Por qué?

Las mismas universidades afirman que el giro de esos recursos —que los debe hacer el Gobierno—, se está demorando más de lo esperado. El mismo ministro de Educación, Daniel Rojas, reconoce esos atrasos. 

Otro problema que describen Abadía y Pedraza está en que se les pide a las universidades públicas que tengan más cobertura y eso implica más profesores para cubrir las clases, más infraestructura y todo lo que se necesita para mantener una institución en funcionamiento. Sin embargo, no se tienen los recursos suficientes. 

El camino: la reforma a los artículos 86 y 87 de la Ley 30 

Todos los actores claves en el sector coinciden en que la solución podría estar en la reforma a los artículos 86 y 87 de la norma. La modificación aumentaría los recursos de funcionamiento e inversión de las universidades. Pero, esta vez, teniendo en cuenta factores que les permitan cubrir todos los gastos. 

Así, el nuevo modelo de financiación le apuesta a tener en cuenta el Índice de Costos de la Educación Superior (ICES) o el Índice de Precios al Consumidor (IPC) —el que sea mayor— y asignará recursos equivalentes al 0,05 por ciento del PIB calculado por el Dane en el primer año de aplicación de la ley. Esto, para establecer una nueva base presupuestal para las instituciones. 

Una de las críticas que se le ha hecho al Gobierno es que no se han esforzado lo suficiente para mover esa reforma en el Congreso. Como dijo el representante Daniel Carvalho, “no la han patinado”

Lo cierto es que uno de los compromisos del ministro de Educación es que, en 2025, intentará impulsar ese proyecto y obtener una solución a la crisis de estas cinco y del resto de universidades públicas en el país. 

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