Aldo Cadena, gerente de la Nueva EPS
El escándalo de corrupción que enredó a Aldo Cadena, el recién nombrado gerente de la Nueva EPS
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CAMBIO reconstruye la historia de la quiebra de la EPS distrital, Capital Salud, que generó pérdidas de casi 600.000 millones de pesos en 2015. Por entregar cientos de contratos a dedo con recursos de la institución, el recién nombrado gerente de la Nueva EPS, Aldo Cadena, fue denunciado penalmente.
Por: Paola Herrera
El exsecretario de Salud de Bogotá Aldo Cadena, nombrado en las últimas horas gerente de Nueva EPS, tiene un pasado cuestionado por cuenta de las decisiones que tomó cuando estuvo en la junta directiva de Capital Salud que casi quiebran a esa entidad, al punto que la Superintendencia de Salud la tuvo que intervenir.
La historia data de hace ocho años, cuando, tras pasar por la secretaría de Salud, Aldo Cadena fue designado por el entonces alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, como su representante en la junta de Capital Salud, la EPS de la ciudad financiada con un 51 por ciento de capital público y un 49 por ciento de capital privado, puesto por Salud Total.
Según la auditoría forense que realizó la firma KPMGE, en el último año de la administración distrital de Petro, Cadena, junto con el gerente de Capital Salud, Alaín Jiménez, cometieron varias irregularidades que pusieron en jaque a Capital Salud y que la dejaron con deudas por 480.000 millones de pesos a 14 de los 22 hospitales de la ciudad.
Esas irregularidades, según la auditoría forense, tuvieron que ver, entre otras cosas, con la celebración de contratos sin el cumplimiento de requisitos legales, la firma de contratos sin supervisión o sin pólizas, la entrega de importantes recursos a dedo, así como la adjudicación de procesos con un único oferente.
Según KPMG, por ejemplo, de 37 contratos seleccionados para revisión, 23 se entregaron por contratación directa, sólo 10 tuvieron licitación pública y cuatro se adjudicaron utilizando otra modalidad. La firma señaló en su momento que justamente esos contratos que se dieron “a dedo” fueron por los que más pagó la EPS: más de 31.000 millones de pesos. Los que sí tuvieron el debido proceso, que fue la licitación, involucraron recursos por un poco menos de la mitad, es decir, por 14.000 millones de pesos.
Sin embargo, los 10 contratos entregados bajo la figura de licitación no tuvieron procesos completamente transparentes. KPMG informó en su momento que en todos hubo un único proponente sin justificación de la elección del mismo, “vulnerando de esa manera los principios de pluralidad, igualdad, transparencia e imparcialidad”.
El documento concluyó afirmando que la gestión de la gerencia de Capital Salud en 2015 fue deficiente y contraproducente a los intereses financieros de la entidad. Lo más grave es que la firma logró evidenciar que sí hubo una clara violación al Estatuto Anticorrupción.
Por eso, Luis Gonzalo Morales, exsecretario de Salud en el gobierno de Enrique Peñalosa, recordó en diálogo con CAMBIO que se había presentado una denuncia penal contra el gerente de la EPS, Alaín Jiménez, y contra Aldo Cadena, como presidente de la junta directiva.
Morales explicó, además, que en agosto de 2014, la administración Petro en Bogotá cambió el gerente de Capital Salud de manera irregular, desconociendo los estatutos de la empresa. Fue así como llegó, desde Valledupar, el señor Jiménez.
Debido a esa decisión, aprobada por la junta directiva que presidía Aldo Cadena, en 2015 el socio de Capital Salud, es decir, Salud Total, convocó a un Tribunal de Arbitramento con el fin de tumbar el nombramiento, alegando que al gerente lo debían elegir ellos.
Aunque años después se logró recuperar a la EPS con una capitalización de más de 400.000 millones de pesos y la SuperSalud le levantó la medida de intervención, se encontró que más de 800 personas fueron contratadas sin justificación y el daño que se le hizo a la entidad, según el exsecretario Morales, fue enorme.
Opiniones sobre el nombramiento de Cadena en la Nueva EPS
CAMBIO conversó en vivo con los representantes a la Cámara Andrés Forero, del Centro Democrático, y Alfredo Mondragón, del Pacto Histórico, quienes opinaron sobre el futuro de la Nueva EPS en manos del exsecretario de salud de Bogotá y amigo del presidente Petro, Aldo Cadena.
Forero señaló que el nombramiento, del que se venía especulando desde hace ya tiempo y que se materializó esta semana, es una mala noticia para los afiliados de la Nueva EPS, y que, con esa decisión, el presidente de la República lo que muestra es que está premiando a aquellos funcionarios que tuvieron un mal desempleo cuando fue alcalde de Bogotá.
“Así como pasó con Carolina Corcho, que la nombraron ministra de Salud a pesar de haber sido declarada insubsistente cuando Petro fue alcalde, ahora nombran a Cadena que tuvo una mala gestión en la secretaría de Salud en esa misma administración, después se fue a hacer campaña por la reelección de Santos y regresó a ser director del IDRD también con bastantes cuestionamientos”, explicó el congresista.
Agregó que Cadena es, además, una persona que no tiene una formación en salud y “a través de un mecanismo de presión a las cajas de compensación, se logró que quedara como presidente de la EPS más grande del país. Por eso hay una gran preocupación sobre lo que pueda pasar. Sería muy lamentable que con la Nueva EPS se haga política, eso podría reeditar lo que ya hizo Petro con Capital Salud, la EPS de la ciudad”.
Por su parte, el representante Alfredo Mondragón fue enfático en asegurar que todo funcionario público que asume responsabilidades de orden administrativo y de ejecución de políticas de Gobierno está sometido a todo tipo de observaciones, revisiones y control; y si hay hallazgos, las autoridades tienen que actuar y no dejar que esos proceso duerman el sueño de los justos.
Sin embargo, cuestionó la procedencia de la auditoría forense que evidenció los pasivos con los que Cadena dejó a Capital Salud: “La información que yo tengo es que el señor Aldo Cadena hoy, después de casi una década de haber hecho esa gestión en la EPS de la ciudad, no tiene ninguna investigación o sanción penal, disciplinaria o fiscal. Si hay una información tan contundente de una prestigiosa firma auditora, ¿por qué no han actuado los entes de control?”.