Reforma a la salud superó el debate en la Cámara y ahora viene la prueba del Senado
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El Gobierno se anotó una victoria en segundo de cuatro debates que debe tener la reforma a la salud. El proyecto superó la plenaria de la Cámara pero las cuentas en el Senado amenazan su futuro.
Por: Andrés Mateo Muñoz
Después de más de cinco meses de discusión, controversias y tensiones entre el Gobierno y los partidos políticos con representación en el Congreso, la reforma a la salud logró superar su segundo debate en la plenaria de la Cámara.
En la noche de este 5 de diciembre la Cámara de Representantes aprobó los últimos artículos que estaban pendientes por discutir, como el que le otorga facultades extraordinarias al presidente Gustavo Petro. El jefe de Estado tendría, durante un periodo de seis meses en los que podrá expedir decretos con fuerza de ley que "garanticen la consulta y consentimiento libre, previo e informado de pueblos indígenas, comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras y del Pueblo Rom”.
Sin embargo, no pasó la facultad extraordinaria para que el presidente Petro pudiera realizar las acciones necesarias "para capitalizar a la Nueva EPS".
También se cayó el controversial artículo 42. Este apartado establecía la forma de la elección de los directores de hospitales departamentales y municipales dejándola en potestad de alcaldes y gobernadores, que fue una petición expresa del ministro del Interior Luis Fernando Velasco.
Además del respaldo del Pacto Histórico y Comunes, el Gobierno logró apoyos claves de la bancada liberal, la curules de paz, una parte del Partido Verde, y la mayoría del Partido de La U. A sectores críticos del proyecto no les alcanzó para seguir frenando la discusión y ahora le apuestan a que la reforma a la salud se hunda en el Senado.
Ahora la reforma a la salud tendrá que medirse en la Comisión Séptima del Senado en donde si bien hay figuras fuertes del petrismo como Wilson Arias y Martha Peralta, no están garantizados los votos para que el proyecto avance y mucho menos en la plenaria de esa corporación. Se espera que en el próximo periodo legislativo el Gobierno vuelva a alistar su artillería para evitar que el Senado sea el lugar en donde la reforma encuentre su fin.
