Las mascotas no pueden ser embargadas en un proceso judicial: Corte Constitucional

De manera unánime la Sala Plena de la Corte Constitucional decidió que los animales de compañía, es decir las mascotas, no pueden ser embargados en un proceso judicial

La Corte incluyó a las mascotas en el listado de bienes que no pueden embargarse con los propósitos de proteger los derechos fundamentales de los dueños de estos animalitos al libre desarrollo de la personalidad y a la intimidad personal y familiar, y de garantizar el principio de la dignidad humana, del cual se deriva un deber de protección animal.

Con ponencia de la magistrada Natalia Ángel Cabo, la Sala Plena estudió una demanda que presentó el abogado animalista en contra de apartados del Código Civil y de la Ley 1554 de 2012, en donde se listan 16 elementos que no pueden embargarse a una persona.

Esa lista incluye, por ejemplo, el salario mínimo, las herramientas de trabajo del deudor o su habitación, así como los uniformes militares o las condecoraciones, las rentas incorporadas en el Presupuesto General de la Nación y los depósitos de ahorro o los bienes de uso público, cuando estos se presten directamente por una entidad descentralizada. Pero esa ley no decía nada sobre mascotas.

La Sala Plena dijo que el Congreso incurrió en una omisión al no mencionar a las mascotas. Así, la Sala dijo que "la tenencia de un animal de compañía hace parte del goce efectivo de los derechos al libre desarrollo de la personalidad, a la dignidad humana y a la intimidad".

"Segundo, al permitir el embargo de los animales de compañía, el Congreso desconoció el deber de protección animal, así como su reconocimiento como seres sintientes".

El caso de Romeo y Salvador

Aunque pueda sonar extraño, sí hubo casos en que mascotas fueron embargadas. El caso más sonado el de Romeo y Salvador*, dos perritos que quedaron en medio de un debate judicial por cuenta del divorcio de sus dueños humanos y sobre los cuales un juez dictó una medida de embargo y secuestro.

Ese caso también está en estudio en la Corte, pero en una tutela, en donde se espera que la haga un pronunciamiento de fondo sobre la familia multiespecie. Es decir, que el alto tribunal podría entrar a definir por esa vía si  las mascotas pueden considerarse parte de la familia.