¿No más perros en labores de seguridad y vigilancia? Esto propone un proyecto de ley
14 Enero 2023

¿No más perros en labores de seguridad y vigilancia? Esto propone un proyecto de ley

La senadora Andrea Padilla anunció un proyecto de ley que busca prohibir el uso de perros en actividades de seguridad y vigilancia. CAMBIO conversó con representantes del gremio sobre la propuesta.

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La senadora y activista por los derechos de los animales, Andrea Padilla, anunció un nuevo proyecto de ley que busca prohibir el uso y la explotación de perros en actividades de seguridad y vigilancia. No obstante, recientemente, algunos representantes de las empresas de seguridad privada han dado declaraciones mostrándose en desacuerdo con la propuesta. 

CAMBIO le provee un panorama general de lo que propone Andrea Padilla y lo que piensan las empresas privadas de seguridad y vigilancia. ¿Ambas partes podrían llegar a un acuerdo en el futuro?

¿Qué se sabe del proyecto de ley de la senadora Andrea Padilla?

En un video publicado en su cuenta de Twitter, la senadora explicó el paso a paso de la agenda de trabajo del proyecto.

Andrea Padilla manifestó que el primer paso es revisar la resolución que rige esta actividad para hacer algunos ajustes inmediatos y “que puedan modificarse por vía de Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada”.

Luego, mencionó que el segundo paso es “establecer una agenda de trabajo para visitar fincas donde están los perros, empresas... y conocer bien las entrañas de la actividad”. Puntualmente, con las visitas se quiere responder a los siguientes interrogantes: “¿cuáles son los problemas? y ¿dónde hay que apretar de manera urgente el sector?”, según la senadora.

El tercer paso es hacer un foro con las empresas de los sectores público y privado para revisar cómo transitar hacia el uso de tecnologías y así disminuir la utilización de perros progresivamente y “hacer ajustes en bienestar en aquellos sectores donde no se pueda eliminar de manera inmediata el uso de los perros”.

¿Qué dicen las empresas privadas?

CAMBIO habló con Nicolás Botero, presidente ejecutivo de Fedeseguridad, agremiación de compañías líderes del sector de vigilancia y seguridad privada. Botero dio su opinión frente al proyecto de ley propuesto por la senadora Padilla.

“De manera general, podría decir que las prohibiciones a raja tabla no son lo ideal e, igualmente, no tenemos claro cuál es la problemática que se quiere resolver con esta prohibición”, manifestó Botero. Sin embargo, expresó que sí está de acuerdo con mejorar la regulación existente.

Agregó que Fedeseguridad rechaza cualquier caso de maltrato o abuso animal y quien tenga ese tipo de prácticas en el sector recibirá una sanción.

“Hay que revisar entre el balance de protección a la vida y bienes de las personas y la protección animal, que es lo ideal. El perro sigue siendo un apoyo para ciertas actividades que no tienen sustituto”, comentó.

CAMBIO también conversó con el presidente de la Confederación Nacional del Gremio de la Vigilancia Privada (Confevip), Miguel Ángel Díaz, quien dio una clara respuesta a la propuesta formulada por la senadora.

“Con relación al proyecto de ley de la senadora, nos parece que es importante que consulte todos los actores que intervienen en pro de la preservación de la utilidad y del servicio que prestan en sus caninos, que son únicos y que, realmente, la tecnología hoy no ha rebasado. Cuando exista evidencia científica, seguramente daremos el tránsito”, manifestó.

Díaz dio el ejemplo del centro comercial Andino, que por no contar en su momento con perros detectores de explosivos, tuvo un atentado terrorista en 2017.

Así mismo, aclaró que los perros reciben apoyo psicológico, tienen un espacio para el descanso, asistencia médica a través de un veterinario, buena alimentación, medicamentos si lo requieren, “protección, cuidado y cariño”.

También, comentó que en caso de haber un hecho relacionado con maltrato animal, se recurren a ciertos protocolos.

“Primero, se realiza el retiro inmediato de la operación del servicio; segundo, se da atención inmediata y traslado a un centro médico veterinario; tercero, la aplicación de medicamentos si fueron ordenados por el médico veterinario; cuarto, se da un espacio de recuperación; y quinto, una preparación física y psicológica nuevamente para su trabajo”, indicó.

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