¿Incapacidad falsa?: la jugadita del abogado de Nicolás Petro en un proceso de divorcio multimillonario

El pasado 2 de abril fue un día ‘agitado’ para el abogado Diego Henao, un jurista que saltó al escenario nacional por ser el apoderado de Nicolás Petro Burgos en el proceso en su contra por presunto enriquecimiento ilícito.

Ese martes, Henao cerró su jornada con un generoso almuerzo en La Bifería. Vestido de traje, el abogado atendió reuniones durante dos horas en el local ubicado al norte de Bogotá, famoso por sus cortes de carne. Pero lo que de entrada parece un inocente almuerzo se convirtió en la pieza clave de un presunto fraude procesal. Esta es la historia.

El divorcio de Gustavo Ulloa Cerón y Ana Torres

Desde 2019 se adelanta el proceso de divorcio entre el empresario inmobiliario Gustavo Ulloa Cerón y su exesposa Ana Torres, quienes duraron casados 11 años. 

La separación ha provocado más de 40 procesos judiciales por diferencias entre las partes y aparentes maniobras jurídicas de Ulloa y sus defensores para proteger su fortuna estimada en más de 200.000 millones de pesos. La estrategia más utilizada por el empresario ha sido la de remover a Torres, con maniobras presuntamente ilegales, de varias sociedades que conformaron juntos durante la década en la que estuvieron casados.

Una de esas sociedades es Proyecto 81 S.A.S, propietaria de la casa en la que vive Torres y la hija del matrimonio. Ulloa retiró a su exesposa como gerente de esa sociedad presuntamente mediante un acta falsificada.

Por ese caso, en septiembre de 2023 la Fiscalía le imputó cargos por fraude procesal y falsedad en documento privado a Gustavo Ulloa y Carlos Páez Martín, otro de los abogados de confianza de Ulloa y socio de la firma de la que también hace parte Diego Henao.

Producto de este pleito, Ulloa Cerón fue citado a una audiencia virtual para el restablecimiento de derechos de Ana Torres. La audiencia comenzó el 2 de abril de 2024 a las 9:00 a.m., sin embargo, después de 20 minutos de espera, Ulloa no apareció. 

Ante la ausencia de Ulloa, el despacho judicial no tuvo más remedio que cancelar la audiencia, por lo que el proceso se dilató. El abogado Diego Henao le comunicó al juzgado que su cliente no se conectó porque tenía una incapacidad médica. 

“El Dr. Diego Henao Vargas en calidad de defensor de confianza manifestó que su prohijado el señor Gustavo Adolfo Ulloa Cerón no se podía conectar a la audiencia, toda vez que se encontraba incapacitado por una cirugía que hacía poco le habían practicado”, dice en el acta del juzgado en la que se dejó constancia de que la audiencia no se realizó. 

Como era su deber, la secretaria del juzgado le pidió a Ulloa y a Henao al día siguiente que remitieran la excusa médica, pero esta no llegó. La secretaria insistió a través de correo electrónico del 8 de abril, pero el papel nunca apareció. Fue así como, entre las comunicaciones y las ‘dejadas en visto’, se venció el plazo máximo que establece la ley para presentar las excusas. 

La reunión en La Bifería el 2 de abril 

Pero lo que no sabía el juzgado para entonces es que ese 2 de abril, mismo día en el que el señor Ulloa supuestamente no estaba en condiciones físicas ni siquiera para conectarse a una videollamada, se reunió con su abogado Diego Henao durante más de una hora en el restaurante La Bifería en Bogotá. La reunión no está soportada en testimonios o rumores. Ni siquiera en fotografías. Las pruebas son los videos de las cámaras de seguridad del local comercial conocidos por CAMBIO.

En las grabaciones se ve primero a Henao conversando con Germán Gómez Remolina, el abogado de Ana Torres, exesposa de Ulloa, sobre la 1:20 de la tarde. Los dos colegas conversan mientras les asignan una mesa. El objetivo era llegar a un acuerdo entre sus representados y evitar más largas en los tribunales. 

Al analizar las imágenes se ve que Henao está vestido con un traje formal oscuro con chaleco, camisa clara y pañuelo claro. Es la misma vestimenta que usó ese día en la audiencia a la que se conectó para excusar a su cliente Ulloa. Así consta en el acta de no realización de la audiencia:
 

En otra de las tomas aparece el señor Gustavo Ulloa ingresando a La Bifería sobre las 2:29 de la tarde. Sí, el mismo que argumentó estar incapacitado, entró sin problema al restaurante con gafas de marco grueso, blazer oscuro, jean azul, camisa clara y tenis negros con punta blanca. 

Ulloa se dirige directamente a la mesa donde estaba su abogado, es decir, no fue un encuentro casual. Por ello, a Henao no le sorprendió en lo absoluto ver a su cliente sano y dispuesto a hablar con el apoderado de su exesposa. Henao extendió su mano y llamó a Ulloa a sentarse a la mesa en donde también estaba el abogado Gómez Remolina. Los tres conversaron durante unos 25 minutos. 

Sobre las 2:55 p.m., según se puede ver en el video, Henao y Ulloa se levantan de la mesa y se despiden de Gómez Remolina. Primero sale Ulloa, sin inconvenientes, y luego, apurado, sale el abogado Diego Henao. 

Ante la rápida recuperación del señor Ulloa, una cuestión de horas, su exesposa, Ana Torres, informó al fiscal del caso sobre la situación. La señora Torres solicitó que se compulsaran copias en contra de Ulloa y Henao por presunto fraude procesal, pues su abogado se dio cuenta de que Ulloa no tuvo problema en ir al restaurante y encontrarse con los dos juristas. El fiscal procedió a verificar los hechos y pidió los videos de las cámaras de seguridad de La Bifería.

Luego de revisar los videos aportados por el restaurante y otras evidencias, el fiscal Mauricio Penna Jaramillo accedió a la compulsa de copias para investigar a Gustavo Ulloa y Diego Henao. Así lo dejó claro Jaramillo en el documento que remitió a la Fiscalía el 4 de junio pasado:

El proceso fue asignado el pasado 25 de junio a la Fiscalía 83 especializada, que se encargará de continuar con la investigación y determinar si Henao y Ulloa son responsables del presunto fraude procesal.

CAMBIO se comunicó con el abogado Henao para conocer su versión de los hechos. Sin embargo, al cierre de este artículo no hubo respuesta.